Ben HurCortometraje
4.0
170
27 de agosto de 2016
27 de agosto de 2016
11 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
En los albores del cine se rodó esta adaptación sin permiso de los autores y que apenas alcanza los 15 minutos, describiendo, de manera torpe y estática la carrera de cuadrigas, en un plano fijo por el que pasan diversas cuadrigas que apenas se diferencian. Estamos en 1907 y tampoco se pueden pedir peras al olmo, el hecho de construir unas cuadrigas y hacerlas correr ya tiene su mérito, aunque técnicamente son mejores las filmaciones caseras de la Primera Comunión.
Únicamente para aficionados a la arqueologia del cine.
Únicamente para aficionados a la arqueologia del cine.
22 de junio de 2024
22 de junio de 2024
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Te cuenta la historia (casi) completa de Ben Hur en dieciséis minutos, con dos cojones, y le sobran diez de puro relleno, de gente con el brazo en alto (moviendo la manita), arriba y abajo, como si tuvieran una palanca, ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú, paradoja, y de cuádrigas pasando por meta una vez tras otra, pobre gente.
Contada en pasajes o capítulos, tiene su gran mérito y mucha gracia por extraña o (anó)mala que esta sea, pero es machacona, pesada.
Contada en pasajes o capítulos, tiene su gran mérito y mucha gracia por extraña o (anó)mala que esta sea, pero es machacona, pesada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Se acaba en lo mejor, in medias res.
8 de febrero de 2023
8 de febrero de 2023
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30/01(01/02/23) Curiosidad anecdótica este drama histórico mudo, anunciado pomposamente en su momento como “El mayor espectáculo jamás filmado en USA”. Fue la primera adaptación cinematográfica de la popular novela de Lew Wallace de 1880 “Ben-Hur: A Tale of the Christ”. Codirigido por Sidney Olcott y Frank Oakes Rose, "photoplay" producido por Kalem Company de la ciudad de Nueva York, sus escenas, incluida carrera culminante de carros, filmadas en el distrito de Brooklyn de la ciudad. Cortometraje mudo estadounidense estrenado el 7 de diciembre de 1907, tiene su valor entre los antropólogos del cine, de los que me considero aficionado, siendo este uno de los primeros peplums de la historia, buscando ofrecer algo más al espectador con espectáculos épicos en pantalla, pero que en realidad en lo referente a valores de calidad o evolución de cine resulta muy plano, pues la realización se atiene a planos lejanos estáticos que te hacen perder el foco de los importante, donde incluso el momento clímax de la carrera de cuadrigas (solo hay cuatro) resulta entrañable por lo patético de la cámara fija en un plano por donde de vez en cuando pasan cuadrigas sin saber el que observa que es lo que pasa, toda la acción en esta escena está fuera de cámara, y donde hasta la tiene la torpeza de poner a los rivales con el mismo color de caballos (negros), ello mientras un grupo escaso (una docena puede) de romanos en las gradas elevan sus puños para algo de vidilla a la pobre escena.. Tristemente no hay innovación alguna aquí, las expectativas creadas con el gran show que es la historia, como demostraron Raoul Walsh en 1925 y William Wyler en 1959, quedan aquí reducidas a la anécdota de ser la primera adaptación, pero tan primitiva que parece hecha antes de los hermanos Lumiere inventaran el medio. En 1907 ya existía en el cine la edición, había en el cine movimientos de cámara, y los primeros planos ya se manejaban en producciones fílmicas, ejemplo es el cine coetáneo de Edwin S. Porter con su “The Trainer's Daughter”, donde en ese mismo 1907 se filma una carrera de caballo scon cortes transversales, cámara móvil, y cortes para imprimir ritmo. Pero los directores aquí lo desconocen o no saben adaptarlos, pareciendo una rudimentaria filmación de teatro, serie de tableaux vivants cuasi inertes
Su producción sirvió como caso histórico de infracción de derechos de autor por parte de uno de los primeros estudios cinematográficos estadounidenses. En 1908, Kalem fue demandado con éxito por representar partes del libro de Wallace en la pantalla sin obtener el permiso de los herederos del autor. Esto no era algo raro para su época y los estudios estaban constantemente haciendo películas basadas en novelas sin el permiso de sus titulares de derechos de autor. El fallo del 13 de noviembre de 1911 sentó el precedente de que todas las compañías productoras de películas primero deben asegurar los derechos cinematográficos de cualquier obra publicada anteriormente que aún esté protegida por derechos de autor antes de encargar un guión basado en esa obra. En última instancia, se requirió que Kalem pagara a los demandantes $ 25,000 ($ 730,000 hoy), así como todos los costos judiciales relacionados con el caso.
En 1899, los empresarios Marc Klaw y A.L. Erlanger pagaron a Wallace un millón de dólares en concepto de derechos de autor para adaptar la novela al teatro. Con un alto coste de producción estrenaron en Broadway un espectáculo sin precedentes. En él se sentaron las bases de las escenas de la batalla naval y la carrera de cuadrigas que luego pasaron al cine. El papel de Judá Ben-Hur fue interpretado sucesivamente por Edward J. Morgan y William Farnum, y el de Mesala por William S. Hart. La carrera se realizaba con carros tirados por caballos sobre una plataforma giratoria, con un ciclorama del circo romano como fondo y al son de la «Cabalgata de las valquirias». El éxito hizo que de las dos cuadrigas iniciales se fuera aumentando hasta ocho. En la batalla naval se emplearon telas brillantes para simular el agua. La obra fue representada en los Estados Unidos durante dieciséis años, y dio el salto a diversas capitales europeas.
El éxito de la obra teatral de Klaw y Erlanger incitó a la productora cinematográfica Kalem Company a realizar su segunda película adaptando la novela de Wallace. El director fue el canadiense Sidney Olcott, quien rodó una película de un solo rollo que era una especie de resumen de la historia mediante una sucesión de escenas en las que la cámara se mantenía estática y grababa a los actores. La carrera de cuadrigas era la secuencia más importante, y se basó en el rodaje clandestino del espectáculo que se venía representando en Manhattan Beach por una batería de bomberos de Brooklyn. Kalem Company no se molestó en comprar los derechos para adaptar la novela de Lew Wallace, quien había fallecido dos años antes. En aquella época no existían precedentes acerca de la materia respecto de las adaptaciones cinematográficas. Sin embargo, los herederos de Wallace demandaron a la compañía y obtuvieron una sentencia que les reconoció el derecho a percibir 25.000 dólares y estableció jurisprudencia: «Los derechos de propiedad intelectual deben obtenerse por las empresas antes de que de las propiedades se haga una película.»
Con un libro que consta de 558 y otras versiones cinematográficas que duran más de dos horas, los creadores de esta película pensaron que podrían poner toda la historia de Ben-Hur en un corto mudo de 15 minutos (el que yo he visto es de 10 minutos). Derivando el resultado final en algo caótico, con elipsis indescifrables, que a pesar de que cada escena es introducida por un intertítulo que intenta ponernos en situación, solo puedes seguir la trama si tienes un conocimiento previo de la historia, y con ello rellenas los infinitos huecos que dejan los saltos de tiempo, donde por la lejanía de los protagonistas sus actuaciones son inertes para el espectador.
Su producción sirvió como caso histórico de infracción de derechos de autor por parte de uno de los primeros estudios cinematográficos estadounidenses. En 1908, Kalem fue demandado con éxito por representar partes del libro de Wallace en la pantalla sin obtener el permiso de los herederos del autor. Esto no era algo raro para su época y los estudios estaban constantemente haciendo películas basadas en novelas sin el permiso de sus titulares de derechos de autor. El fallo del 13 de noviembre de 1911 sentó el precedente de que todas las compañías productoras de películas primero deben asegurar los derechos cinematográficos de cualquier obra publicada anteriormente que aún esté protegida por derechos de autor antes de encargar un guión basado en esa obra. En última instancia, se requirió que Kalem pagara a los demandantes $ 25,000 ($ 730,000 hoy), así como todos los costos judiciales relacionados con el caso.
En 1899, los empresarios Marc Klaw y A.L. Erlanger pagaron a Wallace un millón de dólares en concepto de derechos de autor para adaptar la novela al teatro. Con un alto coste de producción estrenaron en Broadway un espectáculo sin precedentes. En él se sentaron las bases de las escenas de la batalla naval y la carrera de cuadrigas que luego pasaron al cine. El papel de Judá Ben-Hur fue interpretado sucesivamente por Edward J. Morgan y William Farnum, y el de Mesala por William S. Hart. La carrera se realizaba con carros tirados por caballos sobre una plataforma giratoria, con un ciclorama del circo romano como fondo y al son de la «Cabalgata de las valquirias». El éxito hizo que de las dos cuadrigas iniciales se fuera aumentando hasta ocho. En la batalla naval se emplearon telas brillantes para simular el agua. La obra fue representada en los Estados Unidos durante dieciséis años, y dio el salto a diversas capitales europeas.
El éxito de la obra teatral de Klaw y Erlanger incitó a la productora cinematográfica Kalem Company a realizar su segunda película adaptando la novela de Wallace. El director fue el canadiense Sidney Olcott, quien rodó una película de un solo rollo que era una especie de resumen de la historia mediante una sucesión de escenas en las que la cámara se mantenía estática y grababa a los actores. La carrera de cuadrigas era la secuencia más importante, y se basó en el rodaje clandestino del espectáculo que se venía representando en Manhattan Beach por una batería de bomberos de Brooklyn. Kalem Company no se molestó en comprar los derechos para adaptar la novela de Lew Wallace, quien había fallecido dos años antes. En aquella época no existían precedentes acerca de la materia respecto de las adaptaciones cinematográficas. Sin embargo, los herederos de Wallace demandaron a la compañía y obtuvieron una sentencia que les reconoció el derecho a percibir 25.000 dólares y estableció jurisprudencia: «Los derechos de propiedad intelectual deben obtenerse por las empresas antes de que de las propiedades se haga una película.»
Con un libro que consta de 558 y otras versiones cinematográficas que duran más de dos horas, los creadores de esta película pensaron que podrían poner toda la historia de Ben-Hur en un corto mudo de 15 minutos (el que yo he visto es de 10 minutos). Derivando el resultado final en algo caótico, con elipsis indescifrables, que a pesar de que cada escena es introducida por un intertítulo que intenta ponernos en situación, solo puedes seguir la trama si tienes un conocimiento previo de la historia, y con ello rellenas los infinitos huecos que dejan los saltos de tiempo, donde por la lejanía de los protagonistas sus actuaciones son inertes para el espectador.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Es un corto que para los muy amantes del cine es apreciable ver por estar frente al cine en pañales intentando avanzar en el espectáculo que tenemos hoy día, pero entiendo que a pesar de su corto minutaje se hace tediosa la experiencia plana. La producción solo destaca algunos eventos de la novela original. La compañía cinematográfica en su publicidad de 1907 describe el lanzamiento compuesto por "Dieciséis escenas magníficas" con intertítulos que introducen presentaciones en pantalla como "Rebeldes de Jerusalén contra el desgobierno romano", "La familia de Hur", "Ben Hur encadenado al Galeras" y "Ben Hur y Messala: el desafío". Pasamos de estar Ben-Hur condenado a galeras (nunca lo vemos allí) a sin transición alguna ser hombre libre, y con ello preparándose para la mítica carrera de aurigas. No sumasn unos decorados poco inspirados y revestidos de frugalidad, parece que todo lo porfiaron en la producción al título, lo que fueran a rodar fuera parco de medios y de ideas era algo tangencial y poco importante.
La película acredita a dos actores por interpretar los dos papeles principales de Ben-Hur y Messala. Sin embargo, esto no significa actúen en esta película. El actor que se dice interpreta a Messala es William S. Hart, que fue un verdadero actor de Shakespeare y más tarde se convirtió en uno de los primeros y más conocidos actores de westerns a finales de los años 10 y principios de los 20. Si Hart participó en la película, sorprendente que Kalem en su publicidad no promoviera ampliamente la presencia de un actor de Broadway establecido en la película, especialmente un veterano de una producción de Ben Hur en el teatro " legítimo ". Hart era un amigo en la vida real de los legendarios Wyatt Earp y Bat Masterson y fue uno de los portadores del féretro en el funeral de Wyatt Earp, junto con otra estrella de cine del oeste como Tom Mix en 1929.
Spoiler:
Final: Después de que Judah gana la icónica carrera contra Messala y los otros dos competidores, aparece el intertítulo "Ben Hur Victor". Luego, la película termina con los espectadores que continúan animando; Judá recibe una corona de laurel del emperador; y Messala, que se lesionó durante la carrera, acostado en una camilla y señalando a su antiguo amigo.
Si bien Rottjer fue acreditado como "Jefe de carrozas" de la película y probablemente condujo el carro de Ben-Hur en la carrera por etapas en Sheepshead, los otros aurigas eran soldados fuera de servicio de la "3ra batería" de la Guardia Nacional de Brooklyn. Los miembros de esa unidad militar local eran bien conocidos por su experiencia en la equitación. Como testimonio de sus habilidades equinas, los soldados de la Tercera Batería de Brooklyn en agosto de 1908 establecerían más tarde un récord mundial de "resistencia militar" al recorrer 50 millas desde Nanuet, Nueva York hasta Brooklyn en solo seis horas, la mayor parte del tiempo viajando de noche. y por caminos de montaña. Pain's Fireworks Company proporcionó los carros conducidos por Rottjer y los guardias, junto con algunos otros accesorios y equipo relacionado.
En 1880 el jurista, militar, diplomático y político estadounidense Lew Wallace publicó su novela Ben-Hur, una hábil mezcla de sus propias ideas religiosas con una clásica historia de aventuras que contenía violencia y romance. El libro se convirtió de inmediato en un best-seller y superó los 500 000 ejemplares vendidos en formato de lujo a lo largo de ocho años. La obra conectó con los sentimientos religiosos de gran parte del público y obtuvo el apoyo explícito del Papa.
Me queda un cortometraje solo recomendable a los amantes d ellos orígenes del cine. Gloria Ucrania!!!
Para leer más sobre el film ir a: https://tomregan.blogspot.com/2023/02/ben-hur-1907-curiosidad-anecdotica-este.html
La película acredita a dos actores por interpretar los dos papeles principales de Ben-Hur y Messala. Sin embargo, esto no significa actúen en esta película. El actor que se dice interpreta a Messala es William S. Hart, que fue un verdadero actor de Shakespeare y más tarde se convirtió en uno de los primeros y más conocidos actores de westerns a finales de los años 10 y principios de los 20. Si Hart participó en la película, sorprendente que Kalem en su publicidad no promoviera ampliamente la presencia de un actor de Broadway establecido en la película, especialmente un veterano de una producción de Ben Hur en el teatro " legítimo ". Hart era un amigo en la vida real de los legendarios Wyatt Earp y Bat Masterson y fue uno de los portadores del féretro en el funeral de Wyatt Earp, junto con otra estrella de cine del oeste como Tom Mix en 1929.
Spoiler:
Final: Después de que Judah gana la icónica carrera contra Messala y los otros dos competidores, aparece el intertítulo "Ben Hur Victor". Luego, la película termina con los espectadores que continúan animando; Judá recibe una corona de laurel del emperador; y Messala, que se lesionó durante la carrera, acostado en una camilla y señalando a su antiguo amigo.
Si bien Rottjer fue acreditado como "Jefe de carrozas" de la película y probablemente condujo el carro de Ben-Hur en la carrera por etapas en Sheepshead, los otros aurigas eran soldados fuera de servicio de la "3ra batería" de la Guardia Nacional de Brooklyn. Los miembros de esa unidad militar local eran bien conocidos por su experiencia en la equitación. Como testimonio de sus habilidades equinas, los soldados de la Tercera Batería de Brooklyn en agosto de 1908 establecerían más tarde un récord mundial de "resistencia militar" al recorrer 50 millas desde Nanuet, Nueva York hasta Brooklyn en solo seis horas, la mayor parte del tiempo viajando de noche. y por caminos de montaña. Pain's Fireworks Company proporcionó los carros conducidos por Rottjer y los guardias, junto con algunos otros accesorios y equipo relacionado.
En 1880 el jurista, militar, diplomático y político estadounidense Lew Wallace publicó su novela Ben-Hur, una hábil mezcla de sus propias ideas religiosas con una clásica historia de aventuras que contenía violencia y romance. El libro se convirtió de inmediato en un best-seller y superó los 500 000 ejemplares vendidos en formato de lujo a lo largo de ocho años. La obra conectó con los sentimientos religiosos de gran parte del público y obtuvo el apoyo explícito del Papa.
Me queda un cortometraje solo recomendable a los amantes d ellos orígenes del cine. Gloria Ucrania!!!
Para leer más sobre el film ir a: https://tomregan.blogspot.com/2023/02/ben-hur-1907-curiosidad-anecdotica-este.html
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