Debo confesar que yo también tuve una etapa o período que me encantaba Woody Allen y todavía me gusta pero creo que me deje llevar y recuerdo un maratón de todas sus películas hasta ese momento, era antes de la pandemia y es cierto que hay mucha terapia o sabios consejos en sus trabajos cinematográficos sobre la vida y las relaciones personales que aquí se exprimen hasta la última gota. Realmente es un homenaje a su figura.

Me extraña que no hable de "Si la cosa funciona" que es una de mis películas favoritas de Woody Allen pero la manera de la protagonista para refugiarse en su cine pues me gusta porque creo que de una u otra manera el cine es a veces una vía de escape de los problemas cotidianos o de lo que no nos gusta en la realidad pero al mismo tiempo le hace un incapaz de ver los problemas de las personas de su entorno...

Con hermanas así, no necesitas enemigas. De nuevo, el estigma social de no tener pareja si tienes más de treinta años aparece como las golondrinas en la primavera. Las citas que salen mal. La presión familiar para casarte y tener hijos y el deseo de querer algo más o por lo menos vivir una vida lo más auténtica posible.

Si hubiera una segunda parte estoy seguro que la protagonista acaba montando un videoclub o un museo/cine con ciclos y festivales de Woody Allen porque es increíble pero es un reflejo de una sociedad influenciada por la cultura americana desde que nos despertamos desayunando tortitas hasta que nos acostamos después de cenar hamburguesas. A pesar de todo, esta bien para pasar la tarde.

Momento favorito: El cloroformo...
Momento dudoso: Se le ve todo bajo el vestido rojo a la protagonista...