Haz click aquí para copiar la URL

Identidad sustituta

Ciencia ficción. Acción. Intriga Ambientada en un mundo futurista donde los humanos viven aislados en interacción con robots, un policía (Willis) se verá forzado a abandonar su hogar por primera vez en años para una investigación. Todo comienza cuando dos agentes del FBI (Willis y Radha Mitchell) son asignados para investigar el misterioso asesinato de un estudiante universitario relacionado con el hombre que participó en la creación del fenómeno high-tech de los ... [+]
<< 1 4 5 6 10 28 >>
Críticas 139
Críticas ordenadas por utilidad
27 de septiembre de 2009
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
He de reconocer que como muchos, esperaba que esta película del gran Bruce Willis estuviese llena de escenas con una acción trepidante y seguidas de las frases de machote a las que este actor nos tiene acostumbrados. Aunque la película no es lo que esperaba y en muchos momentos era previsible; creo que el futuro con el que juega la película si se hubiera exprimido de otra forma podría haber dado lugar a una película notable.
ricewind
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de septiembre de 2009
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Bruce Willis intenta salvar a la humanidad por enésima vez en los Sustitutos, pero de una manera diferente. No esperéis al incombustible John McClane al que nos tiene acostumbrados, sino a un policía amargado y taciturno atrapado en una vida anodina donde nadie es quien parece ser, y cualquiera puede ser moldeado a su antojo. En este futuro puedes ser quien quieras ser, tener la apariencia que más te guste, y además no correr riesgos. Se ha creado una vida aparentemente mejor, pero...es realmente una vida?
Así, Jonathan Mostow maneja a Willis como apuesta segura y nos tiene en tensión en algunos momentos, pero a la cinta le falta alma. Y no digo que Bruce no ponga empeño, que lo pone, y además con una acertada vena dramática, sino que la historia, a pesar de ser original dentro de su entorno, no posee la fuerza que debería. Y la premisa era buena, es una de las peores cosas que pueden pasar en el cine...una buena idea que podría haber dado mejores frutos.
Los efectos especiales son estupendos dentro de la factura técnica de la cinta, pero quizá ya hemos visto demasiadas películas parecidas. Y eso hace que ya no sorprenda. De todos modos, un giro final previsible y lagunas en el ritmo narrativo hacen de los sustitutos un entretenimiento palomitero sin más. El metraje no es excesivamente largo, lo cual se agradece, y la historia se va digiriendo sin sobresaltos donde nuestro querido Bruce es el total protagonista. Todo parece perfecto en esta nueva sociedad, sin crímenes, sin riesgos...sin realidades, sin verdad. Y eso no convence del todo a nuestro amigo Bruce. Su vida ha cambiado, pero no está seguro de que haya sido para mejor.
De hecho, al finalizar, plantea un dilema moral bastante interesante. Creamos el futuro creyendo que construimos progreso...cuando quizá lo estamos destruyendo? quizá cuando queramos volver a lo anterior ya sea demasiado tarde.
Obligatorio su visionado para fans de Bruce y la ciencia ficción en general. Entretiene lo suficiente para llegar al final, y de paso, plantearnos unas cuantas preguntas.

Y nadie como Bruce Willis para arreglar estas situaciones, en mi encuesta de actores, sería el primero. Él encaja en la cinta como la maquinaria de un reloj.
Miguel Moreno
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de septiembre de 2009
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Probablemente la mejor baza de esta película sea el conflicto moral que plantea: vivir la vida a través de la tecnología. Es algo que da que pensar, el hecho de manejar sustitutos para la vida diaria no es del todo eficaz o más seguro, tal y como da a entender la película. Además de los posibles riesgos que desentraña estar en tu casa desconectado del mundo y conectado a una máquina sin darte cuenta de lo que sucede en el resto de tu hogar, el uso de estos robots, acarrearía una pérdida de sentimientos, de sensaciones humanas. El miedo, la pasión, los nervios, una borrachera, taquicardia...Los sustitutos son máquinas, carecen de esos sentimientos o sensaciones. Otro punto débil de esta teoría es el dato de que la delincuencia baja tras la comercialización de dichos robots. ¿Acaso aquellos criminales que se lanzan a delinquir no lo harían más a menudo sabiendo que no van a morir por un disparo de la policía, o por un accidente si usan los susodichos sustitutos?

Y así podríamos estar todo el día, reflexionando o sacando conclusiones morales sobre esta película. Un argumento "filosófico" que ya podíamos ver en anteriores películas. Grandes efectos especiales, lo que denota cierto desfase económico y que no da buen resultado una vez que finaliza el largometraje.

Personalmente, echo de menos a John McClaine.
Jesucristo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4 de octubre de 2009
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta peli va de un mundo en el que todos los seres humanos tienen una especie de doble robótico que hace todas las tareas diarias (ir a trabajar, relacionarse, incluso practicar el sexo) mientras ellos están tumbados en unas camillas con los ojos tapados como si tomasen rayos uva. Huelga decir que los sustitutos suelen ser mucho más atractivos que esos humanos de las camillas.

Se supone que todos son felices, pero uno se da cuenta pronto de que no es así (qué raro, ¿no?). Y entonces va Bruce, que es un agente del FBI (porque el FBI siempre existirá, con robots o sin ellos) y se ve envuelto en una trama de asesinatos y conspiraciones.
La gracia de los sustitutos es, en principio, que permiten a sus dueños (llamados operadores) hacer de todo sin hacerse daño (incluso en las guerras; es como pelear a través de una consola de videojuegos); pero oh, mierda, aparece un arma que les fríe el disco duro a los robots y, a su vez, revienta los cerebros de los humanos que están conectados a ellos desde sus casas. Claro, eso es un desastre. Así que Bruce, cuyo sustituto lleva un peluquín rubio, se pone a investigar el asunto.

A medida que veía pasar las imágenes, no podía evitar que me vinieran a la mente flashes de otras pelis: Terminator, Yo Robot, Matrix, La Isla... y todo el rato me acordaba de los replicantes de Blade Runner y de videojuegos como Los Sims. O sea que la peli no es aquello que digas una idea original. Pero está entretenida si uno no se pone muy exigente. Esi sí, el peluquín no tiene excusa.
BigCat
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
20 de febrero de 2010
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hoy como ayer camino aislado rodeado de un mundo de gente, por la calle, la misma calle de siempre, y como ayer deambulo absorto en mis pensamientos, imbuido en mi propio mundo de sombras, encadenado a mis propios fantasmas, lastrado por tantas amargas experiencias pasadas...
Hoy como ayer vivo ausente, especulando acerca de la vacuidad de una existencia que lentamente se consume sin ningún sentido aparente...
Hoy como ayer visito lugares yermos, eriales de sentimientos, desiertos de huellas de momentos que antes fueron vibrantes, apasionantes, tensos....
Hoy como ayer miro a mi alrededor y no veo a nadie; sólo a seres entristecidos, marchitos e inexpresivos, ocultando sus verdaderos rostros, surcados por torrentes de sordo dolor.
Hoy como ayer aparento lo que no soy, una colorida y expresiva fachada que esconde lo que en de verdad existe, los escombros herrumbrosos, que arcanos, se ocultan de las miradas escrutadoras de los otros.
Hoy como ayer, observo a los demás, y veo lo que soy, veo el triste reflejo de mi mismo: caras sonrientes, pero ausentes de vida propia; caras relajadas, pero absortas en sus inmensas cuitas, caras hermosas, que maquillan un interior marchito de amor, caras, en definitiva, que ocultan un interior devorado por el pavor a su propia vida.
Hoy como ayer, ensimismado en mi oscuro mundo, embolicado en mis propias miserias, fingí ser lo que no soy, aparenté sentir lo que no siento, simulé una felicidad que nunca he alcanzado.
Hoy como ayer odio todo lo que soy y lo que nunca llegaré a ser, odio lo que fui y también lo que seré, pero sobre todo, hoy como ayer odio a todos los que son como yo.
Hoy como ayer, soy como un sustituto, y camino rodeado de sustitutos.
simón
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 4 5 6 10 28 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow