No es la más aterradora de las películas del género, pero sí la más aterradora del año. Me encantó. Recuerdo cuando en la butaca no me atrevía a mirar. Que cuando mirada gritaba. No paraba. Espeluznante, terrorífica, tensa. La mejor de la saga. Qué bien lo hace la niña pequeña... Y la mayor. Y todos. Es increíble el nivel de terror que puede llegar a tener esta película. No decepciona.
¿Por qué el 9 si tan buena es? Lo digo en el spoiler.

Qué mal lo he pasado. Bueno, no siempre, durante las casi hora y cuarto no ocurre nada, solo pasa lo mejor en los cinco minutos finales. Me gustan las películas de terror, aunque cuando las veo siempre me entra mucho miedo y con ésta no es la excepción. Los orígenes del mal, del por qué de todo lo visto en las dos anteriores. Si has visto las otras dos y te gustaron como para ver más, puedes aventurarte con ella, sino a otra cosa. Yo, antes de ver la cuarta, quería darle una oportunidad que no pude cuando cine, y hoy ha caído. Los directores saben cómo mantenerte en tensión, eso sin duda. La actriz Katie Featherston ya no es la protagonista, nos trasladamos varios años en el pasado, concretamente en 1988 cuando las hermanas pequeñas Katie y Kristi, dejan entrar en sus vidas un ente sobrenatural, y aquí empieza todo el terror. Cuidado con lo que se juega, puede acabar muy mal. En esta entrega se notan más los efectos especiales y los efectos de sonido crean una buena atmósfera. Todo hay que decirlo. Esta cinta funciona como plan para una noche en compañía o para Halloween, junto con un buen tazón de palomitas y un refresco, el lote completo. Ahora, a por la cuarta. Espero atreverme.

Se dice que la actividad paranormal está asociada a lugares en los que previamente se produjeron cultos rituales satánicos, sufrimiento extremo o muertes violentas.

Muchos de los castillos, antiguos edificios en ruinas, palacios medievales son firmes candidatos a que en ellos se produzcan este tipo de fenómenos, pero resulta mucho mas inquietante el asociar estos hechos a lugares normales, a casas actualmente habitadas cubiertas por una pátina de cotidianidad.

Henry Joost y Ariel Schulman presentan la película en formato de video casero con la hora de grabación sobreimpresa, aunque por un lado se pierde calidad cinematográfica, por otro si adquiere grandes tintes de realismo al asimilar la película a tantas y tantas cintas de video doméstico.

Sin embargo, el film pierde agilidad al mostrarnos mucha “paja” para poco “grano”, carece de tensión argumental pues solo gana interés en momentos puntuales.

Esta película, aunque tire de tópicos de toda la vida en el ámbito del terror (oscuridad, espejos, ruiditos, niñas pequeñas semiposeidas, cámara en mano grabada en primera persona, viejas inquietantes, dibujos satánicos en paredes, aquelarres...)
Aunque no aporte nada nuevo al género, aunque no disfrute de unas grandes interpretaciones por parte de los actores, aunque no posee una banda sonora abrumadora ni un montaje digno de admiración...
Aunque, aunque, aunque...
Consigue con muy poquito, que hasta los más escépticos, se agarren a la butaca (llámale sofá, sillón, mano ajena, mano conocida, osito de peluche) y se mantengan en tensión durante los logrados 83 minutos (pese a que los primeros 15 flaqueen bastante) que dura la película.

Notable terror.

Esta saga (hasta ahora) va contando la historia de forma retrospectiva. Esta tercera parte va entonces antes de la segunda y antes de la primera.
Tenemos a una familia de los 80 con Christie y Katie de niñas, cuando ya empezaban los problemas, tal y como dejaban caer en la película anterior.
Es más de lo mismo, pero aquí ya los sustos más o menos te los esperas y no da tanto miedo. Por lo demás, el sistema de cámara doméstica ya cansa un poco, con esa cámara en el ventilador que resulta desesperante en la lentitud en mostrar los fenómenos, de forma que de tanto esperar el susto, cuando llega no es para tanto.
La historia ata cabos y explica algunas cosas (aunque no de forma muy mascada, pero todo se da a entender bastante bien), pero no me extrañaría que continuarán con algunas partes más.
Una pasable continuación para pasar el rato.