Decepción por las expectativas que me había creado tras leer muchas críticas positivas de esta película antes de verla.
Creí que podría ser la que cogiera el testigo de los hermanos Wachowski después de 7 años tras el final de Matrix, pero tras haberla visto, me ha quedado claro que no va a ser precisamente esta película.
Ocurre justo con lo contrario que con Matrix: en Inception te dan muchas explicaciones para realmente poco contenido, sin embargo en la trilogía te dan pocas explicaciones para la cantidad ingente de contenido.
Esta Inception se ve casi con las neuronas al 30 % después de comer y medio amodorrado por la siesta, al contrario que Matrix que te exigía lo máximo y aún así podías sacarle más partido en cada visionado.
Se insiste mucho en las reglas inventadas de los sueños, sólo para justificar lo que se va a ver en la segunda mitad de la película, y determinadas expectativas que se crean en los primeros 30 minutos, se van diluyendo conforme el tiempo transcurre.
Para pasar el rato no está mal, pero tal ha sido la decepción de una oportunidad tan desaprovechada como ésta, que no puedo más que darle un 4 sobre 10. Estos han sido los ingredientes que podrían haber hecho de ella una obra de arte redonda:
1. Christopher Nolan.
2. Guión del mismo director, tras 10 años de trabajo.
3. Leonardo DiCaprio, Michael Caine, ... y el resto del reparto (exceptuando a Marion Cotillard ... ¿no podían haber elegido a otra para ese papel?).
4. Hans Zimmer a cargo de la banda sonora.
5. El guión, sobre el mundo de los sueños, un guión original.
6. Estilo a lo Blade Runner.

Entonces, ¿qué es lo que ha fallado?. Pues bastantes cosas, desde el guión hasta el ritmo, el montaje. Desde mi punto de vista, el resultado es insatisfactorio y fallido.

Veremos cómo queda la también esperada Neuromante para el próximo año, proyecto también de este director bastante regular, que también como sus errores como lo es esta Inception.

Personas que no deberían haber muerto fueron salvajemente asesinadas, y los animales que cometieron esas barbaridades, están vivos y se lo pasan en grande escenificando lo que hicieron. Esto te hace reflexionar: ¿cómo puede ser que ocurra algo así?, ¿cómo puede llegar el ser humano a ser tan monstruoso?, ¿cómo pueden reírse, bailar, disfrutar y ser felices por lo que hicieron?.

Esto y mucho más es esta película documental, que hace que no puedas salir del asombro con cada imagen que proyecta, con cada declaración. Te dan ganas de ir a Indonesia y cargarte a todos esos pedazos de mierda. Hacerles pasar por todo lo que hicieron.

La escena del osito de peluche es terrible, de lo más repugnante, desagradable y terrible que haya podido ver nunca. Sin una gota de sangre, pero tampoco hace falta, porque la imaginación hace el resto.

Le he puesto un 8, porque creo que el mayor mérito del director es haber encontrado a esa basura. Lo demás fue poner la cámara a grabar y dejar que contaran lo que quisieran.

¿Hasta dónde puede llegar la crueldad humana?, ¿por qué hacemos lo que hacemos?, ¿por qué asesinamos al prójimo?, etc. son muchas de las cuestiones que te planteas viendo este documental.

Lo que decía un crítico: hay que verla una vez, para no volver a verla nunca más.