Soy cinéfilo y escritor de novelas, las cuales muestran una cierta influencia cinematográfica. Filmaffinitty es un punto de referencia para todo aficionado al cine, que desea saber si una película merece o no la pena, a pesar de que opiniones las hay como estrellas en el firmamento. De buena a mala, o simplemente pasable, la película que nos ocupa merece el calificativo de: INTERESANTE.
Tal y como uno de los compañeros indica, la película de Frank Tashlin equilibra el humor y la intriga policial. Ahora bien, el humor inglés no guarda parecido con el americano, de ahí que resulte inane compararlo con las aventuras del inspector Clouseau, cuyos gags son siempre aparatosos e hilarantes en grado sumo. Todo lo contrario, la versión que hace Tony Randall de Poirot no destaca especialmente por ese histrionismo del que hace gala Peter Sellers en las películas de la Pantera Rosa. Mucho más comedido, Tony Randall parece haberse apropiado del típico humor inglés a la hora de ofrecernos su versión de Poirot en esta comedia, que no deja de lado el trasunto criminal. Acompañado del siempre perfecto Robert Morley, nuestro detective se verá envuelto en un extraño caso que le hará ir de allá para acá de forma constante, y aquí la película atesora un buen ritmo, acompañado de unos inteligentes y muy sugestivos encuadres que redundan en un mayor placer visual.
Quizá la más desaprovechada sea Anita Ekberg, aunque por una vez su actuación no viene apuntalada con una muestra de su voluptuosa belleza.
Desde mi punto de vista «Detective con rubia» gana enteros con un humor más contenido. Algunas escenas nos hacen reír, como la de la visita de la pareja de policías a la mansión del acaudalado aristócrata. En definitiva, se trata de una película tan distraída como desenfada, si sabes de antemano lo que vas a ver.