Se trata tan solo de querer entretener al público contando cuentos y batallitas increíbles.

El personaje de McQueen nos puede resultar más o menos simpático, pero no tiene ninguna verosimilitud. Tampoco la tienen el resto de personajes, ni siquiera el argumento tan desaforado.

Por lo demás el ritmo es bueno y la película entretiene un poco.

Una película donde no falta la acción en ningún momento. Sobre todo hacia el final de la misma, donde la escena de la persecución en autos y la del tren merece ser vista más de una vez.
Un poco simple el tema desarrollado, sobre todo en las primeras escenas. un poco fuera de lugar el tema de su vida familiar, aunque es un verdadero contraste. Supe que fué su última película, casi 10 puntos.

Ultima película del legendario Steve McQueen en la que interpreta a un cazarrecompensas que se gana la vida capturando alocados personajes, que tienen cuentas pendientes con la justicia y siente pánico al saber que pronto será padre. Sin embargo, su vida corre peligro porque uno de los tipos a los que cazó ha jurado vengarse.

Cazador a sueldo es una amable cinta de acción a la que el carisma de McQueen salva de la mediocridad. Murió de cáncer unos meses después de finalizar el rodaje. En la película se le ve bastante estropeado y tuvo que ser doblado en la mayoría de las escenas de acción. Le acompañan los veteranos Eli Wallach, que interpreta al personaje que consigue trabajo para McQueen, y Ben Johnson en un breve papel haciendo de sheriff.

Lo que menos me gustó es el personaje del psicópata vengador que aparece y desaparece todo el tiempo y sólo al final tiene cierta relevancia. Se pasa media película amenazando al protagonista mientras éste se marcha a cazar delincuentes. Y también me desagradó todo el tema relativo al embarazo de la mujer y sus discusiones. Pero por lo demás el filme se deja ver. Le doy un seis por ser de McQueen que si no...

Entretenida, desenfadada, trepidante, divertida y un gran Steve McQueen haciendo un papelón como peculiar cazador de recompensas que no encuentra su sitio en el mundo de hoy en día.
Y lo que ya es el colmo: el personaje al que interpreta es un conductor desastroso.

Muy recomendada para pasar una buena tarde en familia, no falla.

Un tocado pero todavía no hundido Steve, poco le faltaba al pobre para sin remedio definitivamente caer, grande McQueen, frío, sobrio, con ese humor fatalista y esa calma sabia, protagoniza esta paupérrima película, lamentable y soporífera (al final* remonta un poco, tarde y mal).
Un embarazo que no acaba nunca, una ridícula crisis de pareja, malosos de risa a la carrera y el Papa poniendo orden son los ingredientes de esta bobada de marca mayor.
No tiene fondo ni sustancia, es demasiado básica, poco elaborada (los personajes son de arena) y funcional. Guion esquelético y dirección plana que solo en la constancia de algún malvado encuentra su tino y sesera.