Agallas

Decepción es la palabra que me viene a la cabeza a la hora de comentar esta película. Esperaba mucho más de ella, pero me ha resultado una película fría y, en ocasiones, falta de credibilidad, y no creo que sea culpa de sus actores, sino del guión. Si precisamente el resultado final se eleva un poco más es por el buen hacer del conjunto de actores que en ella aparecen, sobre todo un Carmelo Gómez que siempre me ha encantado desde que le viera en "Días contados" y que se merece de una vez por todas conseguir un papel que le haga honor a su profesionalidad. Me parece un actor totalmente infravalorado, que durante unos años se retiró del cine precisamente por la poca motivación que le proporcionaban los papeles que le ofrecían y que no ha vuelto por la puerta grande con este trabajo. Junto a él, uno de los ídolos de la televisión española actual, un atractivo Hugo Silva que quiere por todos los medios quitarse de encima la imagen de chico guapo pero con poco talento y que poco a poco se va haciendo con papeles de cierto protagonismo en el cine de nuestro país. Su actuación me ha parecido correcta, pero no creo que sea para volverse loca. Me ha encantado ver de nuevo a una pareja que me llegó tanto en "Mar adentro" como son Mabel Rivera y Celso Bugallo. Aquí no comparten escena y sus actuaciones no tienen un gran metraje dentro del film, pero da igual, ambos merecen muy mucho la pena. Mabel Rivera está espléndida en su corta aparición, en un papel completamente diferente al que nos ofreció en la película de Amenábar, y Bugallo es de lo mejorcito del film, la humanidad y naturalidad que le da, una vez más, a su personaje es encomiable. En cuanto a Yoima Valdés, he perdido ya la cuenta del número de películas en las que esta guapa cubana aparece interpretando a una mujer de vida alegre. Es una pena, es una chica totalmente encasillada en este tipo de papeles sín merecerlo, ya que en la pequeña película "Agua con sal" demostró que sabe interpretar y que puede ofrecer mucho más que ésto. Por otra parte, la música de la película me ha parecido horrible y la canción que da título a la misma y que está interpretada por el propio Hugo Silva es de lo peorcito que he escuchado últimamente.

Las interpretaciones son buenas (mención especial para Celso Bugallo). El guión se mueve siempre dentro de lo previsible, quitando el giro final que peca un poco de "sacado de la manga". Formalmente está bastante bien y los diálogos son interesantes.

Atrevido thriller dirigido por Samuel Martín y Andrés Luque, debutantes en cine pero con una larga trayectoria a sus espaldas en televisión.
Una omnipresente Galicia es el escenario donde tiene lugar esta corrompida historia que destila sangre, venganza, traición y alguna que otra sorpresa argumental.

Ya desde el inicio, un Sebas (Hugo Silva) recién salido de la cárcel y retratado en la repelente escena de las cucarachas, deja claro quién es y hasta dónde puede llegar. Un Hugo Silva que sorprende a propios y extraños, con una magnífica actuación, y que se complementa a la perfección con el metódico Carmelo Gómez. Dos generaciones distintas de actores, con distintas formaciones. Hugo, desde la televisión, Carmelo, desde el teatro; ambos se dan la réplica y realizan un gran trabajo.

A la historia de ellos dos, que es el auténtico núcleo de la trama, le cuesta un poco entrar y antes de ello hay algún que otro altibajo, pero una vez activados por completo Hugo y Carmelo, Carmelo y Hugo, el film se convierte en un expectante toma y daca de altos vuelos.

Otra muestra de que el cine español puede y debe apostar por films de género, como este interesante thriller.

Una opera prima, con sus pros y sus contras, muy digna.

Sorprendente thriller español con tintes de comedia negra que no me ha dejado para nada indiferente, así como la mayoría de las películas del cine patrio.
Lo que más me ha entusiasmado de esta buena película es el cara a cara, el duelo interpretativo, entre Hugo Silva y Carmelo Gómez, dos actorazos como la copa de un pino que deberían haber tenido más alabanzas por su trabajo.
No sé si es que la película no es para nada el estilo del cine español, pero lo cierto es que no ha funcionado entre el público. Una pena que se hayan perdido esta maravillosa película.
Por cierto, la canción "Agallas vs. Escamas" interpretada por Hugo Silva y nominada al Goya, está genial. Espero que se lleve el galardón en la única nominación de la película.

Mi nota: 7.4

Lo peor y lo mejor de la película es su pareja protagonista. En esta ocasión, Gómez está bastante afortunado en su creación de mafioso gallego, con aire socarrón y exacerbado punto hijoputa. No puedo decir lo mismo de Silva, que se empeña –él o el director- en extrapolar su personaje de ‘Los hombres de Paco’ a un contexto mucho más duro, como el que describe la película. Si ya la serie de Antena 3 tiene poca gracia, aquí ni os cuento; Huguito está para matarlo.

Tal vez los responsables han intentado un híbrido entre cine negro y comedia mafiosa, pero es en los momentos supuestamente irónicos cuando el invento hace más aguas. Hay algunas situaciones bastante mal resueltas, y el giro final sólo parece tener por objeto sorprender al espectador, aunque la verosimilitud salte por los aires. En fin.

Entretenidilla a ratos y poco más. Una de tantas.