Es una película con un desarrollo lento, demasiado lento, y bastante predecible, solo la salvan los últimos minutos, si aguantas hasta llegar a ellos.
Las interpretaciones son normales, nada destacables, y por otro lado las olvidarás pronto.
La dirección tampoco ayuda a despertar el interés por está película.
La premisa puede ser interesante, si bien poco novedosa, pero la lentitud es su verdadero problema, demasiado rodeo sin mucho sentido.

Calendario mortal es la tercera adaptación que veo de una novela de Sebastián Fitzek. Un autor que, al parecer, goza de bastante popularidad y que ha vendido millones de libros. El thriller "Cut Off", que sin ser una maravilla, sí que ofrece momentos de acción rocambolescos que la hacen disfrutable. "Terapia", un thriller de intriga en formato de miniserie que cuenta con buenos momentos, pero la cual terminó por decepcionarme bastante.

Lo cierto es que "Calendario mortal" me ha dejado un tanto descolocado. El planteamiento bueno de la historia, en mí opinión, no encuentra la debida complicidad con el guion que se nos presenta. Un guion adaptado de la novela de Fitzek por parte de la actriz y guionista alemana, Susanne Scheinder, a la que no tengo el gusto de conocer.

La historia se capta con interés, pero cuando el guion comienza a ofrecerme una serie de conceptos dudosos, me pierdo. Cojo el folio y lo miro de arriba abajo, de izquierda a derecha, lo vuelvo, y no termino de captar algo de lógica a lo que se me está contando.

Las interpretaciones rozan la corrección, especialmente por parte de la vejada, maltratada y, sometida, Klara (Luise Heyer). Su compañero de fatigas, el desconcertante Jules (Sabin Tambrea), también acredita un tono correcto en sus registros.

No sé, aún estoy intentando hacer cábalas para encontrarle la lógica, a diversos aspectos de esta historia. A no ser que aspectos cómo la coherencia, el rigor y, cierta lógica, no fuesen el primer objetivo de la película.
Apunta hacia algo medianamente bueno en sus primeros compases, pero finalmente no deja de ser un telefilm de medio pelo. Con un guion que tiene más agujeros que un colador y, el hecho de plantearse demasiadas preguntas sea absolutamente irrelevante. Me refiero a que no merece demasiado la pena.

Cumple con su cometido si eres capaz de mantener los párpados abiertos.