Rocky IV
5.9
25,132
6 de diciembre de 2023
6 de diciembre de 2023
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Plenamente vigente, el viejo duelo entre Estados Unidos y Unión Soviética (hoy en día Rusia).
Gran espectáculo que repite el argumento de Rocky III, cambiando el rival y ante el entorno hostil de la URSS. Entretenimiento a raudales y poco más, que refleja la vieja batalla tendenciosa y manipuladora del capitalismo yanqui sobre el comunismo ruso.
Trata al espectador de manipularlo y comprometerlo en la lucha contra el decadente comunismo ruso, pero joder, que entretenida es y menuda banda sonora.
Gran espectáculo que repite el argumento de Rocky III, cambiando el rival y ante el entorno hostil de la URSS. Entretenimiento a raudales y poco más, que refleja la vieja batalla tendenciosa y manipuladora del capitalismo yanqui sobre el comunismo ruso.
Trata al espectador de manipularlo y comprometerlo en la lucha contra el decadente comunismo ruso, pero joder, que entretenida es y menuda banda sonora.
28 de septiembre de 2010
28 de septiembre de 2010
8 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
No estamos ante una peli más de la saga Rocky, ésta película es cine de propaganda pro-americano y anti-soviético, así sin más. No es que esté defendiendo a la URSS, pero la peli es eso, cine de propaganda norteamericano en plena guerra fría. Sólo por eso se merece ser la peor de la saga.
22 de junio de 2014
22 de junio de 2014
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aunque parezca imposible, más flipante que "Rocky III" (1982), cosa que se anuncia con esos míticos puños que explotan al empezar, además de más patriótica. De forma totalmente injusta, entre ésta y "Rambo II" (1985) recibió ese año Sylvester Stallone 16 nominaciones a los Razzies de las que 9 acabaron siendo premios, lo que sólo es revelador de la inquina hacia su figura, me temo que en los círculos más progres. Sin embargo, su calidad, dentro del género, es palpable lo que explica que nuestro actor-director-guionista lograra la proeza, no sé si igualada, de colocar a su "Rambo II" y a su "Rocky IV" en el número tres y dos respectivamente de las más taquilleras del mundo de 1985. Es cierto que la película es argumentalmente un poco simple a pesar de su importancia geopolítica en la que se termina abogando por algo parecido a la "coexistencia pacífica" pero también que su desenfado, frescura y capacidad de emocionar es enorme. Mucha atención a sus cortes musicales como el del entrenamiento en la nieve, o mejor aún, con el "No easy way out", más de cuatro minutos maravillosos de una conjunción perfecta entre imágenes y sonido. Una pasada. Que aprendan hoy día ha realizar videoclips. En cuanto a las críticas a la obra, muchas no están legitimadas cuando se la confunde con la 5 o se le atribuye la canción "Eye of the Tiger" que es de la 3.
Ahora bien, algunos no le perdonan su "ataque" a la Unión Soviética. El marxismo, tras renunciar de partida a la ética y al sentimiento, últimamente lo ha hecho de la razón y eso que se las daba de científico. Su defensa o su ataque, por ejemplo a esta película, se basa en repetir consignas esclerotizadas como "mentira", "fascista", "propagada" o "anticomunista". Así, si usted le explica a un izquierdoso que en 1985, además de la pobreza interna y la guerra externa que patrocinaba la URSS, había miles de presos políticos, en cárceles, centros psiquiátricos o en el sustituto del Gulag como trabajo esclavo, puede mencionar al activista Alexander Ogorodnikov, al padre Gleb Yakunin, a la escritora Irina Ratushinskaya o el físico Yuri Orlov; los 700.000 agentes de la KGB en 1986, más otros 250.000; la férrea censura que impedía publicar hasta la criminalidad o los desastres naturales; o los 200.000 muertos, según Green Peace, causados por Chernobyl (1986), especialmente entre los liquidadores más adultos abandonados a su suerte según la consigna "Ellos ya han tenido hijos y ya no esperan nada más de la vida”, así que se mueran, la respuesta será siempre la misma: "mentiras burguesas", "discurso fascista", " propaganda capitalista" y "anticomunista fanático". Es siempre igual y no hace falta argumentarla. ¡Es la defensa perfecta!
Ahora bien, algunos no le perdonan su "ataque" a la Unión Soviética. El marxismo, tras renunciar de partida a la ética y al sentimiento, últimamente lo ha hecho de la razón y eso que se las daba de científico. Su defensa o su ataque, por ejemplo a esta película, se basa en repetir consignas esclerotizadas como "mentira", "fascista", "propagada" o "anticomunista". Así, si usted le explica a un izquierdoso que en 1985, además de la pobreza interna y la guerra externa que patrocinaba la URSS, había miles de presos políticos, en cárceles, centros psiquiátricos o en el sustituto del Gulag como trabajo esclavo, puede mencionar al activista Alexander Ogorodnikov, al padre Gleb Yakunin, a la escritora Irina Ratushinskaya o el físico Yuri Orlov; los 700.000 agentes de la KGB en 1986, más otros 250.000; la férrea censura que impedía publicar hasta la criminalidad o los desastres naturales; o los 200.000 muertos, según Green Peace, causados por Chernobyl (1986), especialmente entre los liquidadores más adultos abandonados a su suerte según la consigna "Ellos ya han tenido hijos y ya no esperan nada más de la vida”, así que se mueran, la respuesta será siempre la misma: "mentiras burguesas", "discurso fascista", " propaganda capitalista" y "anticomunista fanático". Es siempre igual y no hace falta argumentarla. ¡Es la defensa perfecta!
25 de julio de 2009
25 de julio de 2009
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sylvester Stallone regresa por cuarta vez como Rocky Balboa en esta cuarta entrega de la saga, tan correcta y digna como las dos anteriores, pero, previsiblemente, sin llegar al nivel de la primera.
Aunque, si ya tienes asumido que si sigue por este camino ninguna será como la primera, disfrutarás mucho más de esta secuela.
Los combates siguen enganchando con oficio y el entretenimiento del bueno está garantizado.
Otra buena e interesante entrega de Rocky.
Aunque, si ya tienes asumido que si sigue por este camino ninguna será como la primera, disfrutarás mucho más de esta secuela.
Los combates siguen enganchando con oficio y el entretenimiento del bueno está garantizado.
Otra buena e interesante entrega de Rocky.
18 de noviembre de 2010
18 de noviembre de 2010
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con Rocky IV terminó el mito y comenzó la comercialización tanto para el personaje de Rocky y para el film.
Stallone siempre sabe buscar en Rocky un fin, una meta, unas frases modelo bonitas que hicieron del gran boxeador de los barrios bajos de Filadelfia un hombre elegante y refinado estropeando así la idea base de este mito.
Stallone escribe este guión destrozando por completo la idea base pues entre el robot y su amigo Apolo crean una historia forzada en contra del sistema soviético, parece ser que había que afianzarse en sus ideas americanas y Rocky lo consigue muy bien, pues crea una lucha sin igual con el monstruo soviético.
La película pierde todo encanto y para mí quizás sea la peor de todas, la música es la más barata de todas, al cambiarla y sustituirla por canciones del momento parece convertir el entrenamiento y preparación de Rocky en un video musical de los años ochenta.
La película tiene ritmo y es entretenida pero en ciertos momentos resulta muy pero que muy barata como los diálogos con su hijo y el famoso y tonto robot...de verdad Stallone, te sobraste.
Roto el mito Rocky al cien por cien, Stallone intenta salvar la situación como puede con frases bonitas al final del torneo.
Una de las cosas que siempre me gusta de todas las películas de Rocky es la relación de amor y de apoyo que existe entre Rocky y su mujer, una relación de apoyo en cada momento de dificultad que la vida les pone.
Stallone siempre sabe buscar en Rocky un fin, una meta, unas frases modelo bonitas que hicieron del gran boxeador de los barrios bajos de Filadelfia un hombre elegante y refinado estropeando así la idea base de este mito.
Stallone escribe este guión destrozando por completo la idea base pues entre el robot y su amigo Apolo crean una historia forzada en contra del sistema soviético, parece ser que había que afianzarse en sus ideas americanas y Rocky lo consigue muy bien, pues crea una lucha sin igual con el monstruo soviético.
La película pierde todo encanto y para mí quizás sea la peor de todas, la música es la más barata de todas, al cambiarla y sustituirla por canciones del momento parece convertir el entrenamiento y preparación de Rocky en un video musical de los años ochenta.
La película tiene ritmo y es entretenida pero en ciertos momentos resulta muy pero que muy barata como los diálogos con su hijo y el famoso y tonto robot...de verdad Stallone, te sobraste.
Roto el mito Rocky al cien por cien, Stallone intenta salvar la situación como puede con frases bonitas al final del torneo.
Una de las cosas que siempre me gusta de todas las películas de Rocky es la relación de amor y de apoyo que existe entre Rocky y su mujer, una relación de apoyo en cada momento de dificultad que la vida les pone.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here