Drama de segunda división vendido como trhiller terrorífico que en realidad se demuestra como el típico y soporífero telefilme de sábado por la tarde aderezado con un guión plano (unidimensional) y una dirección sin sorpresas (carente de toda ambición narrativa). Solo el hecho de llenarlo de estrellas puede despistar al espectador que cree que está ante algo que no es lo que le han vendido en ningún sentido, no es una película de terror, tampoco es una película de primer orden. Es simplemente un drama menor que avanza con el piloto automático y no tiene mayor interés que ver a la oscarizada Jennifer Lawrence haciendo lo que mejor se le da: poner cara de “¿Qué diablos hago yo aquí?”. Totalmente prescindible incluso si no tenemos nada mejor que hacer. Dedicar nuestro tiempo a limpiar la nevera puede ser más entretenido (y mucho más provechoso) que perder una hora y media con “La casa al final de la calle”.

Película de terror que comienza bastante bien (buenos actores, ritmo y una localización adecuada) pero que no sabe como resolver adecuadamente la historia para conseguir que el espectador sienta cierta inquietud o terror. La atmósfera está bien creada (comisaría solitaria a modo "Asalto al distrito numero 13") y hay algunos sustos que funcionan en su primera mitad pero pronto cae en una especie de copia barata de videojuegos estilo "Silent Hill" que acaba ofreciendo mucho menos de lo que el espectador espera. El problema es que el comienzo es prometedor pero el desarrollo no está a la altura y el final es bastante decepcionante. El personaje principal (la agente de policía) está bien desarrollado e interpretado pero es insuficiente para aguantar una película donde pasan menos cosas de las que uno espera (con los consiguientes menos sustos). Es decir, es una película de terror bienintencionada que se queda a medias y que puede que os llevéis algunos sustos aislados pero insuficientes para que el espectador quedé satisfecho.

Hay películas de serie B, películas amateur, experimentos, etc y al final de toda esta lista está esta inclasificable que sabe lo que quiere pero no tiene los medios para conseguirlo. Todo, desde los actores a los escenarios, etc es puro amateurismo e incluso pobreza. Y curiosamente es este empobrecimiento el que le da cierto valor a la película. Los actores son malos pero al final uno no puede por menos que sentir cierta empatía con esos dos tipos que se limitan a soltar diálogos (¿improvisados?) como si creyesen que están en una película de Kevin Smith. La historia es pura simpleza y ni tan solo la aparición al final de Antonio Resines y ese (correcto) giro de guión pueden salvar a "Investigación policial" de la quema. De acuerdo, es un ejercicio inedito en el cine que acaba teniendo valor por el escaso valor que tiene, pero como película no se la recomendaría ni a mi peor enemigo.

Como sucede en este género de la animación con plastilina (o con muñecos), llegar a la hora y media de película manteniendo la atención del espectador es difícil, lo visual comienza siendo una ventaja pero acaba siendo un inconveniente pues, a diferencia de la animación digital o clásica, en la animación con plastilina existe una cierta repetición de expresiones, movimientos, etc. Para evitar que el espectador comience a bostezar, se añaden pasajes prescindibles y personajes que no acaban de estar bien definidos, solo para captar la atención del espectador que sabe que no es un niño, ni es una película para niños a pesar de la técnica que utiliza. Porque hay que reconocer que "Hell & Back" es cualquier cosa menos una película para niños. Los chistes verdes adquieren aquí un verde intenso, utilizando la provocación como contrapeso para ir llamando la atención del espectador. Pero algo no acaba de funcionar, la película es entretenida y es original pero no lo es lo suficiente y al final acabamos cansados de tanto muñeco y tanto chiste verde.

Ya sé que puede parecer un despropósito decir que te ha gustado esta película repleta de fallos. Pero es que a mí, “Autómata” me ha gustado. Tanto como concepto como en su realización. De acuerdo, reconozco que tiene cientos de fallos, desde una insuflas de gran cine a lo Kubrick pasando por graves errores de diseño e incluso en la narrativa. Y a pesar de todos sus fallos, esta historia de robots está rodada de una manera que, para mí, despierta un desconocido interés. Las escenas del desierto son todas magnificas, en cambio las de las ciudades son funcionales, pero tienen cierto encanto pulp. Todo en “Autómata” parece salido de otras películas pero si consigues conectar con el (simple) propósito new age que supone, puede resultar una agradable sorpresa. No te removerá por dentro ni tan siquiera te emocionará, pero es interesante. ¿Por qué? Ni idea. No es una película entretenida pues alarga en exceso su tramo final, tampoco es un gran guión, las interpretaciones son correctas y muchos efectos especiales huelen a prefabricados.

Resulta curiosa como una película que trata sobre los sentimientos sea tan desapasionada. Y a pesar de eso, sigues viéndola a ver si al final guarda alguna sorpresa. Pero no, en realidad es una historia bajo mínimos sin grandes sorpresas ni grandes emociones. Pero da igual, porque te das cuenta que lo que has visto, también te ha entretenido. Y eso si que es un auténtico misterio.