Parásitos

Sin duda "Parásitos" se ha convertido en la sensación del momento tras haber conseguido los que quizás sean los premios más prestigiosos desde el punto de vista cinematográfico: Palma de Oro en Cannes y el Oscar a la mejor película. Su director, Bong Joon-Ho, autor de la extraordinaria "Memories of murder" o de la notable "The mother", muestra en "Parásitos" una gran habilidad para la mezcla de diversos géneros, habilidad que ya había demostrado en "Memories of murder". Es esta mezcla tan abrupta, en ocasiones, junto con los arriesgados giros de guion en donde radican las virtudes y también, por qué no decirlo, algunos de los defectos, sobre todo en lo que a la verosimilitud de algunas escenas se refiere, de "Parásitos".

Cuando hoy en día en Europa pensamos en Corea del Sur, nos imaginamos una sociedad avanzada y poco conflictiva. En cambio lo que hace Bong Joon-Ho es mostrarnos un país con fuertes desigualdades, reflejadas en la familia que vive en una especie de sótano y que tratará de ascender en la escala social a base de engaños (la picaresca por lo que se ve no es algo único de nuestro país) y de pasar por encima de quien haga falta. Para ello no recurre al manido tópico de la familia rica desagradable, altiva y explotadora ni al de la familia pobre sufrida y víctima del sistema, sino que ambas tienen zonas de luces (no muchas) y de sombras (las más de las veces). Por lo que se le agradece al director su huida del maniqueísmo y el no caer en la tentación de darnos una sesión de ideología, que es en lo que a veces puede caer el cine social.

Más discutible puede ser el final de "Parásitos", que parece, cuando menos, un poco precipitado, aunque esta posible precipitación y el afán por explicar demasiadas cosas, no empañan dos horas de buen cine.

Desde luego el cine coreano sigue gozando de buena salud.

Tengo que confesar que tenía un poco de perjuicio y desconfianza a la hora de visualizar esta película, no entendida como ha sido posible que esta película ha sido la ganadora de Oscar a la mejor película y al mejor director, ahora lo he entendido. La película se impuso a las grandes películas que estaban nominadas ese año 1917 (2019), Érase una vez en... Hollywood (2019), El irlandés (2019), Joker (2019).

Merecida de todos los premios que ha recibido, modesta, humilde, enigmática. Una película que va de menos a más, donde no deja indiferente con su inesperado y brillante guión, el director Bong Joon-ho
No deja una película al estilo del cine de la época dorada.

Bong Joon-ho nos deja una película digna del maestro del suspense Alfred Hitchcock, llevaba mucho sin que una película me impresionará a la hora verla, esta sin duda lo ha hecho.

Desde el viernes esperando ir a verla. Domingo por la tarde, al cine. Una peli avalada por la crítica y Palma de Oro de Cannes. Casi na! Transcurre la 1ª parte, y bueno, parece que promete. Sigue la 2ª parte, y ya empiezas a pensar que esto no va demasiado bien: argumento inverosímil, personajes planos, ausencia de todo enfoque social. Bueno, pero es bien sabido que los cinéfilos somos gente que no perdemos fácilmente la esperanza. Así que entramos de puntillas en la 3ªparte, todo eso de los sótanos de la casa y tal. Y entonces, es que ya se nos agota la paciencia. Y, por si faltara algo, un colofón de violencia y sangre a chorro, del todo gratuita. Al salir de la sala mi sensación oscilaba entre la incredulidad y el cabreo. ¿De vedad que a "esto" le han dado la Palma de Oro? ¿Estaremos en el día de los Santos Inocentes, y yo no me he dado cuenta? ¿Y para esto he perdido yo dos horas y media que podría haber dedicado a cualquier otra cosa más útil? Debe ser que yo no entiendo de cien, será eso. Pero, en mi opinión, estamos ante uno de los más grandes bluffs del cine de los últimos años. En una palabra: MALÍSIMA!!

La verdad es que no consigo entender a qué viene tanto ditirambo de la crítica. Para empezar, más allá de un par de detalles sueltos, no tiene ni puñetera gracia por muy bien predispuesto que uno venga. En segundo lugar, tanto "El ángel exterminador" como "La vida es un largo río tranquilo", por citar sólo un par, han dejado el listón muy alto en lo que a temática apocalíptica se refiere. En este sentido esta película no es mas que un 'quiero y no puedo ', que al director muy a las claras le viene grande. Esto es lo peor de todo: Song Kang-ho o como se llame, intentando dar la campanada, se mete en un jardín del que al final es totalmente incapaz de salir, poniendo a prueba la paciencia del sufrido espectador. Al menos yo me vi abocado a abandonar la sala al cabo de un par de interminables horas. Y conste que hice lo que pude para aguantar hasta el fin, pero todo tiene un límite.
Por lo demás, y hasta donde se me alcanza, técnicamente nada que objetar.