Esto va de un par de abogados de mucho éxito (bien), a los que les gusta mucho Rusia (vale), tanto cómo para que su luna de miel la pasen en Moscú (bueno vale), resulta que un día deciden dejarlo todo asi de sopetón (que cosas) y abrir un restaurante de....si amigos, comida rusa (claro que si).
En esto, una mafia rusa en Madrid, decide ir a comer a un restaurante de comida rusa, y adivina dónde van (vaya por Dios) y entonces ya tenemos la acción montada. No me digáis que no es un guión totalmente currado y sin ningún punto débil, es una pieza casi de relojería, todo cuadra, claro que si.

El casting. Sale Leonor Watling, para mi una gran actriz, pero a la que los caminos del Señor no le han llevado precisamente por el camino de la comedia, para dramas si, pero para una comedia que quiere ser en plan Tarantino....ejem ejem, digamos que ver a Leonor Watling en una comedia te produce la misma sensación que escuchar a su grupo de música (Marlango), esto es, bajar la persiana y no levantarte en todo el dia.

También sale Hugo Silva (que guapo ¿eh?) quizá el peor actor de su generación, que te dice con la misma expresión, "te voy a matar" como "me da una barra de pan".

Lo de instalar el dispositivo de escucha en el móvil del mafioso ruso, es para quitarse el sombrero, cuando lo veas llegarás a la conclusión que ni Hitchcock lo hubiera hecho mejor, que maestría y que truco más bueno. ¿Es o no es un guión redondo?

Conclusión: Sigo pensando que los guionistas, ya no de España, del mundo, no leen dos veces lo que escriben, es que no hay otra explicación, y claro muchas veces lo que escribes la primera vez te parece mejor que Cervantes pero lo relees en frío y dices, madre mía que vergüenza.