Buena comedia de Álvaro Fernández Armero, de quien hace mucho tiempo no veía un nuevo trabajo.
Ha merecido la espera, no en vano se trata de una estupenda comedia, con fondo muy dramático, como la vida misma, pero bajo el prisma del humor.
Un estupendo guión a quien los excelentes intérpretes ayudan en las diversas situaciones, a veces cachondas, otras dolorosas (el padre con Alhzeimer, y otras que dan vergïenza ajena, no porque sean gruesas o chabacanas, sino porque algunos personajes nos hacen reír y al mismo tiempo mirar hacia otro lado ante sus desatinos (el personaje de Candela Peña).
Muy buenos diálogos, fotografía a toda pantalla, y una elegancia formal, que denotan un buen gusto generalizado.
El resultado final es una cinta que deja un inmejorable sabor de boca.

(Comentario extraído de mi humilde blog: http://filmsencajatonta.blogspot.com.es)