Sin perdón se aleja de todo cliché relativo al género western y se cierne como una película original y conmovedora que nos habla sobre los demonios que carga todo ser humano de una manera efectiva e intensa.
El desempeño de los actores involucrados es magnífico; Clint cómo siempre brillante, Freeman, conmovedor y de Gene Hackman ni se hable, es uno de los villanos que más desprecio me han causado, lo cual, por ende, le hace admirable.
La historia es muy buena, y no hay verdadermante ningún efectismo o defecto que manche la calidad de la cinta. Todo es muy apropiado. Sin perdón es una cinta que ningún cinéfilo (incluso ajeno al género western) se debe perder.

Harry el sucio podrá tener un historia simple, y quizá una que otra incoherencia también, pero nadie puede negar que es un filme que captura los nervios del espectador y lo mantiene tenso, e incluso cómplice de las hazañas del inolvidable inspector Callahan.
Las actuaciones tanto del protagonista como del antagonista son excelentes; uno verdaderamente llega a sentir rabia por el enfermizo psicópata y empatía por el enigmático Harry.
La dirección es buena, aunque pienso que pudo haber sido mejor. Y por lo demás, el filme está bien; no califica para ser una obra cinematográfica pero si es un buen producto para pasar un buen rato al estilo policiaco.

Debo decir que este filme requiere una pronunciada ovación después de ser visto, no es sólo bueno... es tremendamente brillante; astuto, inteligente, entretenido, etc., etc.
Las actuaciones son estupendas, cada actor convence y denota carisma, en especial Kevin Spacey, cuyo desempeño va más allá de ser convincente, resulta soberbio. Y la historia, vaya, la historia, creo que nunca antes una película me había puesto a pensar tanto, consta de una trama impecablemente elaborada con giros verdaderamente inesperados que sorprenden al espectador cada 5 minutos.
Pero bueno, creo que la crítica por más bien que hable no le hará justicia a la cinta, así que mejor veála usted con sus propios ojos y espere un final como ningún otro; uno verdaderamente estupendo que le hará experimentar realmente el clímax... de la película pues.

El hombre de la máscara de hierro es una película que a pesar de ser demasiado predecible es bastante entretenida durante casi cada minuto de su duración.
Los actores estelares son estupendos; Depardieu causa verdaderas carcajadas, mientras que sus colegas se muestran también soberbios y no dejan para nada a Dicaprio atrás; el joven maneja el asunto de la dualidad a la perfección y realmente nos hace creer que estamos observando a dos hermanos con actitudes y personalidades opuestas.
Pero ahora, si bien el reparto principal está muy bien, el secundario no lo está para nada (tan sólo analícense las pésimas actuaciones de las dos actrices involucradas) y cabe considerar tambien que la historia cae en situaciones demasiado típicas del género y esto le resta demasiada originalidad.
Así que, podrá ser este un filme que divierte de principio a fin, pero no cumple con las características que le pudieron haber hecho algo mucho mejor.

Una historia del Bronx no es sólo un filme de mafia; es un filme que habla también del crecimiento y madurez de un hombre y la estúpida idea que tiene el varón blanco respecto a la raza negra. Es un producto que pretende con modestia y alcanza un gran resultado.
Las actuaciones de parte de De Niro y Palminteri son brillantes; les vienen como anillo al dedo, el único que se ve opaco y parece no dar la talla de su personaje es el protagonista durante su adolescencia.
El filme en conjunto dista mucho del enfoque que se le ha dado a otra películas relativas al bajo mundo, lo cual lo hace distinto, único.