Desde el primer momento que empieza el film, un misticismo único va anegando tu mente, con esa fotografía, esa música... es algo increible.

El castillo ambulante es una pelicula envidiable, sus personajes desprenden humanidad a raudales (incluso el pequeño demonio calcifer). Otro fuerte de esta película es la imaginación que Miyazaki dibuja en esta historia, con un guión algo largo pero totalmente equilibrado que atraerá desde los mas adultos hasta el mas pequeño de la casa. Sin duda la autora de "la conspiración de Merlín" debe estar orgullosa de esta plasmación, y es casi irónico decir que la mejor adaptación de un libro ha sido una película de dibujos animados, y esto son palabras mayores que quedan dichas.

Pero desgraciadamente el final del film deja algo incomodo al espectador, contándolo demasiado deprisa; al igual que la historia de la guerra que queda con demasiadas lagunas, pero esto son contras que no manchan en absoluto la película.

Recomiendo que todo el mundo vea esta película, porque sea de dibujos, no significa que sea algo infantil, es un aunténtico prodigio, el Kubrick del anime.

Una vez más Miyazaki nos presenta otra joyita onírica de las suyas, de enredado argumento pero de muy disfrutable en lo referente a lo artístico. Y es que, aunque sólo con estos momentos estéticos que tiene la película ya vale la pena verla, también habría algo que me gustaría destacar.
Quizás solo sean conjeturas mías, pero sabiendo como están de obsesionados los japoneses con las catástrofes que sufrieron y que han sido plasmadas en películas, especialmente de anime, me fijé que esta película de Miyazaki tiene un matiz un tanto bélico que recuerda mucho la segunda guerra mundial. No es que esté exactamente enfocada a la destrucción masiva de las bombas atómicas, ni al severo autoritarismo de los mandatarios que protagonizaron la época; es más bien lo que tuvo que sufrir la población, en las familias y en sus casas en general: Un hijo o un marido que era reclutado sin quererlo y llegaba casa corrompido por la guerra, o la situación de las mujeres, tanto si era vieja o joven (como muy bien refleja el personaje de Sophie en la película), que se veían en las circunstancias de que con mucho coraje tener que llevar adelante sus casas ellas solas. Por no decir la simbología de las naves tirando bomba, las luchas aéreas e incluso algo más rebuscado: que el personaje del espantapájaros represente al mismísimo emperador.
También, otra cosa destacable, son las transformaciones físicas de los personajes, que fruto de las anímicas, pueden llegar incluso hacer que parezcan otros personajes distintos, muy curioso especialmente.

Para terminar, sólo decir que posiblemente lo peor de la película sea esa ñoñería romántica “made in Japan”, que hace que se nos empache algunas de las escenas.

Esto es miyazaki en estado puro; desde luego yo no entiendo como la gente puede ser tan cerrada para decir que estas películas no tienen sentido. Hacen sacar la imaginación de uno mismo, te hace creer que estás en ese mundo y que te gustaría vivir allí; no solo en estas películas, si no en la gran mayoria de este hombre. Es que no puedo seguir, no hay palabras para describir a estas películas.

La verdad es que pensaba que ya habia visto todas las obras maestras del cine de animación japonés, pero de pronto me he topado con esta maravilla. La verdad es que ahora mismo estoy contemplando una maravilla de la animación, pero sobre todo una maravilla de guión, de argumento, de historia. Magnifica obra, similar en magia y originalidad a "El viaje de Chihiro", en mi opinion menos enrevesado y más corto, pero lleno de magia, por eso le doy la mejor puntuación, porque desde el primer minuto en que la he empezado a ver he sentido esa sensación de : ha merecido la pena !!!!

Nunca antes había visto una película de Hayao Miyazaki, de un modo más generalizado, nunca antes había visto una película de dibujos japonesa, y nunca he sido especialmente un fanático del anime ni el manga (exceptuando 2 o 3 series desde niño)

Por una recomendación, accedí a ver esta cinta, las críticas eran positivas y, por probar no tengo nada que perder.

Si el señor Miyazaki leyese esto, que sepa que ha ganado un admirador, porque, no solamente posee una tierna y adulta historia dentro de su género sobre el amor, el odio, la magia ..., sino que también cuenta con un dibujo excelente, magnífico, con unos paisajes a modo colosal, deslumbrantes y , lo que para mí ha sido el plato fuerte: la autenticidad fantástica que la rige, es puramente obra de arte, una maravilla visual digna de verse, capaz de embrujar tanto a los niños como a los adultos, muestra de fantasía que nos aporta miedo, sensibilidad, ... amplia nuestra propia capacidad imaginativa, desde luego, muestra un alma muy especial y con un mundo interior de un abismo muy muy bello.
La única pega que le pongo es que la historia puede ser en ocasiones, difícil de comprender.

El Castillo Ambulante es una película de imaginación deslumbrante, que hechizara, si no por su historia, por su dibujo y todo lo que eso conlleva en Hayao Miyazaki.