Un puto éxito, realmente. Son una de esas películas malas en donde confiesas sin vergüenza y remordimiento alguno que te ha encantado. Alexandre Aja supo darle un toque moderno a este remake de la película de culto de los años 70 y no lo hizo para nada mal, combinando las míticas pirañas asesinas, la sangre y las innumerables escenas gore con tetas, alcohol y diversión, a lo Spring Breakers (2012). El elenco sorprendió con las apariciones de Christopher Lloyd, Eli Roth y de estrellas pornos como Riley Steele, Ashlynn Brooke y Gianna Michaels. Me atrevería a decir que es casi una obra maestra, claro, sin contar el final tan convencional.

Pintaba bien al comienzo, los primeros minutos fueron oscuros y con harto suspenso. Sé que es un sacrilegio compararla con tremenda película de culto, pero la idea es muy similar. Gareth Evans plagia sin vergüenza alguna la idea de The Wicker Man, mostrándonos un pedazo de tierra, alejado de la civilización, donde se ofrece culto a un dios pagano proveniente de la naturaleza; lastimosamente el director y guionista no pudo sostener ese ritmo y al transcurrir del tiempo fue en caída libre. Ni si quiera las escenas de batallas y harta sangre lograron ser tan espectaculares para ser un grato recuerdo para el espectador, ni si quiera esos personajes extraños y que no aportaron nada a la trama, muy parecidos a los ku klux klan. No lograron ahondar ni en el dolor de la chica secuestrada ni en la historia del rey en contra de esa secta. Todo fue a medias. Si me dijera una sola palabra para describirla, rápidamente diría "Mediocre".

Probablemente si nunca has visto Zoolander esta secuela te parecerá lo más extravagante y sin sentido que habrás visto en tu nefasta vida; sin embargo, para todos aquellos que sí hemos gozado de las locuras de Derek y Hansell, esta segunda entrega luego de años es un regalo caído del cielo. Y lo mejor es que no vienen solos, si no junto a ellos se une posiblemente la española más atractiva de toda la historia de aquel país europeo, sí, amigos cinéfilos, cultos lectores, seres humanos en general, me refiero a Penelope Cruz y su peculiar inglés.

Sorprende desde el inicio de su visionado, con aquel inesperado asesinato de una de las estrellas juveniles del momento y su peculiar modo de decir adiós. Realmente Ben Stiller supo darle un aire fresco y moderno a esta película de culto, siguiendo mofándose del frívolo mundo de la moda, ademas de las nuevas tendencias tecnológicas, hipsters y demás mierdas que hacen del ser humano involucionar a pasos agigantados. No puedo decir más, detallar escena por escena, chiste por chiste, gesto por gesto, sería hacer spoiler barato e innecesario y esa no es la idea. Solo puedo decir que su existencia me hizo volver a tener esperanzas en el cine, en que todavía en estos últimos tiempos aun se siguen haciendo cosas tan aputamadradas como esta.

Aunque el guion adaptado de la novela de Walter Tevis resulta interesante, el mal desarrollo de la película hace que rápidamente se torne aburrido, al fin de su visionado -si es que el espectador logra terminar de verla- es muy probable que sea olvidada y si es recordada será como una de las peores experiencias cinéfilas que hayan podido existir.

Nunca vimos cómo el protagonista alienigena se hace un nombre en la sociedad y se vuelve rico, nunca vimos ese desarrollo del personaje, parece que para el director ese aspecto careció de importancia y solo nos regaló algunas escenas rápidas supuestamente claves en donde vende unas láminas, contrata un abogado y lo hace gerente y se dedica a vivir en la clandestinidad. Lo único que le importaba al director era mostrarnos muchas escenas de sexo gratuitas que en un punto de la película el espectador se preguntaba si estaba viendo una película de ciencia ficción o una pornográfica. También al parecer se importó en regalarnos muchas locaciones del Estados Unidos rural.

¡Dios mio! Se hubiera importado en darnos un alienigena más convincente, parecía que el vestuario era de esos que se alquilan en Halloween, sé que es una película de los años 70, pero hasta Barbarella que es más antiguo tiene una vestimenta y unos personajes alienigenas más "reales". Por otra parte, el final es tan malo, como el resto de su película, a medias, lento, una mierda pretenciosa, lo siento David Bowie, pero esta cagada es pretenciosa a más no poder y las escenas "psicodelicas" para el olvido.

Magistral estupidez. La película no tiene forma ni fondo, no puedo criticar a los directores ni mucho menos a los actores por qué cuando existe un guion tan pedorro como el de Soltera Codiciada, en verdad es imposible salvarla de ser un fiasco. Por cierto, parece que Joanna no ha visto ninguna película de su padre, el gran Pancho Lombardi... pero bueno, son cosas que suceden, ¿si pasó con los Coppola por qué no le puede pasar a los Lombardi? Seguro me estarán insultando por comparar a Sofia con Joanna, pero creo que Joanna nunca hará una película tan compleja como Lost in Translation, ni volviendo a nacer.

Posiblemente sea una película exclusiva para veinteañeras, posiblemente no me haya gustado porque comparto la idea del amor así como el personaje (mejor amiga de la protagonista) de Karina Jordán, pero comparada a las comedias gringas no es nada, no te transmite nada en lo absoluto, ni si quiera a alguien que vive en el mismo país, como yo. Posiblemente haya sido un éxito para un blog pero es ridículo realmente plasmarla en el séptimo arte. Luego de verla me he quedado vacío, ya no siento nada, sí, como la protagonista de Nymphomaniac Volume I, creo que el cine ha muerto...