El justiciero

Vista la nueva película de Antoine Fuqua después de la notable Objetivo: La Casa Blanca (2013). La calificaría de muy buena. Te mantiene en tensión durante toda la trama, sobretodo en la parte final. Denzel está sobresaliente y hay secuencias bastante explícitas. La Chloë Grace Moretz sale poco, pero me ha gustado su presencia en el film. El caso es que Denzel es un buen actor y me creo sus personajes. Todas las películas que he visto de él me han gustado, en mayor o menor medida, pero no me han decepcionado. Además, la he visto en versión doblada al español, y puede que a algunos les repatee esto, pero la voz de doblaje le pone ese toque enorme al actor original. Todo el reparto está asombroso, apareciendo de vez en cuando la guapa Haley Bennett como una amiga del personaje de la Moretz, Melissa Leo se deja ver en algunas secuencias. A Bill Pullman le he visto algo desmejorado, para dos frases que tiene, parece como a modo de cameo. Me dejo por mencionar al actor Marton Szokas que interpreta a un más que notable villano. Esa cara de mala baba no se la quita nadie. Antoine Fuqua sabe dirigir muy bien a los actores. Ya lo hizo con Denzel Washington en Training Day y con la que nos ocupa igual. No he visto El fuego de la venganza, pero no sé, por el trailer que vi en su momento hace ya bastantes años, hay secuencias que me la han recordado. La música que está a cargo de Harry Gregson-Williams me ha resultado muy decente y casa muy bien con la cinta. La canción del final cantada por Eminem junto a una tal Sia Furler, que ya se escuchaba en el trailer, como traca final. Mucho mejor de lo que esperaba visionar. Casi dos horas y cuarto de metraje que se pasan volando. Le pongo como nota final un 9/10.

Cuando oyes el nombre de Antoine Fuqua te viene irremediablemente a la cabeza "training day". Con esta película no sucederá lo mismo. Una cinta tediosa y desconcertante. Todo gira alrededor de un todopoderoso Denzen Washington, un ex-agente de la CIA, ya retirado (bueno retirado no, pero mejor no hacer spoilers), que basicamente tiene el rol de el puto amo... este personaje os suena no?

De 128 minutos de metraje, solo 10 son escenas de acción, los otros 118, se centran en como el personaje de Denzel Washington se vuelve un justiciero, con escenas llenas de despropósito y absurdas. Los personajes secundarios no ayudan nada, están fuera de papel, desde Marton Csokas un asesino ruso, que se supone que es el ejecutor de la mafia rusa y luego va mas perdido que un vegetariano en un matadero. Una Chloë Grace Moretz que aparece brevemente, cumplidora. Eso si, Denzel Whasington de puta madre.

Lo mejor: los 40 segundos que dura la matanza del restaurante ruso.
Lo peor: Las escenas de relleno como la de Bill Pullman o el capo ruso.

Indiscutiblemente, el peso y responsabilidad del buen hacer, recae sobre Denzel Washington, que nos ofrece una brillante caracterización de un personaje complejo, donde todo queda claro, pero se adivina mucho más, bajo su mirada inescrutable.

Me ha gustado la primera parte, al introducir al espectador con delicada sensibilidad en la rutina de Robert McCall, mostrando un pasado, absolutamente alejado del presente.

A medida que The Equalizer avanza, va sepultando ese atractivo mágico del principio, al trasladarlo hacia un asunto más prosaico de tiros, golpes, sangre y muerte; vendido al más primario cine de acción.

El único atractivo que tiene este thriller de acción es ver a Denzel Washington haciendo de tipo extremadamente duro, lo cual es un motivo de peso, pero sin mostrar nada que no hayamos visto ya en innumerables películas similares. Además tiene un toque pretencioso que la hace cargante y aburrida en demasiadas ocasiones, con una duración excesiva para lo poco que nos acaba contando. Lo que el trailer deja entrever en dos minutos y medio es justamente lo que encuentras, pero desarrollado durante más de dos horas y añadiendo un par de secuencias con altas dosis de violencia desmedida.

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Ni el Denzel es capaz de salvar este cúmulo de gores gratuitos malamente hilado. Todo es justo como uno lo espera. En fin. Lástima de dos horas robadas a mi sueño.