Un cometa va rumbo a colisionar contra la Tierra, descubrimiento a manos de Kate (Jennifer Lawrence), que trabaja con el doctor Randall (un Leonardo DiCaprio que vuelve a dar cátedra con su actuación). El fin del mundo se avecina y pareciera que casi nadie toma real dimensión del asunto. Así nace la premisa de 'Dont' Look Up' (que puede recordar a aquel capítulo de Los Simpson), nominada en varias categorías para los Globos de Oro.

La obra del bueno de McKay es una sátira desquiciada en donde entran en juego las redes sociales y la política. El realizador de 'The Big Short' y 'Anchorman', entre otras, apela a la comedia, con un estilo mordaz en el que nadie se salva de ser apuntado. Obviamente hay personajes despreciables y la crítica a la manipulación/manejo de los medios, a la información distorsionada a conveniencia y a la humanidad en sí, está claramente a la vista. Es este el motor y punto fuerte del film, más allá de que algunos momentos de humor (tengamos en cuenta el sello de lo absurdo del director) funcionen y otros queden a medio camino.

Con un reparto de ensueño, se lucen y sostienen con fuerza las situaciones, gracias a sus sólidas y carismáticas labores, Lawrence, Blanchett, DiCaprio, Streep (una presidenta sin escrúpulo alguno), Hill, Chalamet, Perlman y Rylance (mención aparte para el personaje que compone aquí Mark, de los mejores del relato) , entre tantos.

Puede que la duración sea un poco excesiva, como alguna de las contras del estreno de Netflix, pero el score sube gracias a ese épico final (es preferible no decir nada que pueda acercarse a un spoiler), que tranquilamente está entre los mejores desenlaces del año.

8 Alancitos Conspiranoicos sobre 10