Vaya peñazo mayúsculo de película.
Dos horas para algo que se podía contar en 45 minutos. El resto es relleno en el que se ve a Hoffman fumando.

Todo transcurre con una lentitud que encrespa.
Los personajes no te llenan en ningún momento. No transmiten nada. Al menos el público masculino se puede deleitar con la abogada (la guapa de turno). No enseña nada de carne en ningún momento, pero es que es lo único digno de ver.

Por decir algo bueno, diré que de la forma tan simplona y cutre que transcurre todo, uno puede pensar que realmente es así en la vida real. En el spoiler diré otra más. Será que estoy generoso.

Corotometraje completamente populista y simple sobre lo malos que son unos seres humanos con otros, que hasta los degradan por debajo del cerdo.

El pulgar oponible lo tendremos todos; pero la inteligencia de no tener camadas de hijos que no se pueden mantener, parece que no.

Me gustan las seis novelas de Forsyth que he leido. La que da título ha esta película no ha sido una de ellas, pero lo dicho, en vista de lo leido, quizá esperaba demasiado.

Para mí Pierce Brosnan en plan agente secreto guaperas en una película que pretende ser más seria que las de James Bond, pues que como que no me pega.
Lo de Caine cabreado con su superior y puteado por él, eso sí que quedó 100% creible.

Esta película es lenta y aburrida. Las interpretaciones, cutres.
Lo de la música clásica con el recorrido fotográfico por Gijón; la llamada telefónica del rey;
el argumento: un ex-fútbolista se va a vivir a EEUU, a dar clases de literatura... y gana el premio Nobel. Sí, sí, un ex-fútbolista. En fin.

Es obvio que este peñazo no se merece premio alguno, y menos un Oscar.
De hecho, tuvo malas críticas en su estreno.
Entonces, ¿por qué se lo dieron?. Muy sencillo, fue un regalito del gobierno norteamericano por haber entrado España en la OTAN un año antes. Ya se sabe, todo teledirigido, como las puntuaciones en Eurovisión.

Veo que sólo tiene dos críticas, y una es medio favorable. No, eso no.
No puede ser. Hay que poner remedio.

Bandolera es un basura de serie con una increible mierda de interpretaciones, a la par con la puta mierda de ambientación y diálogos. Da una vergüenza ajena que da grima.

El personaje de Pepe no sé como describirlo. Sobresale entre la inmensa bazofia general, que ya es dificil.

Nada más que decir. Ya me he desahogado.
Bueno sí, una última cosa: ¡¡¡joder que vergüenza ajena!!!