Un árbitro vendido, seguramente a punta de pistola, unos jugadores nazis más peligrosos que un luchador de pressing catch enloquecido, y unos jugadores aliados con ganas de ganar al precio que sea, si es que hay partidos en la liga que aburren y este entretiene.
La película de futbol definitiva, para quienes estén hartos de futbol americano o beisbol, con varias estrellas de la época, ya jubiladas claro, y un Silvester Stallone mejor que Casillas.
Gran demostración de Pelé de como se mete un gol.

Considerablente superior a la primera parte asistimo al drama de los prisioneros de una prisión vietnamita.
Pudo ser un poco mejor si hubieran eliminado la pelea de Chuck Norris con el General encargado de la prisión, ya podía haberse contentado con pegarle un tiro.

Aceptable película de acción donde el heroe es ruso en vez de americano, pero claro, acabará luchando contra los suyos, los comunistas para defender al pueblo africano que quieren exterminar.
Correcto Dolph Lundgren.

Nunca la guerra fue tan divertida, los hermanos Marx lo logran utilizando sus armas más poderosas, la locura.
Chico va pasando alegremente de un bando a otro, Groucho dispara a su propio ejercito haciéndole huir, sin fijarse claro, y a Harpo le toca la china y es elegido antidemocráticamente para realizar las misiones más peligrosas. El enemigo está perdido.

Seagal tiene tanta pinta de virólogo como un telettubie de intelectual, quizás si fuera algo menos duro o no se dedicara a acabar con los malos el solo...
Recuerda a películas como estallido, y reconozco que es de lo mejor que vi de Seagal, eso si, los malos están mucho mejor que él.