Michael Cimino, su director, no ha logrado construir esa atmósfera básica tan necesaria para el cine de entretenimiento. Mickey Rourke es un actor de limitados recursos, que prácticamente en la totalidad de sus trabajos muestra un mismo tono, sin complejidad interpretativa: Media sonrisa ampliada a un gesto de sobrada complacencia, y repetir lo que el guión dice, sin aportar más allá de su presencia.

Situaciones forzadas dentro de un argumento confuso, que no colabora a que disfrutemos de lo que se nos ofrece. Tal vez la raíz se encuentre en un montaje caótico, donde algunas de las tramas secundarias, no aportan mucho, funcionando solo como lastre dentro del conjunto global.

Russell Crowe gordo y desaliñado, ofrece una actuación que no parece estar a la altura de su talento. Se limita a mostrar un aspecto enfadado de periodista al que su entorno le hastía; y lo peor es que, eso mismo contagia al espectador.

La historia se ofrece con cierta artificialidad, así de pensar y seguirla atentamente para ver a donde nos conduce. En algunos tramos resulta tan aburrida que se te cierran los ojos.

Según mi criterio está sobrevalorada, la trama intenta parecer mas profunda de lo que resulta, convirtiéndose en un considerable peñazo. incluso Ben Affleck, no parece muy feliz de interpretar al tal Collins ¿Tal vez el problema sea su director? No tengo respuesta. Helen Mirren, brillante.

Una reunión de antiguos alumnos, un personaje famoso, el feo, el tonto, el malo y otro más absurdo viendo el típico tópico que intenta desmarcarse de productos similares, pero a duras penas lo consigue.
Adolece de cierta calma, imprescindible para que cuando surge la comedia desmadrada, podamos aceptarla sin sentirnos estafados por un producto mil veces visto. Ni me he reído, ni me ha sorprendido. No la valoraré con una nota muy baja porque aunque el intento ha resultado fallido, reconoceremos el esfuerzo.

Un 4

Theo James está bastante bueno, y eso aporta un plus. El resto, pues... Ausencia de diálogos y muchos de los que nos ofrecen, carentes de interés. Buena fotografía, efectos muy machacados pero a la vez adecuados a la trama.

Tal vez la baja nota de la página viene determinada por el ritmo y que la historia se nos entrega inconclusa, con un final abierto sin demasiada lógica, dependiendo de quien lo interprete.

Proyecto fallido, al que le resulta muy difícil sostener el interés del espectador. Giros absurdos y reiterativos que llegan incluso a parodiarse. Flashbacks que ya no cuelan.

El cine de acción atraviesa un momento de dulce agotamiento, y parece desconocer la fórmula que le lleve a explorar territorios inexplorados (Si es que todavía existen)