Contra todo pronóstico, se ha conseguido. De nuevo, ha sido arrastrada la calidad de una saga que había tocado fondo con “El despertar de la fuerza” y parecía comenzar a levantarse con “Rogue One”. Los que amamos la Ciencia Ficción y la Fantasía no podemos amparar en la “suspensión de la incredulidad” cualquier bodrio que traten de vendernos, ni siquiera (y especialmente) cuando porta un sello tan querido como Star Wars.

La “suspensión de la incredulidad” es una voluntariedad del espectador, un paso ciego y alegre para entrar en el mundo fantástico que se le presenta sin someterlo a las servidumbres de la realidad. Una vez dentro, olvidadas ya las cadenas de lo “real”, corresponde al creador dotar a ese mundo de una lógica y coherencia interna para que no sean necesarios continuos actos de fe. El voto habrá merecido la pena cuando, dentro del microcosmos en que accedimos a sumergirnos, todo tenga sentido y justificación en virtud de sus normas propias, de su magia; sólo cuando los personajes, humanos o no, pero iguales a nosotros en su naturaleza, nos resulten creíbles dentro de esas galaxias muy lejanas en que decidimos creer, entonces habrá sido cumplida su parte del pacto por parte del creador. Desgraciadamente, no es el caso. Ni de lejos.

Los efectos especiales puede que sean técnicamente perfectos, pero cada vez tienen menos alma y han perdido cualquier capacidad de generar asombro; la metahistoria que debería evocar el diseño de producción es cada vez más pobre y superficial, sin capacidad para despertar ya ninguna curiosidad por mundos sugeridos; el guion carece de sentido o coherencia siquiera interna (sin tener en cuenta el resto de la saga), recordando más a la inconexa sucesión de escenas de una serie animada de canal infantil que a una película siquiera juvenil; la épica se sustituye por el ruido y nos encontramos con una historia absurda que no puede emocionar, dónde nada cuesta esfuerzo y no hay héroes porque todos “pueden serlo” y cualquiera, por mediocre que sea, que pase por allí puede marcar la diferencia simplemente por un giro azaroso del (no) guion. Los actores se esfuerzan sin conseguirlo por dar peso dramático a unos personajes a los que la historia convierte en secundarios todos casi comicos prescindibles y olvidables. Por último, el Deus Ex Machina constante sustituye a cualquier norma o dinámica interna que pudiera permitirnos mantenernos dentro la película. Posee otro pecado sin embargo difícil de prever con tanto ruido de por medio: es aburrida y difícilmente puede soportar un segundo visionado cuando ya se hace tediosa en el primero.

Es así, y, en resumen, una mala película tanto para mayores como para jóvenes, para fans o para ocasionales, para cinéfilos y para pasotas. Mala para todos. Una mala película de Star Wars y un mal relato de Ciencia ficción o Fantasía. No posee más valor que el de la venta del merchandising que será capaz de promover. Afortunadamente, para aquellos que ya no necesitamos tomar partido y para los que su Star Wars está donde y como ellos desean construirlo, “Los últimos Jedi” acaba y, liberados del bodrio y ya confirmadas las sospechas, podemos ir a casa a buscar, imaginar y vivir mundos de fantasía que nos exijan suspensión de la incredulidad, pero no del cerebro.

Vi esta película el jueves en una maratón del capítulo VII y VIII organizada por cines Yelmo.
Después de ver la película solo me quedó una sensación de enfado y decepción por lo que Disney le ha hecho a la saga. Han quitado toda esencia de Star Wars metiendo el chiste fácil y utilizando los personajes antiguos solo para poder enlazar la vieja historia con la ñoñería comercial que pretenden hacernos tragar para llenarse los bolsillos a partir de ahora. Está llena de momentos de relleno innecesarios, pues aún me cuestiono si el papel ejercido por Benicio del Toro es necesario para el desarrollo de la película por ejemplo. La película está plagada de momentos cursis que demuestran que ya no importa que la entrega sea fiel a las anteriores, sino que es una "americanada" de las típicas.
Y por último, todos conocemos la muerte de Carrie Fisher, pero no esperéis una frase nada más terminar la película en la que ponga que está dedicada a ella o algo por el estilo. Hay una frase, pero aparece en pantalla después de los créditos y productores, demostrando una vez más que lo primero es el dinero y después ya veremos que va.

Un desastre. Absoluto. Toda la pelicula despedia un aroma a estamos agobiados y sobrepasados. Hay detalles infinitos en el montaje, en el guion, el la dirección, en los actores que despiden un aroma de no damos la talla. Para empezar la peli casi no aporta nada nuevo y lo poco que aporta no lo aprovecha. Daisy ridley muy descolocada en algunas escenas y con un aspecto que no sabria como definir, no se si es que ha engordado algo, que estaba muy agotada, que no soporta la presion de la fama, pero definitivamente no la he visto brillar. En la primera pelicula me parecia un acierto de casting tremendo, que resultaba tremendamente convincente en todas y cada una de las escenas que salia, se le veia una energia explosiva, era divertida, sexy, violenta, agil, aqui le he visto un efecto estoy abrumada por la puta presion de la franquicia, quiero salir de esta mierda. Mark Hamill ya sabemos que no es un gran actor y que hacia mucho que no actuaba,pero ahi esta el director para sacarle petroleo, y yo francamente lo he visto bastante desaprovechado y consentido, en algunas escenas se paseaba como cuando arnie volvio al cine despues de ser gobernador. Y flinn joder flinn, NI IDEA DE QUE HACER CON EL PERSONAJE. Lo han metido en una subtrama totalmente prescindible, con otro personaje igual de prescindible, donde no habia ni humor, ni tension, ni emocion, ni un diseño de producción coherente con nada.

La dirección y el montaje son una basura, episodio 7 era un remake del 4 pero funcionaba como un cohete, era trepidamente de principio a fin, aqui en muchos momentos el ritmo decae porque esta rodada y montada con desgana, sin idea de que plano tendria mas fuerza y como darle ritmo.

No. No es Star Wars. La película se llama los último jedi pero es un pestiche de gags de humor infantil mezclados con situaciones absurdas e inversomilies. Nada queda aquí de respeto por una saga que ha cautivado a tanta gente. El episodio XII ya carecia de ideas pero es que este episodio VIII parece que lo hayan escrito para reirse del público. Personajes impostados, sin ningún trasfondo y momentos de auténtica verguenza ajena. Lo mejor de la peli los créditos. Lo peor, 2 y media de un ejercicio de cine hueco y lamentable.

PD: No soy crítico de cine pero viendo lo que he leído por ahí de la prensa supuestamente especializada me da que pensar que los millones de euros que se dejan en contratar buenos guionistas los gastan en comprar a críticos de cine

Que la fuerza os acompañe. Sobretodo si vais a verla

En mi opinión, la última película de Star Wars no cumple con lo que se espera de un acontecimiento de esta magnitud. Los últimos jedis tiene un guión incomprensible en muchas partes del metraje que se hace por momentos aburrido, con la sensación de estar viendo una película de Marvel o una película de serie B, por muchos efectos especiales que haya. Por otra parte, los nuevos personajes dejan de tener la fuerza que tenían en el episodio VII, porque la presencia de Mark Hamill los eclipsa. Y eso es un contrasentido, porque si lo que se pretende es restar protagonismo a los personajes originales de la saga para hacer próximas películas como churros, el resultado de esta última operación demuestra que los personajes originales de George Lucas estaban dotados con el don de la fuerza, y los de Disney no.