Vi el trailer y no me daba buena espina...vi al actor y algo no me encajaba... en fin, fui muy receloso y desconfiado al cine.

Y ahora escribo esta crítica después de haberla visto por segunda vez... en dos días... y no acostumbro a repetir experiencias pero esta valía la pena. Recomiendo verla en versión oroginal, en una pantalla grande y sonido Dolby Atmos como si de una película Marvel se tratara: se nota que fue pensada por el director para este tipo de proyección.

Magnífica revisión biográfica sobre uno de los artistas más grandes de todos los tiempos con el estilo tan peculiar del director experimentado Baz Luhrmann, de sobras conocido por la colorista y barroca Moulin Rouge.

La película empieza con ese estilo precisamente y uno piensa que podría caer en el abuso del mismo pero no: lo hace como entrada espectacular que nos presenta la historia que nos va a entretener y emocionar durante más de 2 horas y media.

El film capta y explica a la perfección el hito que consiguió Elvis con su aparición en la escena musical en la época donde todo parecía más complicado para los afroamericanos que para la los blancos.

Su música fusionó varios estilos y lleva en lo más profundo la influencia de la música blues y soul negra pura que él mismo oía y vivía en las calles de su humilde barrio. Fue poseído por ese espíritu y supo llevarlo, innovando, a otra dimensión desconocida (la escena de esa 'posesión' en su juventud está magníficicamente montada en la película).

También se escenifica de forma formidable esa revolución sexual que produjo ese en el público reprimido femenino con unos hipnotizantes movimientos de la pelvis de ese chico 'poseído por el diablo' y 'fruta prohibida' en su época (gran trabajo en los planos de caras y reacciones femeninas en una escena que marca la pelicula).

Elvis le debe a la música todo pero la música le debe a Elvis... su innovación, su pasión, su capacidad de transformación y... su vida: toda la dedicó en cuerpo y alma hasta el fin de sus días. Y qué bien lo plasma la película... con un genial Auston Butler (otro poseído, que clava el espíritu, la voz, acento y diálogos del genio: nominaciones y premios a la vista) y un odioso Tom Hanks (se hace detestar como prentende su personaje).

La música (y sobretodo las mezclas musicales como "That's all right mamma" en la actuación de Las Vegas), las actuaciones, la energía y pasión que desprende este Elvis... nos hace gozar de un espectáculo que merece vivirse y sentirse en pantalla grande... inspirándose en los hechos reales pero realizando un montaje con empastado propio de un cuento musical.

Bravo.

Una idea original, una gran excusa para recuperar a los Beatles, presupuesto, un director reconocido y con experiencia (ganador de un Oscar)...y acaba saliendo esta obra? Madre mía donde hemos acabado Danny Boyle...

Tampoco ayuda la pareja que tiene más encanto en el poster promocional que en todos los fotogramas de la película...

El film es un claro ejemplo de como hacer una película con un planteamiento interesante o ingenionoso en algo aburrido y plano...sin aliciente que no sea cual será la próxima canción que sonará de los Beatles.

Ni la sorpresa de ver a Ed Sheeran correteando provoca otro aliciente más. Sin un buen guión no hay forma de hacer algo decente.

Totalmente olvidable.

Una de las cosas que más sorprendre de esta adaptación de comic es que a diferencia del resto: ni hay superheroes, ni persecuciones en coche ni la pomposidad en los efectos especiales.

Hay personas, sufrimiento, psicología y sobretodo coincidencias que llevan a un trágico destino.

Porque, en determinadas circunstancias, siendo de los 'buenos' quizás no se destaca en una sociedad que desprecia a los imperfectos. Pero cambiando de bando, pasando a ser de los 'malos', se llega a ser alguien y se gana un respeto que no se tenía: se encuentra el sitio en esta vida. That's life!!

Phoenix está en su salsa (excelente como siempre) y sabe dosificarse, sin excesos, en la evolución de esa transformación hacia el lado maligno.

La dirección equilibrada del film ayuda a sentir esa claustofobia que tiene el Joker por estar encerrado en la persona que no quiere ser.

Dura, real, reflexiva...como la vida misma. Ver al Joker dejar de hacer el 'payaso' para convertirse en humano, la convierte en una joya.

La película se deja ver por una de las interpretaciones más divertidas de Shahrukh Khan pero cojea en lo más importante: el guión.

Tras una primera parte de lo más entretenida la historia pasa a complicarse en la segunda hasta llegar a escenas donde flaquea el ritmo y las ideas (que eran tantas inicialmente...).

Lo mejor sin duda los efectos especiales y la vistosidad del film, siempre acompañado por una gran banda sonora. (a destacar la escena colorida de baile en un hotel donde suena el tema principal)

Aamir Khan es uno de los actores indios más respetados y admirados por su dedicación y control en todo lo hace.

Conocido como 'Mr Perfeccionist' , ha logrado en los años 2000 poner el listón muy alto en lo que se refiere a calidad, elección de la historia y sobretodo en el mensaje reflexivo de sus películas... '3 idiots', 'PK', 'Dangal', 'Lagaan'....una larga lista de clásicos que deben verse.

Esta película supone un cambio a ese tipo de películas y entra de lleno en el cine espectáculo comercial, localizaciones alucinantes y efectos especiales a la altura.

La película no es perfecta está claro, no es la obra maestra que se podía esperar de Aamir...pero entretiene y divierte acompañada de una buena banda sonora y números musicales (pocos siendo una película India).

Exagerada en algunas escenas de acción (como cualquier película made in Hollywood) o baile (hay escenas con humor a lo Benny Hill) y con algunos personajes inverosímiles (como puede ser un señor de 70 años dando brincos) es lo que es y lo que pretendía ser: película para pantalla grande para consumir con muchas palomitas durante su metraje.