No hay duda de que encierran a activistas en un garaje con mucho intimismo y saca planos urbanos de altura para resaltar el sufrimiento de la lucha por los derechos, relata bien a los que tienen y a los que no, el poder de la plata y otros detalles, pero reducidos a personajes sin peso, están atrapados, luchar es la solución, pero no llega al verdadero compromiso del quién es quién porque no hay humanos en la pantalla.

Cargas y más cargas, ni una palabra, sin vitalidad ante el dolor, lavan las ideas a personajes sin nombre, los mete en quirófanos de tortura pero queda más en una oscura exhibición que en un producto de calidad cinéfila, llegar hasta el final ya la hace especial, pero en su conducción cae por emplear el truco del que la cuida del otro bando, fué la única conexión que encontraron?

Yo destaco el capítulo del chantaje a la madre, luego se entiende que genere la duda de la vacuna y al penal... a qué penal? porque la silenciosa resolución lo contesta todo, casi resuelve un desastrozo trabajo con lo que tenían en manos, el intento de amor es reprochable salvo por la necesidad, la desesperación cae en el vacío porque no traslada al escenario, algún plano de terror y alguna sensación de que queda bien conectada.

Mediocres actuaciones entre vendas y partidas de ping-pong, trata de decir y muchas veces no dice nada, sí, habla de la libertad, pero empleando el amor, por cierto, qué manera de meterse en un lio por irse de paseo, maltrata a sus personajes sin haberles dado vida, un gran proyecto desolador sin estímulos.

Otra película sobre el fútbol americano y otro fracaso, en esta ocasión ha estado más cerca, la historia del chaval es para contar, el racismo de la época lo podría resaltar todo, pero finalmente queda en algunas jugadas bien grabadas, poco más.
Un repaso por la vida de un chico de color que corría hacia algo, sus habilidades y sus limitaciones, su crecimiento como deportista y como persona, su premio y su castigo en forma de... da igual, los personajes están realmente vacíos no por malas actuaciones, sino simplemente porque toda la cinta es plana, no se sale de los cánones de estas americanadas que no dan para más... sólo en el boxeo saben hacer películas del deporte, en estas que van sobre equipos sigo sin ver la vida en el vestuario salvo algún detalle, y es que sólo en las duchas se puede ya escribir una historia, sea el equipo que sea y del deporte que sea.
Aunque llega la victoria y la derrota, apenas se huele, da la casualidad que la anterior cinta que ví fué "The hustler" y P. Newman con una sonrisa o una mirada ya transmitía lo que es un triunfo en un deporte y un perdedor en la vida..., aquí todo es superficial, las galopadas de este chaval acabarán en el mediodía de telecinco.

Despertar en el mundo del lamento, el umbral, después de la muerte hay otras fases de la vida, "Nosso Lar" se balancea entre mundos y emociones verdaderas para dejar un mensaje sobre que en la vida terrenal hay solución, está en el interior, en el arrepentimiento, la idea seduce, aunque no apasiona, aunque no terminen de creerse ni ellos mismos su propia creación, una luz de bienvenido a Nuestro Hogar, es cuestión de dejarse encantar, de creer y de hacer creer, de ser espiritual y rechazar todos los excesoso del humano moderno.

La sociedad de hoy practica el suicidio inconsciente, puede que sea filosofía barata, pero es comprensible y anda bien explicada, recomenzar y otros términos, hacer el bien, muchos pasajes hablan de una secta, otros tienen avisos a los terrestres, otros a los eternos, una recopilación de miedos, sentimientos y pensamientos, al final es eso solo, pero se le da cierto sentido hasta tal punto que dan ganas de dormir para encontrarnos.

No es menos cierto que sea muy ligera, habla de errores del pasado, del mal interior o la desesperación y de respuestas en el interior, pero nunca da miedo sobre que sea psicológicamente imponente o potente, es una evaluación, un trabajo que mide las llagas de la humanidad, no las heridas, por más que abro mi mente no se congela mi respiración, por lo menos habla de la paz y no de Dios, es el cielo, pero no el de la iglesia.

Un relato de mentes débiles pero que hace sentir tocar el piano, contiene un gobierno que da ejemplo y habla de la familia, sabe jugar con los seres perdidos, ilusiona, han tenido valor para describirlo, es curiosa y se adapta a cada espectador, pero es repetitiva, recurre a otros personajes para comparar actitudes, hay pasajes realmente sensibles pero otros sensibleros, el mundo necesita historias felices pero yo no, la vida terrenal es una etapa para acumular experiencias pero en el cielo te hacen trabajar para conseguir méritos, en definitiva, un moralismo que puedo tolerar pero del que no comparto si disciplina y devoción.

Luego dan en el clavo con la guerra vista desde el cielo, alarga la historia y sólo llegan judíos pero añade originalidad a la que ya tenía de por sí, no es fácil tomar como eje principal hechos como el reencuentro o la reencarnación, es sencilla, pero expresa algo para mí único en el cine, la vida tras la vida.

Si echas de menos el cine de Lynch, puede que te conformes con ver esta película porque llega a conseguir meter miedo sobre los desequilibrios de los humanos, es de esas que tienen estímulos centrales y que introducen al espectador en la confusión y el delirio al tiempo que lo hace su personaje, no es que sea cine independiente que rompa moldes, incluso se pierde en buena parte de la cinta al verse obligada al paralelismo de la obra de teatro, pero sí se puede afirmar que es uno de esos viajes por la mente de un asesino a medida que pierde el control, con libertad para valorar sus causas y sus obsesiones.

Un matrimonio feliz, de esos repelentes, gente importante que da conferencias en París comienza a verse involucrado en casualidades cada vez más extrañas, una intriga que se hace mucho más amena por lo variado de sus ambientes, una odisea obligada para el protagonista ante las limitaciones del sistema, decisiones cada vez más complicadas para resolver un secuestro sin mucho dramatismo, donde algunos giros son casuales aunque en general se va desenvolviendo con calidad, se puede tomar en serio porque está enlazada, pero el personaje femenino se lleva todos los fallos, lo ilógico, tampoco hay buenas espectativas ante la actitud poco creíble de la policía y un Harrison Ford exagerado en muchas situaciones.