Da gusto ver una película como 'La doncella', sin ningún efecto digital, donde son los paisajes, los decorados y un guión atractivo los que hacen que las casi dos horas y media que dura, se pasen volando. Es una historia contada a su debido ritmo, sin precipitarse.

La película se divide en tres actos, como si fuese una miniserie. Está cargada de erotismo, y sorprende con varios giros de guión. La banda sonora, también recuerda a las superproducciones de los 90.

Park Chan-wook me fascinó con 'Old boy', que vi en versión original subtitulada, aunque las otras películas de la trilogía me parecieron inferiores. Esta vez, con 'La doncella', ha vuelto a hacer un peliculón.