Netflix volvió a sorprendernos con la tan esperada Titans bajo la responsabilidad de Geoff Johns y Greg Berlanti, extremadamente prolijos en lo que a llevar los universos de DC a formato serie se refiere. La propuesta es excelente, oscura, densa, perversa, sádica, completamente rota. Personajes con almas torturadas como solo DC ha sabido crear, la historia: magnífica, la banda sonora: exquisita.

El final de temporada nos regala algunas escenas donde ninguna gota de sangre es desperdiciada, ademas de una escena pos créditos.

La historia se inspira en el cómic de la década de 1980 el cual, a su vez, está basado en el de la década de 1960. Las historias de cada personaje han sido cuidadosamente retomadas de las mejores versiones de los cómics desde sus primeras apariciones en la década de 1940. Por la serie desfilan una gran cantidad de superhéroes, justicieros y villanos, los que no aparecen en carne y hueso, son mencionados.

Titans nos deleita con personajes como Dick Grayson, el Robin original ya apartado de su mentor Bruce Wayne, Batman, con seguridad este no tardará mucho en volverse Nighwing y Jason Peter Todd, el segundo Robin. Aparecen protagonistas femeninas muy interesantes, estas pertenecen a lo que se denominó la caída de las mujeres de DC.

La oscuridad que se cernía sobre el mundo del cómic reflejo de la sociedad del momento y cubrió también a las heroínas que estuvieron más cerca de las tinieblas como nunca antes. Rachel Roth es un buen ejemplo, más conocida como Raven, una joven, hija del poderoso demonio Trigon, hijo del mismísimo Lucifer, y una humana. Raven es empática y puede teleportar su ser interior.
Starfire es otro de los personajes de la serie, su verdadero nombre es Koriand´r y viene del planeta Tamaran, lugar donde todos sus habitantes tienen el poder de absorber la energía del sol a través de su piel.
Berlanti deja atrás el turbio surgimiento de Wonder Girl de 1945 en donde esta era una versión más joven de Wonder Woman, lo que terminó por extrañar demasiado a los fans ya que se preguntaban cómo era posible que ambas coexistieran en la misma línea temporal. En 1965 se le reasigna un nuevo origen que conforma y convence a los lectores de la época, durante un fatal incendio Wonder Woman logra salvar a una pequeña niña con la cual termina por encariñarse y la lleva a la isla de Themyscira para ser criada por las amazonas, estas no solamente la educaron, sino que además le otorgaron los mismos poderes de su tutora.

También aparecen los miembros de The Doom Patrol, entre ellos Elastic Girl, cuyo verdadero nombre es Rita Farr la cual adquiere sus poderes mientras se encontraba rodando una película en África. Otros miembros de la Patrulla condenada son El jefe Niles Caulder, El hombre negativo, Robotman, Mento y Chico bestia quien luego los abandona para unirse a los Titanes.

Aparece La familia nuclear creada por el científico Eric Shanner que en la serie se muestran como una familia de asesinos psicópatas sádicos. Durante el transcurso de los episodios son mencionados personajes como El Pingüino, Acertijo, El Joker y Barbara Gordon, mejor recordada como Batgirl. Veremos si aparece en la serie y en qué condiciones, recordemos el destino fatal de hitos macabros al que la somete el guionista Alan Moore, en Batman: The Killing Joker, durante una tranquila noche en la que esta se encontraba cenando junto a su padre, el comisario Gordon.

Sé que han faltado personajes como Hank y Dawn, entre otros, todos merecen un espacio y un análisis detallado. Por ahora celebramos este estreno y esperamos con ansias la segunda temporada.

"Divanes", de Supergirl acomplejada, ahora le toca a Robin, para pasar el tiempo, tenemos un Robin "decente ", Una Raven bien personificada, un "Chico Bestia" muy fiel, después todo los demás personajes puro cartón: Dawn Granger " la chica Sedal" inexpresiva, Hank "me Musculo", Starfire la actriz parece que no se encuentra en el personaje, 0 personalidad, no voy a hablar de los demás, la China con peluca y el Superman beboton, o el Robin 1.0, un 5, si tenes algo mejor.. ya sabes, los Jóvenes Titanes un dibujito parodia, llegan a ser mejor.

Allá por los años 60 DC Cómics publicó por primera vez una aventura que contaba con la unión de varios de sus superhéroes adolescentes (que normalmente actúan de colegas de los superhéroes adultos más afamados) a los que bautizó como "Teen Titans" (aka. Titanes adolescentes). Desde aquel entonces los "Teen Titans" han vuelto de tanto en cuanto a las viñetas de forma variada (por el grupo ha desfilado un gran catálogo de superhéroes. Y sus orígenes como grupo o sus retornos a éste han sido "reiniciados" y reciclados en numerosas ocasiones). Esta adaptación de este grupo superheroíco a imagen real para Netflix es de lo mejorcito que nos ha dado el género en cuanto a series se refiere (hay que admitir que Netflix tiene muy buen ojo cuando opta por comenzar una asociación con un sello comiquero. Primero fue "Daredevil" (2015-18) y ahora este "DC's Titans", no han vuelto a tener productos que superen a estos dos si se trata de basarse en personajes de MARVEL y DC... ni siquiera fuera de Netflix).

Y es que "DC's Titans" supone un firme entretenimiento. Con una mirada descarnada y sin censuras (absténgase los que no deseen ver en pantalla explícitas escenas de combates violentos) la serie nos va presentando a sus personajes que ya contaban con gran singularidad sobre el papel... y que aquí se nos retratan con pinceladas honestas y naturales a la par que potentes o enigmáticas. Y esta configuración de caracteres se sucede a través de unas tramas de misterios recónditos y complots criminales colosales... unas incógnitas suspendidas en el tiempo con pericia y acompasadas con un ritmo avispado. Así pues estos héroes evolutivos pueden hacernos vibrar con sus poderosos trazos y su afán de hacer justicia ante el entramado perverso con el que se topan. Tampoco es que el guión llegue a unas cotas de elaboración argumental (que maride intriga criminal e introspecciones personales) sobresaliente al nivel de "Daredevil" (2015 18) o "Batman Begins" (2005), pero se mantiene a una notable altura (al menos en las 3 temporadas que llevo en la mochila) que nunca tropieza en la nimiedad o el tópico sin desarrollar.

La puesta en escena hace el resto con un grano impoluto, una realización orgánica (que no loable. Pues, si bien en "DC's Titans" contamos con unas estrategias de combate inspiradas, la forma de rodarlas con bastante trucaje en la edición no nos envuelven con maestría como los planos mantenidos en "Daredevil" (2015-18) por ejemplo), una fotografía estilizada que mima la tenue iluminación y resalta con gusto los colores estandarte de cada uno de los protagonistas (el púrpura en Raven/Rachel Roth, el verde en Beast Boy/Gar Logan, el naranja en Koriand'r/Kory Anders y el granate y verde oscuro en Robin/Dick Grayson), un intachable trabajo de vestuario y maquillaje, y una banda sonora original oportuna (y una elección de temas pop memorable. Siempre asociaré sin remedio a esta serie y ciertas secuencias canciones como "I Feel Love" de JORD y "Sunny" de Boney M. al igual que asocio "Street Life", "Woo Hoo" o "You Never Can Tell con varios momentos de "Jackie Brown" (1997), "Pulp Fiction" (1994) o "Kill Bill" (2003)).

Estamos en definitiva ante una serie que entremezcla con astucia acción superheróica, interrogantes malévolos y pequeñas coyunturas personales cómplices (ya sean de amistad, compañerismo, rivalidad, romance, trauma, afán protector, etc.). Es superable, pero su cometido de ameno pasatiempo de calidad para todo público adulto (abierto a cualquier género. Quien no pueda ver un solo tramo de fantasía y superhéroes en la pantalla que se aleje lo más posible) lo cumple con creces. Es indispensable para todo fan de los superhéroes de DC Cómics (admito que me incluyo en este grupo) y muy recomendable para el aficionado en general a este subgénero de capa y antifaz que está viviendo su edad dorada en cine y televisión.

Pues "DC's Titans" está a la misma altura que "The Flash" (2014-), y supera con gran facilidad a la mayoría de series de MARVEL y DC con actores de carne y hueso ("Lois y Clark" (1993-1997), "Arrow" (2012-2020), "Luke Cage" (2016-2018), "Smallville" (2001-2011), "Jesica Jones" (2015-2019), "Gotham" (2014-2019), etcétera)... no llega al nivel de "The Boys" (2019), "DC's Doom Patrol" (2019-) o "Daredevil" pero se le acerca bastante. En mi caso particular me recordó mucho a la maravillosa "Héroes" (2006-2010) y eso es mucho decir. De momento "DC's Titans" mantiene su categoría en las tres temporadas que lleva. A falta de ver "The Punisher" (2017-2019), "Batwoman" (2019-), "Stargirl" (2020-), "Pennyworth" (2019-) y "Constantine" (2014 2015) (y considerando "Watchmen" (2019) y "Bruja Escarlata y Visión" (2020) miniseries limitadas), mi ranking particular sería éste:...

Aburrida... no tiene gancho...

La serie tiene buena pinta, ya que es la unión de varios super héroes, aunque la gran mayoría no los conozca, en la primera temporada solo conocía Robin.

Yo cuando cojo el móvil más de una vez en un episodio y a veces, me tiro casi todo el episodio con el móvil en la mano, malo... esto quiere decir que no me despierta ningún tipo de interés y me aburre. Es mi termómetro para saber si algo me gusta o no: si cojo el móvil.

Cuando acabas la primera temporada, que bueno, el resultado final es el primer episodio de la segunda, te preguntas: ¿tanto rollo para esto? Para acabar en un plis plas sin mucho mérito.

En fin, han querido hacer un mejunje de super héroes, pero si no hay una base sólida en la que se puedan sostener, queda en algo muy tedioso.

Por ejemplo la de "The Boys" que son anti héroes, vale, pero tiene muchísimo más atractivo. Y la acción transcurre con bastante entretenimiento.

Un nuevo mini universo Dc con un rodaje y estética oscura, cruda y violenta al más puro estilo Gotham. No exenta de misticismo y nostalgia, esta serie reúne a un grupo inadaptado y traumatizado de seres con poderes que andan en busca de una identidad y un sentido a sus vidas. Y en ese camino de búsqueda es donde los personajes se nos van presentando paulatina y sosegada mente mientras el interés se posa en el por qué de su unión y en el motivo de sus enemigos. El carismático y versátil reparto de personajes y actores nutren cada capítulo con solvencia, y como telón de fondo, con el omnipresente Batman dan solidez a una trama que podría desmontarse o carecer de credibilidad. No obstante, aunque estamos ante un peculiar grupo de 'superhéroes', las escenas de acción no terminan de ser el fuerte en esta primera temporada. No son consistentes como para despertar un excesivo atractivo visual y al final acabas renunciando a necesitarlas. Así mismo, la sobriedad que intentan imprimirle contrasta en ocasiones con lo arcaico o poco elaborado de algunas cuestiones de la producción. No es una serie titánica; en el fondo es una serie relativamente entretenida, llamativa y con un guión lo suficientemente hilvanado como para avanzar durante los 11 capítulos sin excesiva desesperación.