[REC] juega en la División de Honor del cine de terror: consigue incomodar, mantener la tensión, asustarte e implicarte como pocas películas lo han conseguido en la historia. Habrá quien la acuse de utilizar el estilo "documental" para facilitar las cosas, habrá quien considere que algunas actuaciones no son precisamente perfectas, habrá quien lo considere meramente un plagio de "El Proyecto de la Bruja de Blair". No digo que no se le puedan hacer esas acusaciones, o la de un final forzado hasta cierto punto (que para mí lo que hace es aumentar el interés, tendiendo un curioso puente entre subgéneros terroríficos), pero de lo que no tengo duda es de que es una de las películas de terror más efectivas que he visto en mi vida. Por eso le pongo un 10.

Tras la cámara, Guy Hamilton, en la que probablemente sea la mejor película de James Bond. Y probablemente la más divertida también.

Si alguien está convencido de que realmente este es un fin político o de denuncia, es mejor que vaya bajando sus expectativas. Porque lo que aquí tenemos realmente es una buena película de acción, buena, sin más, en la que ciertamente se ponen sobre la mesa una serie de injusticias, pero que se queda a medio camino en esa denuncia.

Las actuaciones de los protagonistas son más que aceptables. Tanto Djimon Honsou como Jennifer Connelly están más que convincentes en su papel. Lo de DiCaprio es caso aparte: a veces lo ves (y lo oyes, que aquí hay un trabajo de acento muy destacable) y parece que estás ante el nuevo Marlon Brando, que se podría resucitar a Vito Corleone sin recurrir a DeNiro de nuevo, que es un genio. Pero en otros momentos da la sensación de que se pasa un poco, de que no le iba a ir mal un poco de contención... En fin, cuestión de gustos.

Las escenas de acción son excelentes, realistas y hasta cierto punto apabullantes. Sobran persecuciones y caminatas, aligerar el metraje hubiera mejorado el conjunto. De todas maneras algunos elementos del guión me parecen poco convincentes. Y desde luego, el final es bastante flojo.

Si hay una parte, o mejor dicho, subtrama, de la película que me resulta interesante, es la de los niños soldado. Me hubiera gustado ver más, quizás un film dedicado exclusivamente a ese aspecto. Consigue conmover e impactar. Eso sí, yo creo que hay cierta deuda estilística a Ciudad de Dios... También tiene bastante presente Apocalypse Now, por cierto.

Poco más puedo decir, aunque hay un aspecto que me gustaría comentar sobre el "mensaje" principal de la película. Desde luego que comprar diamantes que se utilizan para financiar guerras y matanzas es una barbaridad. Pero tampoco creo que los pobres mineros que se dedican a extraer los diamantes "limpios" vivan y trabajen en unas condiciones muy buenas, sobre todo considerando la cantidad de riqueza que se genera en el negocio. Así que, siendo justos, lo mejor que podríamos hacer sería no comprar ni de unos ni de los otros. Claro, que dada mi situación financiera, no tengo ni siquiera las oportunidad de plantearme el dilema...

Le voy a dar un 6. Y ya sabéis que suelo puntuar muy alto, pero no da para más... Es bastante entretenida y espectacular, con actuaciones excelentes, pero el guión es mejorable, el film ganaría puntos si se destacase el elemento denuncia y le sobra metraje.

Empieza con cuatro capítulos entre bien y sosillos, con actores muy desaprovechados casi siempre, salvo Antonio de la Torre y Enric Auquer, casi todos esforzándose en poner un acento que no es el suyo y con solamente alguna escena buena en un conjunto más bien plano.
Pero entonces llegan dos capítulos finales que parecen de otra serie, con muy pocas escenas flojas, con mejores interpretaciones y un guión, realización y montaje mucho más notables. La historia del Guardia Civil roza la perfección, entiendes el porqué del personaje de Anna Castillo, las últimas escenas de Alex Monner lo redimen de lo que hace en gran parte de la serie, que tampoco creo que sea exactamente culpa suya.
En conjunto, recomendable, pero con dos tercios meramente pasables que a ratos rozan lo fallido. Y mejor no compararla con Patria, por supuesto.

La Princesa Mononoke (Mononoke Hime) es, para mí, una obra maestra absoluta, la mejor película de animación de la historia y una de las mejores películas de fantasía de todos los tiempos. Es una película épica y violenta, entre Nausicaa de Miyazaki y el cine de Samuráis de Kurosawa, con un mensaje de reconciliación entre el ser humano y la naturaleza, con unos personajes geniales, muy bien definidos y sin maniqueísmos. La ambición se castiga, pero puedes entender a la antagonista principal, Lady Eboshi, porque se equivoca pero solo quiere lo mejor para los suyos; San, la Princesa de las Bestias, odia al ser humano pero tiene motivos; en medio Ashitaka, un príncipe exiliado que intenta parar el círculo de muerte y violencia entre humanos y humanos y bestias, mientras se muere de una infección que a la vez le otorga poderes. Es, posiblemente el mejor personaje masculino no cómico de toda la obra de Miyazaki. Con elementos que recuerdan a El Señor de los Anillos, un mensaje de esperanza y la animación 2D más perfecta jamás vista (el sol entre las hojas de los árboles sobre los personajes, las gotas de lluvia mojando poco a poco las rocas, las escenas de acción), Mononoke Hime es una de las experiencias cinematográficas más satisfactorias que se puede tener.