Camelot (Serie de TV)

La belleza paisajística, más que notable, no sirve para disimular una actuación endeble en ocasiones (como si tuviesen miedo de que les enfoque la cámara), pero sobre todo, y en contraste, una innecesaria sobreactuación.
En concreto, las caritas con las que Merlin intenta transmitirnos sus profundos pensamientos y emociones, no de más que risa, incluso una incómoda vergüenza ajena.
El erotismo, algo en boga últimamente en las series, está en esta ocasión terriblemente administrado: ahora tocan 47" de carne, y así, sin ton ni son, te los plantan.
Una pena que una trama con tanto fuste como la historia de Camelot se haya desperdiciado con esta insulsa serie.

Serie de televisión que intentó en su momento aprovechar el éxito de series como "Merlín" de Colin Morgan, para promocionar una de temática similar, pero más en adultos.
Sinceramente a mí "Camelot" no es que me hiciera saltar de la silla ni me parezca una serie inolvidable, pero tenía su encanto. Lo que más me llamó la atención es ver a Arturo con Morgana, Eva Green de hermana como es recurrente, y con la otra Morgana de las "Nieblas de Avalón", Tamsin Egerton (hacía de Morgana de niña), que aquí hace de Ginebra. Es una pena que no vayan a hacer más temporadas, porque la serie es incompleta. Su razón de existir es todo lo que tiene. Jamie Campbell no me gusta como Arturo, y Fiennes me encanta como un Merlin distinto. Los efectos son pobres, y las actuaciones algunas veces de pacotilla, pero otras se crecen. Podría haber estado mejor y peor.

Sí, es la respuesta si me preguntan si vale la pena ver ésta serie.
Reconozco que no está al nivel de la recién salida del horno "Juego de Tronos" de la HBO,
pero "Camelot" tiene algo que no tiena la otra, y ese algo tiene nombre: Eva Green.

Si no fuera por Morgana, la serie no tendría garra, no hay otro personaje en el serial que tenga la fuerza de la malvada maga, y es que la Green no está nada verde, creo que se lo debe pasar pipa haciendo el papel de mala malísima.
Los demás actores cumplen su tarea pero sin destacar, Joseph Fiennes como Merlin a mi parecer está limitadísimo, aunque és buena idea la de revitalizar la imagen mago, pasando del clásico con barba y sombrero, a un mago calvo sin barba y no tan bueno como de costumbre.
Después está el joven Rey Arturo, que más que un rey parece un surfero que se ha perdido en el tiempo;
de momento ninguno de los caballeros tiene una relevancia interpretativa especial, y Ginebra, es como un diente de león a punto de ser desmenuzado por el viento,
con eso quiero decir que su interpretación es volátil y descafeïnada, su belleza brilla mucho y su talento expresivo no se percibe.

Lo mejor de la serie, sin contar Morgana, sin duda és la explicación a la fantasía o misticismo de la leyenda artúrica, basando los pasajes fantásticos (como la dama del lago y la espada Excalibur) como tapaderas de mentiras y crímenes.
También la escenografía y el attrezzo son dignos de mención, no desentonan en ningún momento y tampoco exageran;
sin duda la fotografía está muy cuidada, aunque no voy a hacer comparaciones con la otra serie ya citada, cabe destacar que los chicos de la Starz han hecho lo posible para traernos un artificio con factura de calidad.

Lo peor de la serie, en mi opinión és el ritmo de los sucesos, ni demasiado lento ni demasiado rápido, pero todo a la vez.
La cadencia de los planos aveces puede resultar confusa, y diferir mucho entre una secuencia y otra, construyendo así un espacio incómodo entre el espectador y la obra.

En fin, para ser una revisión del ancestral clásico, cumple la función con creces. Vale la pena.
¡Eva Green sobre todo!


Saludos

La cadena Starz lo bordó con las dos series de "Spartacus", pero aquí se han pegado un buen batacazo con la cancelación de esta serie. Prácticamente desde el episodio piloto se notan algunas deficiencias importantes. Una serie con personajes tan sugerentes como Merlin, El rey Arturo, Ginebra o Morgana tendría que resultar un producto cuanto menos interesante de ver. Y la verdad es que tras terminar de ver la serie por completo sólo os puedo decir que entretiene y poco más (vamos que no me ha entusiasmado ni tampoco me ha echado para atrás). “Camelot” es una mezcla de conspiraciones por el trono, violencia, romances, sexo y algo de magia sobrenatural.

El apartado técnico es de buena factura, lo cual se agradece, así que al menos podemos contar con una ambientación de la época lograda, un vestuario más que decente y una buena fotografía con unas bellas localizaciones donde destacan unos paisajes con una vegetación de un verde exuberante.

A nivel interpretativo da una de cal y otra de arena (hay actores que salvan los muebles, pero otros dejan bastante que desear). Por nombrar algunos pues diré que Eva Green como Morgana y James Purefoy como el rey Lot me han convencido en sus papeles. Por el contrario, Jamie Campbell Bower lo veo totalmente desubicado y falto de carisma encarnando al rey Arturo. Y el peor de todos sin duda sería Joseph Fiennes... ¡puf! madre de mi vida, ¡qué manera más lamentable de sobreactuar!

Otra cosa que me ha chocado bastante son las escenas de sexo sin venir a cuento. De acuerdo que en las series actuales está de moda enseñar carne y mostrar escenas de sexo más o menos explícito. Vale, de acuerdo, pero es que aquí en numerosas ocasiones te lo meten sin orden ni concierto. No obstante, tengo que admitir que quitando algún pasaje aislado de la serie como por ejemplo cuando Merlin sacaba de paseo sus poderes, lo cierto es que a la hora de la verdad lo mejor de la serie son los desnudos de las bellas féminas del reparto (Tamsin Egerton, Eva Green y Claire Forlani).

Y poco más voy a añadir. Como hoy no me siento con ganas de ser exigente pues le voy a dar un aprobado raspado a la serie, aunque eso sí, raspado de verdad, vaya.