Haz click aquí para copiar la URL
You must be a loged user to know your affinity with El Libanés
Voto de El Libanés:
6
Voto de El Libanés:
6
Aventuras. Romance En el siglo IV, Egipto era una provincia del Imperio Romano. La ciudad más importante, Alejandría, se había convertido en el último baluarte de la cultura frente a un mundo en crisis, dominado por la confusión y la violencia. En el año 391, hordas de fanáticos se ensañaron con la legendaria biblioteca de Alejandría. Atrapada tras sus muros, la brillante astrónoma Hypatia (Rachel Weisz), filósofa y atea, lucha por salvar la sabiduría del ... [+]
10 de septiembre de 2015 4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Existía una fuerte expectación por el nuevo film de Alejandro Aménabar. El osado director que experimentaba con todos los géneros y formas de narrar daba un salto al drama histórico, nada menos que a la floreciente Alejandría del siglo IV d.C. Contaría con una actriz de la talla de Rachel Weisz como la inteligente Hypatia, una mujer adelantada varios siglos a su tiempo, dispuesta a chocar con la cara más oscura del fundamentalismo.

Además, la escena inicial ya advierte que será un mundo de tonos grises. Son los cristianos los primeros en ser atacados sin motivo en la película. La obra de Aménabar no es un grito contra ninguna religión en concreto. El riesgo es el poder que puede alcanzar una religión oficial, especialmente en manos de una élite corrupta, dispuesta a manipular la buena voluntad de sus acólitos para lanzarlos contra otros credos o personas que discrepen de ellos.

Hasta este punto, todo fantástico, muy buen uso también de los recursos digitales para ambientar la época. ¿Y después? Nada. Ni siquiera la historia del amor frustrado de Davo, muy bien interpretado por Max Minghella, un esclavo sinceramente enamorado de Hypatia y que se debatirá entre ella y una nueva religión que le puede otorgar un bien tan preciado como la libertad. Sin embargo, ¿estaría dispuesto a pagar el precio?

Todo se intuye apasionante, entonces, mi pregunta incómoda con Ágora es porque no me llega, particularmente en mi caso, la calidez que semejante epopeya debería transmitir. Todo termina resultando más frío de la cuenta, inclusive demasiado racional. Uno está ante una película que quiere parecer grande y solemne, lo logra, aunque uno como espectador no quiere que lo aparente, sino que lo logre.

Hay momentos inacabados que podrían haber deparado mejores clímax, como la relación de Hypatia con su padre. Aménabar mira más por el microscopio que ese punto rebelde de romanticismo que este gran director, sensacional me atrevería a decir, no tiene en ese sentido. Todavía creo que le falta esa última pieza a su mente brillante de artista.

Veo este Faro de Alejandría con respeto silencioso. Prefería que me conmoviese.
arrow
Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
Se muestran resultados para
Sin resultados para