Robert Downey Jr. siempre nos ha gustado como interprete a pesar de sus altibajos como consecuencia de los problemas que ha confrontado en su vida privada. Aunque al parecer, con Iron Man ha reverdecido laureles, y su carrera se ha revitalizado lo suficiente. Iron Man, no es más que otra película inspirada en los comics y súper héroes hoy tan en boga dentro del cine estadounidense y que ya empiezan a cansarnos debido a un uso exagerado de los efectos especiales. Pareciera que el derroche de lo tecnológico y los efectos especiales va a terminar de anular la manera clásica y muy humana de entender al cine. En Iron Man volvemos a presenciar una sosa lucha entre el bien y el mal, sólo que la interpretación de Downey Jr., simpática y espontánea, permite aguantar la larga duración de la película. Otra película infantil destinada a los adultos.