Murieron por encima de sus posibilidades

Una venganza contra los peces gordos responsables de la crisis es una premisa prometedora. El cine, como plasmación de fantasías revanchistas, puede llegar a ser un medio realmente emocionante (Tuve oportunidad de ver dos veces en pantalla grande "Malditos bastardos" y con el resto del público aplaudí la misma escena en las dos ocasiones. Los que la hayan visto, sabrán de que escena hablo).
Sin embargo, esto no sucede con "Murieron por encima de sus posibilidades".

A pesar de un genial y sorprendente plantel de actores (cada nueva aparición no deja de sorprender), la trama termina por disolverse en un desarrollo cada vez más demencial. De acuerdo, sí, se podrá decir que es una sátira y que la verosimilitud puede dejarse a un lado. Pero el tramo final ya se toma demasiadas licencias con el espectador. Además de mostrar una violencia grotesca.

Del conjunto se puede rescatar las breves apariciones de José Sacristán y Josep Maria Pou, que cuentan con excelentes diálogos. Lástima que el rigor que la película muestra en esos momentos quede diluido por su tendencia al mal gusto.

En definitiva, un buen punto de partida con un reparto irrepetible, lastrado por tanto exceso y tanto feísmo.

El comienzo parece ser otra cosa de lo que al final se convierte este absurdo de película llevada al extremo y lo único un poquito salvable, lo que acontece en los interminables minutos restantes es digno de estudio sociológico.
Nadie en su sano juicio puede entender en tamaño despropósito a un elenco de actores, increíble, la flor y nata del star system patrio desde LUIS TOSAR, EDUARD FERNANDEZ, JOSE CORONADO, RAUL AREVALO, ARIADNA GIL, y un largo etc.. el que se hayan metido en una película tan flojita y tan de baja calidad de no ser por la amistad que les puede unir con el director ISAKI LACUESTA.
Una especie de AIRBAG del siglo XXI, con los efectos de la crisis llevado al extremo de la violencia para defender los atropellos sufridos por ciertos personajes que acaban en un hospital psiquiátrico, y algo del universo berlanguiano aderezado con el ALEX DE LA IGLESIA, mas salvaje, pero que en el cocktail exprimido de todos ellos nos proporciona una delirante propuesta, de un nivel zafio y un aburrimiento insoportable.

Otra "perla" patria que me trago, y van... Buff. De nuevo me enfrento a una producción de la que desconozco por completo y "me lanzo al abismo"... y esta vez me la he pegado pero bien, jajaja (importante no perder nunca, o casi, el buen humor). Prometía cuando, al inicio, aparecían conocidos y gratos rostros del Cine Español pero cuando empieza a rodar el asunto... Un completo desastre. Una idiota, absurda y surrealista historia con una miríada de detalles tanto o más lisérgicos junto con cientos de gags de los de vergüenza ajena. Que me expliquen cómo una comedia nacional de hora y media consigue aburrir tanto. Pues eso, lo dicho. Sólo cabe destacar la buena interpretación de algunos actores (sobre todo secundarios ) y algún que otro chiste con gracia (que pierde bastante mérito después de tantos "tiros errados"). PARA AMANTES DEL SURREALISMO LISÉRGICO "XXL" SIN SENTIDO DEL GUSTO.

Ni por encima ni por debajo de sus posibilidades, volvieron al psiquiátrico después de una buena vomitona. Eso sí, en olor de multitudes tras ajustar cuentas con los que consideraban responsables de la crisis económica.
Ellos eran Iván (Telefunken), Albert (Pla), Miguel (Arévalo), Julio (Villagrán) y Jordi (Vilches), un grupo de cabreados eméticos dispuestos a ajustas cuentas con la humanidad.
Comedia loca, bufa, irreverente, exagerada pero sobre todo caótica. No se trata de convencer a actores conocidos y meterlos a empujones en un no guion, se trata de que la historia tenga alguna estructura, algo de argumento. Aquí brilla por su ausencia.
Lo mismo cabe decir de la ¿realización? o de sus presuntas pretensiones ideológico-artísticas. El disparate por el disparate.
Reconocer no obstante el buen papel que juega el quinteto principal, sobre todo Albert y Jordi.
Es posible que guste a estómagos acostumbrados a dietas fuertes, a exageraciones gástricas, al esperpento vacuo. No es nuestro caso.

Parece increíble que tantos actores de renombre, consagrados y muchos de ellos de categoría se hayan prestado a intervenir en esta película que desde luego tiene pendiente un desafío: saber si en los próximos años alguien es capaz de hacer una película peor. Será complicado.