47 Ronin: La leyenda del samurai
5.4
14,594
Acción. Drama. Fantástico
Basada en una leyenda japonesa. Siglo XVIII. Kai (Keanu Reeves) es un paria que se une a Oishi (Hiroyuki Sanada), el jefe de los 47 Ronin. Su objetivo es vengarse del traidor que mató a su señor y los condenó al destierro. Para recuperar el honor perdido, los guerreros emprenden una aventura que les obligará a superar duras pruebas. (FILMAFFINITY)
8 de febrero de 2014
8 de febrero de 2014
0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película fue mala... eso es evidente.
Y lo voy a decir sencillo...
Desafortunadamente debí disfrutarla en 3D, caso que por extraño que parezca, me hace verla más oscura de lo que sería.
La fotografía me pareció interesante, el juego del simbolismo tuvo algunos buenos momentos, el vestuario fue bello... los paisajes preciosos. En fin, la película fue mala, demosle la razón a los profundos vacíos que se sintieron en la historia.
Y lo voy a decir sencillo...
Desafortunadamente debí disfrutarla en 3D, caso que por extraño que parezca, me hace verla más oscura de lo que sería.
La fotografía me pareció interesante, el juego del simbolismo tuvo algunos buenos momentos, el vestuario fue bello... los paisajes preciosos. En fin, la película fue mala, demosle la razón a los profundos vacíos que se sintieron en la historia.
21 de marzo de 2014
21 de marzo de 2014
0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Creo que es el final más estúpido que he visto en la historia del cine. La película en sí no está mal, entretenida aunque con el final carece totalmente de sentido. Me hace gracia que se diga que está inspirada en una historia real cuando en la película aparecen brujas y dragones... En cuanto a los actores, Keanu Reeves no pega nada en ese papel pero tampoco se le puede exigir más ya que él mismo no puede ofrecer más. Hiroyuki Sanada sin embargo, es un actor encasillado pero que siempre cumple a la perfección en su papel.
30 de diciembre de 2013
30 de diciembre de 2013
2 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Keanu Reeves, al que tras la trilogía de “The Matrix” sólo le hemos podido ver, ciertamente más gordito, en “Dueños de la calle” o bastante soso en el olvidable remake de “Ultimátum a la tierra“, vuelve a la actualidad gracias a dos películas de corte parecido, véase la futura “El hombre de Tai Chi” o la recientemente estrenada, “47 Ronin : La leyenda del samurái”.
Lo primero que habría que decir de esta producción, dirigida por el desconocido Carl Rinsch, en la que se nos traslada a la época del Japón Feudal y en la que se combina el mundo de los samuráis con toques de fantasía y una pizca de romance, es el hecho de que la misma haya sufrido de imnumerables problemas para finalizar su producción y que elevaron su presupuesto hasta unos desorbitados 170 millones de dolare$.
La película, tras su estreno, fue vilipendiada y denostada por buena parte de la crítica, llegando a tener un mísero 11% de reviews positivas en la web “Rottentomatoes”; algo que sólo está al alcance de verdaderos subproductos cinematográficos.
En mi caso, una vez vista, he de decir que si bien no es ninguna obra maestra o un producto sobresaliente, me ha parecido una película que tiene suficientes virtudes como para recompensar el precio de su entrada y que no es, ni mucho menos, tan mala como la pintan.
El argumento, que me ha traído a la mente producciones como “300” o “El último samurái”, nos cuenta la historia de un grupo de samuráis que han perdido al jefe de su clan, pasado a ser “Ronins”, y que planean venganza contra el usurpador del trono de su reino.
Si bien es cierto que la película se podría catalogar como cine acción, no es menos cierto que su toque romántico cala incluso más que cualquiera de las batallas de estos samuráis de tiempos ancestrales.
El film tiene un interesante arranque, con buena presentación de los conflictos sociales y emocionales del personaje de Keanu Reeves, con una trabajada ambientación de ese poblado japones, donde brilla una imagen colorida y muy vistosa.
Es cierto que el film puede pegar un cierto bajón en su tramo intermedio, pero todo queda arreglado en un tercio final que te deja con un muy buen sabor de boca.
A nivel de actuaciones he de decir que si bien Keanu Reeves, como ya ocurría en “The Matrix”, no se prodiga en diálogos extensos o actuaciones memorables, no es menos cierto que la conexión romántica y emocional con el personaje femenino de Mika (Kô Shibasaki) es la clave que ha hecho que esta película no termine siendo un olvidable producto de aventuras y, por lo contrario, se haya convertido en una grata experiencia cinematográfica.
A acrecentar ese precioso toque romántico colabora una brillante y emotiva banda sonora a cargo de Ilan Eshkeri.
Junto a la pareja formada por Keanu Reeves y Kô Shibasaki, también nos encontraremos a otros actores orientales que hemos visto en recientes producciones, véase a Rinko Kikuchi (“Pacific Rim“) o un Hiroyuki Sanada, quien parece estar encasillado en films de corte parecido (“El último samurái” o “Wolverine”).
A nivel técnico cabe hablar de un gran diseño de producción en lo que es la recreación de vestuarios, decorados, armas, etc…; si bien he de decir que los efectos especiales me han parecido bastante flojos y más propios de un videojuego de la Playstation, especialmente a la hora de mostrarnos esos planos aéreos de los poblados japoneses.
En resumen diría que es un buen film de aventuras, con un interesante toque romántico y que está siendo injustamente maltratado por la crítica especializada.
Lo mejor: La preciosa Kô Shibasaki, el vestuario, ambientación y su banda sonora.
Lo peor: Que el tramo central no tenga la brillantez del comienzo y el desenlace, que los efectos especiales de tipo digital sean bastante pobres.
Blog de cine: http://opinioncinefila.wordpress.com/
Videoreviews: https://www.youtube.com/channel/UC24GN7KQmW-KZJXpIAT7oOA
Lo primero que habría que decir de esta producción, dirigida por el desconocido Carl Rinsch, en la que se nos traslada a la época del Japón Feudal y en la que se combina el mundo de los samuráis con toques de fantasía y una pizca de romance, es el hecho de que la misma haya sufrido de imnumerables problemas para finalizar su producción y que elevaron su presupuesto hasta unos desorbitados 170 millones de dolare$.
La película, tras su estreno, fue vilipendiada y denostada por buena parte de la crítica, llegando a tener un mísero 11% de reviews positivas en la web “Rottentomatoes”; algo que sólo está al alcance de verdaderos subproductos cinematográficos.
En mi caso, una vez vista, he de decir que si bien no es ninguna obra maestra o un producto sobresaliente, me ha parecido una película que tiene suficientes virtudes como para recompensar el precio de su entrada y que no es, ni mucho menos, tan mala como la pintan.
El argumento, que me ha traído a la mente producciones como “300” o “El último samurái”, nos cuenta la historia de un grupo de samuráis que han perdido al jefe de su clan, pasado a ser “Ronins”, y que planean venganza contra el usurpador del trono de su reino.
Si bien es cierto que la película se podría catalogar como cine acción, no es menos cierto que su toque romántico cala incluso más que cualquiera de las batallas de estos samuráis de tiempos ancestrales.
El film tiene un interesante arranque, con buena presentación de los conflictos sociales y emocionales del personaje de Keanu Reeves, con una trabajada ambientación de ese poblado japones, donde brilla una imagen colorida y muy vistosa.
Es cierto que el film puede pegar un cierto bajón en su tramo intermedio, pero todo queda arreglado en un tercio final que te deja con un muy buen sabor de boca.
A nivel de actuaciones he de decir que si bien Keanu Reeves, como ya ocurría en “The Matrix”, no se prodiga en diálogos extensos o actuaciones memorables, no es menos cierto que la conexión romántica y emocional con el personaje femenino de Mika (Kô Shibasaki) es la clave que ha hecho que esta película no termine siendo un olvidable producto de aventuras y, por lo contrario, se haya convertido en una grata experiencia cinematográfica.
A acrecentar ese precioso toque romántico colabora una brillante y emotiva banda sonora a cargo de Ilan Eshkeri.
Junto a la pareja formada por Keanu Reeves y Kô Shibasaki, también nos encontraremos a otros actores orientales que hemos visto en recientes producciones, véase a Rinko Kikuchi (“Pacific Rim“) o un Hiroyuki Sanada, quien parece estar encasillado en films de corte parecido (“El último samurái” o “Wolverine”).
A nivel técnico cabe hablar de un gran diseño de producción en lo que es la recreación de vestuarios, decorados, armas, etc…; si bien he de decir que los efectos especiales me han parecido bastante flojos y más propios de un videojuego de la Playstation, especialmente a la hora de mostrarnos esos planos aéreos de los poblados japoneses.
En resumen diría que es un buen film de aventuras, con un interesante toque romántico y que está siendo injustamente maltratado por la crítica especializada.
Lo mejor: La preciosa Kô Shibasaki, el vestuario, ambientación y su banda sonora.
Lo peor: Que el tramo central no tenga la brillantez del comienzo y el desenlace, que los efectos especiales de tipo digital sean bastante pobres.
Blog de cine: http://opinioncinefila.wordpress.com/
Videoreviews: https://www.youtube.com/channel/UC24GN7KQmW-KZJXpIAT7oOA
19 de abril de 2014
19 de abril de 2014
1 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Otra vez Hollywood intentando apropiarse de grandes películas japonesas. Otra vez fracasando.
La película de Rinsch es una remake de una gran película "Shijushichinin no shikaku (Kon Ichikawa's 47 Ronin)" que en español se traduciría algo así como "Los 47 asesinos - Los espectros amigos" de 1994.
En esta película de la industria de Hollywwod la producción se aboca a lograr imágenes maravillosas para la vista, a fueza de fotografía, tecnología y digitalización.
Genera asimismo desde una historia de profunda tradición japonesa un relato que banaliza la historia de fondo mientras que resalta las luchas y combates. Por supuesto que no estando claro el fundamento en la película los samurais parecen luchar porque simplemente son samurais cosa que en realidad nunca ha sido así.
Pero todo esto no le importa a la industria de Hollywood porque ya esta industria ha logrado fijar los estereotipos de cada cosa a su manera que es simple, despojada de profundidad y por supuesto tendenciosa. Así según estos estereotipos los japoneses serán siempre secos, duros y muy simples; los samurais se pasan la vida cortando en pedacitos a quien se les ponga enfrente y todas las mujeres japonesas son geishas. He aquí expuesta la banalización de Hollywood.
Por supuesto que toda esta industria del cine de Hollywood contribuye a degradar cualquier gran historia hasta el punto de la mediocridad.
Así la película de Rinch es fría e insulsa, no puede mantener el interés del espectador, se queda corta a la hora de construir los personajes y personalidad en juego, no hay implicación emocional en los juegos actorales. Mientras que en la narrativa el único hilo conductor es la lucha.
"La Leyenda..." empieza y termina bien con gran despligue a fuerza de tecnología pero en el transcurso del film hay una pobreza y un vacío que sólo se puede llenar comiendo pochoclos (palomitas de maíz)
Keanu Reeves, como siempre, malo como siempre. Parece que a él le da lo mismo ser un marciano (Ultimátum a la Tierra - 2008), un enamorado (La casa del lago - 2006), un alma condenada al infierno (Constantine - 2005) o un japonés.
Como película de acción es menos que la convención de Hollywood acostumbra.
Por otra parte hay algo inaceptable en la película que es la flata de rigor en el tratamiento de las tradiciones japonesas; las caricias de un padre a una hija que eran imposibles en la japón feudal, el confundir a una hija de un noble con una concubina de este que también era imposible puesto que la vestimenta marcaba la diferencia entre una y otra, el los largos de pelo y coletas de los guerreros que no se condicen a los que tradicionalemente se usaban. Todo esto demuestra un total desconociemiento del ambiente del Japón feudal por parte de la producción de Hollywood que parece ocuparse sólo en los grandes efectos antes que atenerse al rigor histórico.
En fin... Hollywood ya no tiene nada para dar, su modelo está acabado y aunque trate de robar historias ajenas no conseguirá complacer al espectador a menos que al espectador se lo acostumbre desde niño a ver malas películas.
La película de Rinsch es una remake de una gran película "Shijushichinin no shikaku (Kon Ichikawa's 47 Ronin)" que en español se traduciría algo así como "Los 47 asesinos - Los espectros amigos" de 1994.
En esta película de la industria de Hollywwod la producción se aboca a lograr imágenes maravillosas para la vista, a fueza de fotografía, tecnología y digitalización.
Genera asimismo desde una historia de profunda tradición japonesa un relato que banaliza la historia de fondo mientras que resalta las luchas y combates. Por supuesto que no estando claro el fundamento en la película los samurais parecen luchar porque simplemente son samurais cosa que en realidad nunca ha sido así.
Pero todo esto no le importa a la industria de Hollywood porque ya esta industria ha logrado fijar los estereotipos de cada cosa a su manera que es simple, despojada de profundidad y por supuesto tendenciosa. Así según estos estereotipos los japoneses serán siempre secos, duros y muy simples; los samurais se pasan la vida cortando en pedacitos a quien se les ponga enfrente y todas las mujeres japonesas son geishas. He aquí expuesta la banalización de Hollywood.
Por supuesto que toda esta industria del cine de Hollywood contribuye a degradar cualquier gran historia hasta el punto de la mediocridad.
Así la película de Rinch es fría e insulsa, no puede mantener el interés del espectador, se queda corta a la hora de construir los personajes y personalidad en juego, no hay implicación emocional en los juegos actorales. Mientras que en la narrativa el único hilo conductor es la lucha.
"La Leyenda..." empieza y termina bien con gran despligue a fuerza de tecnología pero en el transcurso del film hay una pobreza y un vacío que sólo se puede llenar comiendo pochoclos (palomitas de maíz)
Keanu Reeves, como siempre, malo como siempre. Parece que a él le da lo mismo ser un marciano (Ultimátum a la Tierra - 2008), un enamorado (La casa del lago - 2006), un alma condenada al infierno (Constantine - 2005) o un japonés.
Como película de acción es menos que la convención de Hollywood acostumbra.
Por otra parte hay algo inaceptable en la película que es la flata de rigor en el tratamiento de las tradiciones japonesas; las caricias de un padre a una hija que eran imposibles en la japón feudal, el confundir a una hija de un noble con una concubina de este que también era imposible puesto que la vestimenta marcaba la diferencia entre una y otra, el los largos de pelo y coletas de los guerreros que no se condicen a los que tradicionalemente se usaban. Todo esto demuestra un total desconociemiento del ambiente del Japón feudal por parte de la producción de Hollywood que parece ocuparse sólo en los grandes efectos antes que atenerse al rigor histórico.
En fin... Hollywood ya no tiene nada para dar, su modelo está acabado y aunque trate de robar historias ajenas no conseguirá complacer al espectador a menos que al espectador se lo acostumbre desde niño a ver malas películas.
25 de diciembre de 2013
25 de diciembre de 2013
8 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es de esas pelis que se te pasa como si hubieses visto solo 10 minutos, para mi ha sido un disfrute total, no te desenganchas nunca de la película y mantiene la tensión muy bien durante todo el film, acción en su justa medida y sin nada de relleno que haga bajar el ritmo, el guion para mi es de 10, la recomiendo totalmente, de las mejores de 2013.
Lo mejor: toda la peli
Lo peor: nada a destacar aquí.
Lo mejor: toda la peli
Lo peor: nada a destacar aquí.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here