Robert McCall garantiza una justicia inquebrantable para los explotados y oprimidos, pero ¿cuánto de lejos llegará cuando se trate de alguien a quien ama?


Secuela de El Justiciero que me gusto por su historia, actuaciones y narrativa. Cuando en 2014 se estrenó la primera (basada en una serie de televisión grabada en los estudios Universal Televisión y transmitida durante cuatro temporadas en la década de 1980 con 88 episodios) tuvo una gran aceptación tanto en crítica como en público llevando 130.000 espectadores solo en nuestro país. Y si bien no rompió la taquilla, le fue bien, y a lo largo de los últimos años el personaje generó una base de fans muy interesante.

Ahora llega la segunda parte que en Argentina se ubico en el cuarto lugar con 7.466 espectadores en un total de 165 salas, vamos a ver cómo será en los siguientes días pero, por ahora, el liderazgo lo está llevando la muy buena El Ángel. Aunque me gustaba el tráiler y la primera película no lo esperaba mucho pero igual tenía opciones sobre ella: iba a ser mejor, peor o igual/inferior o superior… y eso lo concluí cuando fui a verlo a una función subtitulada de las 23:30 hs.


Es una segunda parte MUY inferior, pero es unas de las pocas secuelas que me gustan porque ponerle al título un numero suele ser sinónimo de repetición… aquí están algunos elementos del anterior pero están bien implementados por parte del guionista Richard Wenk (quien escribió la anterior). El logra que generemos empatía con el protagonista principal y como va llevando a cabo sus actos, hasta transmite creíbles emociones y eso es en parte gracias al actor Denzel Washington (que, según escuche, es la primera secuela que participa en su vida) que logra una muy buena interpretación llevando al producto por buen camino, es el mismo Justiciero de siempre pero ahora conduce un auto, lleva a distintas personas a tal destino y se va enterando de lo que ocurre o pasa en el asiento trasero… cuando el asunto es malo, y más siendo de algo cercano… mamita querida.

Después los demás actores lo hacen bien. Pero más que una película de acción lo considero un drama con un poco de peleas porque se da el tiempo para el desarrollo de los personajes y eso me gusta porque no abusan del elemento clásico del golpe y golpe a cada rato.

El mismo director del anterior, Antoine Fuqua (en su cuarta colaboración con Washington) logra un buen film de acción que no decae en ningún momento, logra posicionar la cámara en el lugar correcto, en ningún momento vi que estaba desenfocado o mal hecho. Los efectos especiales están conseguidos.

También este film es muy sangriento y gráfico, me sorprendió la cantidad que había, no lo esperaba porque las productoras son muy de censurar, como paso ahora con la floja Megalodón que fue muy recortada y quedo muy light.

La música de Harry Gregson-Williams tampoco esta tan mal, aunque mi partitura favorita fue el del final.


Pero hay dos cosas que le critico a El Justiciero 2:
Primero, acá perdemos -como era de esperarse- el factor sorpresa, paso también con Deadpool 2, porque ya sabemos que va a pasar, sobre todo con McCall y el final puede ser, para la mayoría, muy predecible.

Y segundo (el más grave de todos), es que lo considere un poco ‘’episódico’’ por así decirlo. Sabemos que el personaje de Denzel ayuda a extraños con sus problemas y eso está muy bien… pero la gran macana es que esas subtramas no tienen nada que ver con lo que se está narrando inicialmente, como que paran la historia y deciden hacer una misión diferente… como un intermedio para que refresquen su mente un rato, contrario a la primer película que esas situaciones de justicia si tenían que ver con la historia y era muy lineal. Acá se toman su tiempo y si hay gente que dice que es un poco larga, los entiendo.


Pero al finalizar, El Justiciero 2 es una secuela muy inferior a la del 2014… pero una buena al final del día. Para mi es una recomendación y si son fanáticos de la acción y tiros, pero con un poco de desarrollo, no se la pierdan.

Nota: 7/10
Verde, Pulgar Arriba.