Mucho más brillante el resultado del plan, que el guión y la ejecución del mismo, exento totalmente de brillantez. Este pretencioso plan de robar en la fuente del mercado de diamantes mundial no es más sorprendente porque el cerebro del mismo es el trabajador más humilde del cotarro, uno de sus limpiadores, y por la extrema sencillez de su plan, perfectamente ejecutado más si pensamos dónde oculta dos toneladas de diamantes con tan aparente sencillez.

Aunque un tanto lenta y falta de alma en comparación a otras películas de grandes atracos con una gran alharaca de medios, glamour y extravagantes máquinas que ayudan y preceden a su ejecución, Michael Radford apuesta por un sencillo y efectivo plan donde el ejecutor es un veterano y tullido Michael Caine, un anciano al que le cuesta trabajo andar y levantarse, ayudado por la única mujer de este emporio con puesto ejecutivo, algo que sigue pasando en nuestros días aunque la película se ubica en los años sesenta del siglo pasado, una "retocada" Demi Moore.

Ni punto de comparación el savoir faire de un actorazo como Michael Caine comparado con su partenaire, una Demi Moore que nunca llegó a ser un gran actriz y que siempre se apoyó en su físico y en su belleza angelical, incluso apoya en la dulzura del tono de voz de la actriz de doblaje que le presta cierta candidez que le va de perlas al personaje.

Notable, 7.

Interesante película para ir pasando la cuarentena. La había visto hace no mucho y me gustó, no es muy original ni muy creíble, pero es entretenida. Tiene ritmo y engancha desde el primer momento, las cosas suceden rápidamente y la trama mantiene una tensión que hasta el final.

Los dos protagonistas se reencuentran después de más de veinte años, ya trabajaron juntos en la maravillosa Lio en Rio donde interpretan a un padre y a una hija de vacaciones en Río de Janeiro.
En esta ocasión tienen relación porque trabajan en la misma empresa, resulta poco creíble que un señor de 74 años este aun trabajando, aunque esté a punto de jubilarse.
Pero es sin duda Michael Caine el que lleva todo el peso de la película sobre sus hombros, una película hecha para él, un hombre inteligente con una gran paciencia que espera su momento para hacer algo grande.
Demi Moore acompaña perfectamente al veterano actor en un papel de ambiciosa ejecutiva al que el viejo limpiador enseñara a vivir y a salir al mundo. Su papel de mujer en un mundo de hombres resulta interesante porque tiene un halo de tristeza por la vida que ella misma a elegido.

La serenidad que transmite el personaje de Caine, un Robin Wood anciano que sigue queriendo a su esposa que falleció, al que no le importa nada el dinero ni los diamantes, como dice el personaje hacia el final de la cinta. Nada de merezca la pena tiene que ver con el dinero, o algo asi. Woody Allen y Groucho Marx tienen frases más ingeniosas relacionadas con el dinero. Pero esta película no es una comedia, es una de robos

Película correcta, estilo clásico, entretenida, Demi Moore deja de ser la típica mujer sexy para meterse en un mundo controlado por los hombres en la que ella es la más lista y capaz a la que no dejan ascender por ser mujer, de ahí que junto con Michael Cain3 idean el plan.
Tiene cierta similitud y nos pude recordar a “Plan Oculto” de Spike Lee con Denzel, pero este film es mas convencional y con menor carga de intriga, lo que hace que este film sea fácil de ver es justo por lo contrario. por la sencillez en cuanto al desarrollo de la historia y en planos cinematográficos.
Es una película recomendable que se hace amena y llega a gustar, no es una gran película pero no te arrepentirás si la ves de haberla visto.

Demi Moore ajusta su interpretación con soltura a una ejecutiva solvente, Laura Quinn de la London Diamond Corporation. Podría pensar que la intriga se mantiene porque no sabes como se ha perpetrado el robo...

Tal vez la investigación se vuelve farragosa. Aunque la vi hace años, no la recordaba bien. Sé que la valoré en su momento con un ocho. Mantendré la nota que le di, aunque hoy la rebajaría un poco.

Película bien realizada en la que una correcta Demi Moore queda queda eclipsada cada vez que aparece el señor Michael Caine, quien en esto de actuar le lleva una considerable ventaja.

Que nadie espere ver similitudes con "La trampa" o las pelis del señor Ocean y compañía porque a diferencia de las otras ésta no tiene un plan tan urdido. Quizá por ello sea un tanto pesada en algunos momentos aunque no por ello deje de ser un entretenimento correcto.

La trama es como una novelita de Agatha Christie en la que se intenta averiguar quién ha robado las joyas de una importante empresa londinense que abastece a todo el planeta.

No hay que dejar pasar que se tocan temas como la discriminación laboral de la mujer, que en los años 60 era mucho más evidente que en nuestros tiempos; que aún la hay por supuesto aunque cada vez menos.