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España España · madrid
Críticas de Padrinoh
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Críticas 17
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
8
21 de abril de 2007
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta es una de esas películas que, con el tiempo, acaban convirtiéndose en clásicos dentro de su género. La historia gira en torno a un novato agente (Ethan Hawke) que es escoltado en su primer día en la unidad de narcóticos del departamento de policía de Los Ángeles por un curtido veterano interpretado magistralmente por Denzel Washington, que ganó el Oscar como mejor actor por este film. Durante una angustiosa jornada, el personaje interpretado por Hawke conocerá los guetos más peligrosos de la ciudad y servirá de cabeza de turco para las maquinaciones del corrupto Alonzo (D. Washington).

El film, al transcurrir la mayor parte de su acción en barrios conflictivos de negros y chicanos, tiene una clara estética urbana, como se puede ver, por ejemplo, en el vestuario de los personajes, sus coches customizados, y las canciones de hip hop que aparecen constantemente a lo largo de todo el metraje. Además, muestra al espectador la forma de vida de muchos suburbios de Los Ángeles de un modo casi documental, mientras nos cuenta la historia de Alonzo y su discípulo que, durante su descenso a los infiernos, se cruza con personajes interpretados por Snoop Dogg, Dr. Dre o la cantante de R&B Macy Gray.

Training Day es una película eficaz perfectamente rodada y que mantiene el ritmo a lo largo de toda su corta duración; además cuenta con algunas escenas cumbre como aquella en la que el policía novato es abandonado por su superior en casa de unos pandilleros chicanos. Su estrecha relación con el hip hop no se reduce solamente a los cameos de algunos de los artistas más importantes de la Costa Oeste, sino que también cuenta con una banda sonora en la que colaboran algunos de los más prestigiosos grupos de rap americano, como Cypress Hill, M.O.P, Dr. Dre, Gang Starr o Pharohae Monch.

En definitiva, nos encontramos con una película muy entretenida, con buenas dosis de acción, grandes interpretaciones, una banda sonora cuidada y, por si todo esto fuera poco, la siempre estimulante presencia de Eva Mendes (2 fast 2 furious), lo que hace que sea muy recomendable pasar por este interesante “día de entrenamiento”.
Padrinoh
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6
21 de abril de 2007
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Qué ocurriría si un senador demócrata, harto de la falsedad del mundo político, decidiese dedicar el cierre de su última campaña electoral a decir sólo la verdad a ritmo de hip hop? Este es el punto de partida en el cual se apoya el veterano actor y director Warren Beatty para construir una efectiva sátira política en la que el rap tiene mucho que decir. Desde el momento en el que el senador Bulworth da un mitín en la parroquia de un gueto de Los Ángeles, cambia su forma de ver la vida y la política y decide dar un giro radical a su forma de hacer las cosas.

Destacan las escenas en las cuales el trajeado político, en un claro estado de enajenación mental, se pasea por peligrosos clubs de pandilleros en los cuales trata de bailar breakdance, rimar y hacer scratches; o aquellas en las que empieza a improvisar en multitudinarias charlas ante una elegante y desconcertada muchedumbre de electores, con la consiguiente desesperación de su consejero cocainómano bien interpretado por Oliver Platt (Decisión Crítica, Doctor Dolittle).

Pese a tratarse de una comedia en apariencia inocente, la película tiene una enorme e implacable carga crítica que ataca sin miramientos a la clase política y a parte de la sociedad norteamericana, además de un alto contenido de denuncia social, como se puede ver, por ejemplo, en alguno de los múltiples freestyles del protagonista o en la escena en la que aparece una pandilla de niños de apenas doce años armados hasta los dientes.

El film tiene un entretenido desarrollo en el cual el rap y su cultura aparecen como un elemento más de la acción y no sólo como telón de fondo. La banda sonora conjuga el interesante trabajo del mítico compositor Ennio Morricone con la aportación de importantes figuras del hip hop americano como Ice Cube, Chuck D, Dr. Dre, Flavor Fav y Method Man. Además la película cuenta con una de las primeras interpretaciones de la encantadora Halle Berry y un papel de reparto interesante de Don Cheadle, recientemente nominado al Oscar por Hotel Rwanda.

Por cierto, la película no fue estrenada en cines en España y tampoco fue doblada, lo que hace que sólo exista la versión original subtitulada, lo cual, a pesar de parecer un engorro, nos permite disfrutar en toda su plenitud de las muchas parrafadas del senador Bulworth, que no tienen desperdicio.
Padrinoh
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7
21 de abril de 2007
9 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pocas veces una comedia ha alcanzado unos grados de perfección técnica y estética como los conseguidos en Playtime. La película gustará o no artísticamente; el espectador puede sentirse atraído por el particular sentido del humor de Tati y por los múltiples gags visuales y sketches que pueblan el film o, por el contrario, puede no coincidir con la visión del director y aburrirse soberanamente. Pero lo que resulta innegable es la enorme y sorprendente belleza estética que emana de este clásico del cine francés.
En Playtime se recrea un París aséptico y futurista, de espacios abiertos, edificios modernos y decoración minimalista. En este contexto, seguimos los pasos de una serie de personajes que se mueven entre las calles de la gran ciudad coincidiendo en aeropuertos, oficinas y restaurantes. No existe un protagonista claro, si bien cabe destacar la presencia de Monsieur Hulot, alter ego de Tati, que ya había sido visto en Mi tío (1958) y Mr’s Hulot’s holiday (1953), ambas de J. Tatischeff (su verdadero nombre).
Los diálogos no abundan en el film, dejando clara la influencia que recibe del cine mudo. Las pocas conversaciones que hay se dan en varias lenguas diferentes que, en ocasiones, se mezclan y superponen de manera caótica, acentuando el tono absurdo que sobrevuela la mayor parte de la cinta. La galería de personajes es rica y extensa y, en este sentido, cabe destacar la excelente dirección de actores que consigue dar la sensación de que incluso los extras tienen un papel asignado. Esto es sólo una pequeña muestra del detallismo y de la enfermiza manera de trabajar de Tati, que, en múltiples ocasiones, se creó deudas económicas al demorar la salida de sus filmes porque siempre había algo que retocar.
El perfeccionismo del realizador francés se traduce también en la complicada estructura de la película; particularmente en su arriesgada planificación (en la que no encontramos ni un solo primer plano) y en su original fotografía. Mediante el excelente uso de estos elementos, se consiguen retratar de manera magistral tanto el frío e impersonal París del inicio de la historia como la maravillosa y cálida Ciudad de la Luz en que termina convirtiéndose al final.
Y es que Playtime nos muestra la evolución de la capital francesa y de los personajes partiendo de una situación en la que todo está mecanizado, todo es clónico y sin alma (atención a las imágenes de los enormes edificios y de las masivas cantidades de coches idénticos hacinados en aparcamientos) y termina con una deliciosa secuencia final en la que todo es color y calidez.
Padrinoh
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6
21 de abril de 2007
71 de 80 usuarios han encontrado esta crítica útil
8 Millas retrata una semana en la vida de un joven blanco de los suburbios de Detroit cuya mayor afición es el rap. La cinta, que está ambientada en 1995, tiene un claro contenido biográfico (Eminem ayudó en la elaboración del guión) y muestra la cruda realidad de las barriadas de una gran ciudad americana en clave de drama urbano. Nos guste o no, este es el film de claro contenido hip hop más importante y exitoso de todos los tiempos. La película podrá tener sus fallos, pero es evidente que el rap tiene una importancia enorme en ella y es el proyecto comercial que mejor ha mostrado la escena “underground” estadounidense hasta la fecha.

En el plano artístico, se puede echar en falta un guión algo más elaborado, que no sirva sólo para lucimiento de su flamante protagonista, o una mejor interpretación de los actores (la capacidad dramática de Eminem no va acorde con sus dotes líricas), pero el director Curtis Hanson (L.A Confidential) consigue construir un ambiente realista y muy propicio para la historia que relata; además, para cualquier amante del rap resulta cuando menos interesante observar las entretenidas batallas entre los mc’s que trufan gran parte del metraje y suponen el clímax del film (en el dvd, podemos ver las “rap battles” en versión extendida, con pequeñas joyas tanto por parte de Eminem como de sus oponentes).

Aparte de todo esto, hay que resaltar una excelente banda sonora en la que aparecen canciones de Mobb Deep, Notorius B.I.G., Wu Tang Clan o Outkast, además de los temas que se idearon expresamente para el film, con canciones de D-12, Jay-Z, X-Zibit (que, por cierto, aparece en 8 Millas en una corta pero divertida escena) o el propio Eminem, que ganó el Oscar a mejor canción por “Lose Yourself”.

8 Millas es, pues, una película de claro contenido hip hop, fácil de ver, y que ayudó, junto a su rubio protagonista, a hacer del rap algo popular en países como España. Si con todo lo que te he dicho no te animas a verla (si es que eres de los pocos que no lo ha hecho), cabe resaltar también la agradable presencia de Brittany Murphy (Recién casados, Ni una palabra) y, para los más nostálgicos, de la madurita Kim Basinger.

Definitivamente, una peli de referencia, le pese a quien le pese.
Padrinoh
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6
21 de abril de 2007
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
“Empire” es el nombre que recibe la mezcla de heroína que vende el camello protagonista del film interpretado por John Leguizamo. Nueva York sirve como telón de fondo para una historia de calle, de narcotraficantes y delincuencia, en la que el personaje principal, que comparte el apodo de la droga que comercializa, ve una salida a la vida en el barrio cuando conoce a un joven ejecutivo de Wall Street con el que empieza a montar negocios. Poco a poco, Empire comprende lo duro que resulta salir del mundo criminal en el que vive inmerso.
Quizás no nos encontremos ante una película excesivamente original o arriesgada, ya que la historia que trata ya ha sido llevada de manera parecida al cine en muchas ocasiones, pero el filme cuenta con una serie de detalles que pueden hacer que el espectador se mantenga entretenido durante la hora y media de su metraje. Por ejemplo, el manido pero efectivo uso de la voz en off hace que veamos reminiscencias a clásicos recientes del género de gangsters como Uno de los nuestros o Casino, por ejemplo. También son destacables las interpretaciones de sus actores, en especial la de su protagonista y productor John Leguizamo (Moulin Rouge, La tierra de los muertos vivientes) o la excelente aportación de la veterana Isabella Rosellini. Además, los personajes y los ambientes en los que se mueven están muy bien retratados y el argumento (la necesidad de huir del infierno de las calles en busca de un futuro mejor) recuerda a otra gran película, Carlito´s Way. Atrapado por su pasado. Es importante destacar también la presencia de Denise Richards, debido a la enorme cantidad de fans con los que cuenta dicha actriz, y la gran labor de traducción y doblaje que se ha llevado a cabo con la versión española de la cinta.
A la hora de hablar de las carencias del filme nos viene a la mente su ya comentada falta de originalidad, lo que hace que nos esté recordando constantemente a otras películas a las que, ni por asomo, se asemeja en calidad. La historia es pobre y esquemática y la rápida ascensión del protagonista no está bien narrada. El argumento es excesivamente lineal y se desarrolla de manera bastante previsible, excepto un par de giros de última hora que mejoran notablemente el resultado final.
A pesar de todo, este trabajo cuenta con una fantástica banda sonora a cargo del famoso cantante y compositor panameño Rubén Blades que contribuye a acentuar, aún más si cabe, el inconfundible sabor latino que empapa toda la cinta, ya que tanto el actor principal como muchos de sus compañeros son hispanos. También es destacable el homenaje que se hace a Grandmaster Flash en la película, dado que el protagonista vincula a este artista con su infancia y adolescencia cuando cuenta la historia de su vida; además también aparece en la banda sonora. Otro dato de interés es la inclusión en el reparto del conocido mc del Bronx (lugar en el que se desarrolla buena parte de la trama) Fat Joe, que realiza un anecdótico papel de narcotraficante.
Padrinoh
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