Una comedia cuya vigencia sigue latente a día de hoy, sigue haciendo reír y sonreír. Sophia Loren sigue seduciendo, con un papel hecho a su medida, llena la pantalla con sus aspavientos, con sus palabras y su mirada. Su potencial, junto al de Mastroianni queda enmarcado para la historia en las tres historias. "Ayer, hoy y mañana" es una de esas películas que definen un registro, el de la comedia a la italiana. A través de películas como esta vemos lo grande que puede ser el cine, de qué manera muestra su propio contexto social y la importancia que tiene este arte para comprender el género humano en sus diferentes épocas. Destila nostalgia pese a que, parece, no es su principal objetivo. En la última historia, además, aparece una de las grandes escenas icónicas eróticas de Sophia Loren.

De nuevo, el ingenio cómico-dramático del tándem Sophia Loren-Marcelo Mastroianni llevados de la mano por Vittorio De Sica, consiguen dar forma a un film histórico en la comedia italiana de los años 60. En esta ocasión, con una película que consta de 3 episodios protagonizados por la famosa pareja. El primero de ellos, el de una mujer napolitana que vende cigarrillos de contrabando y trata de esquivar una multa al estar embarazada. Por otro, Sophia Loren encarna a la esposa de un millonario al que le es infiel, y por último, una mujer provocadora que vive un intenso romance. Estos tres capítulos, cada uno en su forma y estilo, sacará las risas a todos los espectadores que se aventuren a verla.

En cada uno de los capítulos las situaciones hilarantes y provistas del más típico humor italiano de época aparecen en escena para el agrado de todos, y conforman entre las tres historias un todo que tiene bastantes cosas en común a descubrir por el espectador. Pero la mayor de ellas, es el toque sexual y desde luego sensual que derrocha la protagonista, ya sea para buscar un embarazo en la primera historia, para disfrutar de la infidelidad en la segunda, o para la provocación simplemente en la tercera, sacando a la palestra algunas imágenes históricas de la protagonista que quedaron para siempre en la posteridad.

La trama de las 3 historias, más cercana a llegar al público a través de las miradas e insinuaciones de Sophia Loren, no está desprovista de mérito ni en su humor que busca claramente la risa fácil, ni en el drama que rodea cada una de las historias para hacer buscar cosas en común a un público que la disfruta más allá del entretenimiento, ya que desde el principio hasta el final la película busca calar en la mezcla de géneros a toda clase de espectadores, y lo consigue notablemente incluso con el paso del tiempo.

En conclusión, la considero una comedia dramática indispensable dentro de su género y del cine italiano de humor de los años 60-70, al tener todo lo necesario para sobrevivir perfectamente el paso el tiempo. Por tanto, esta cinta del productor y marido de Sophia Loren Carlo Ponti, es una de tantas de su colección necesarias de ver para disfrutar tanto de la calidad fílmica de Vittorio De Sica, como del genial tándem compuesto por dos de las mayores estrellas que ha dado el séptimo arte en Europa, la gran Sophia Loren y el magnífico Marcelo Mastroianni.

La película consta de tres historias.
La primera es una historia de esas italianas de neorrealismo. La ambientación en el pueblo me parece muy buena, te sumerges totalmente. La película es divertida y la actriz es que es genial, muy muy carismática.

La segunda historia también me gustó mucho, la actriz aquí cambia a un aspecto superelegante, su interpretación es diferente pero igual de efectiva. Quizá me gustó un poco más la anterior historia, pero esta también está muy bien.

La tercera historia me gusta casi tanto como la primera. También está muy bien ambientada, me gustan las localizaciones y esos tejados que se ven en los exteriores, genial el sitio elegido y para rematar, termina con el striptease más espectacular que puedas imaginar, sin palabras. Sophia Loren se mueve con una elegancia y una sensualidad impresionante, para no olvidar nunca.
No solo tenía una belleza espectacular, era buena en papeles dramáticos y además caía bien. Lo tenía todo.

A Marcello Mastroianni se le ve siempre bien en todas las historias, está de notable alto. Sophia Loren está de sobresaliente.

Majestuosa interpretación de estos dos actores con mayúsculas, que juntos han dejado un legado de películas de indiscutible perfección y con sabor ancestral de lo que es la comedia picaresca Italiana por excelencia, la recomiendo a todas luces y la sensualidad arrolladora de la protagonista con toques de un encanto máximo, muy buna comedia y muy buen director.