Juego de tronos tuvo un decepcionante epílogo; tan decepcionante que algunos hasta tuvimos dudas de empezar a ver esta "Casa del Dragón". Pues bien, la deuda que nos quedó con este universo está saldada (por ahora).

La serie comienza con un ritmo un tanto lento, (como todas las series de larga duración a decir verdad) pero finaliza con unos intensos y vibrantes capítulos , con escenas y secuencias que ya han quedado en la memoria de los más fieles (y no tan fieles) y con un final... QUÉ FINAL, digno de su predecesora, la cual tantos y tantos momentos tan espectaculares e inolvidables nos ha hecho vivir.

Sin entrar mucho en argumentos y muchos menos en "spoilers", la trama se sitúa en torno a 170 años del nacimiento de Daenerys, la última Targaryan, y cuenta la historia del origen de la "Danza de Dragones" que, en otras palabras, es la guerra por el trono entre las diferentes "ramas genealógicas" de la amplia familia de cabellos blancos.

Comentando un poco a nivel cinematográfico, quiero hacer mención especial a Paddy Considine, actor de renombre en el mundo de la televisión (villano de la 3º temporada de Peaky) y ya un "clásico" de la majestuosa HBO (The Outsider, entre otras). La secuencia de la cena en el octavo episodio es uno de los mejores momentos del universo audiovisual de George R. Martin, sin duda.
Y, como comenté antes, el último capítulo de la temporada, precedido por supuesto de momentos únicos y espectaculares como el del Septor de Baelor o el juicio por la herencia de Bastión de tormentas.

Ese final... tantas veces visto en Juego de tronos, es justo lo que esperábamos los fans. Ese tipo de final que ya nos hace poner la vista, lamentablemente, hasta el 2024, que es cuando se emitirá la 2º temporada.

El filme (o documental, como ustedes prefieran) desde el primer momento apunta a que algo va a pasar, no digo que sea previsible, pero en cierto modo en esta nuestra sociedad tan particular, con cada personalidad, vivencias, y creencias de cada uno... Al final somos todos idénticos.

Me explico; al fin y al cabo todas las personas que han "vivido" algo, ese algo que a cada uno lo desarrolla como ser humano, tomando de base o de raíz la genética, no la viven "solos". Es decir, todas las experiencias de tu vida las han vivido otro u otra, y con ello hay ciertos patrones que se acaban repitiendo una y otra vez...

El claro ejemplo es el de Eddy. A pesar de ser el personaje (o persona, recordemos que esto es un documental) que de algún modo "mejor" apuntaba, su desenlace en la historia estaba medio claro, por lo menos desde mi punto de vista.

¿Y por qué? Porque mis vivencias y creencias han hecho que algunas personas que he conocido de forma directa o indirecta semejantes a Eddy hayan tenido una vida comparable. Obviamente esto es una generalidad, y lo "bonito" de todo esto es que cada uno tiene su particularidad y su algo "único".

A lo que voy es, que lo que me ha gustado de esta historia ha sido que durante el desarrollo de esta piensas que las personas somos así en mayor medida por una cosa, después de otra, para acabar "descubriendo" que no, que nosotros somos una mezcla de muchos patrones.
Somos una sociedad idénticamente diferente.

Querido Baz, pese a mi corta edad, me enamoraste. Sí, me enamoraste hace 25 años con una obra maestra llamada Mouling Rouge; me enamoré del gran Ewan y de la espectacular Nicole... jamás volví a sentir un flechazo de esa manera.

Y hoy, 25 años después, visualizo la película del rey del Rock, pero esto ya no es un biopic, no, esto es un musical, ese género del séptimo arte que tanto echaba en falta, y esa forma de narrar una historia, una historia verdadera, pero a través de la música y del espectáculo de esta, de la cual me enamoré, como he dicho antes, hace 25 años.

Y es que Butler hace el papel de su vida, esa forma de hablar, de moverse... pero es, de nuevo, el maestro Luhrmann quien sabía que ÉL tiene que ser Elvis, porque los genios de este mundo no solo crean, si no también "roban" lo mejor para representar su obra.

Y como mención aparte, la vida del protagonista, siendo honestos no sé hasta que punto la biografía es exacta, pero después de observar cómo el egoísmo humano se aprovecha del verdadero talento, del verdadero arte, de la verdadera persona... ¿Realmente querríais ser como Presley? ¿Ser un superdotado, en este caso, de la música? Es una pregunta que lanzo al aire.

Por lo demás, y como siempre, que viva el Cine, que viva la Música, y que viva el Amor.
"Un reverendo me dijo una vez: "Cuando digas cosas que son demasiado peligrosas, canta".