Cuando te propones ver un thriller, esperas algo de suspense, algún susto, tensión, protagonistas con los que empatizar y, por qué no, un asesino “molón”. No hay nada de eso, no en un sentido positivo.

Es un telefilm de antena 3 con buena factura, como casi cualquier serie de Netflix, y, como cualquier producto de Netflix(o casi) tiene los componentes para convertirlo en algo odioso y horrible, componentes que no voy a decir ya que son por todos conocidos.

Entrando un poco en el film, y siendo concisos, la película se ciñe al género, pero para mal, sustos baratos tirando de jump scare, protagonistas lerdos, policía incompetente, intentos de momentos de tensión etc etc...aun con todo, es entretenida, siempre que no tengas otra cosa mejor que hacer y quieras desconectar el cerebro un rato, cumple su cometido.

Pero no os engañéis, no es una película tan mala como decir “quiero verla”, no, es una película que veréis y olvidareis, joder, si la vi hace 3 días y casi ni me acuerdo.

Dejando a un lado la película, que como digo es horrible, sí que hay algo que destacar, pero esto ya es a nivel personal, y es el papel de la madre afligida, el cual realiza la actriz Kelly MacDonald, actriz qué, como muchos de vosotros, descubrí (y me enamoré a mis 15 años) en Trainspotting. Es lo único que salva del film.

Leyendo la sinopsis da a entender que podría ser una copia, homenaje o como lo quieras llamar, de películas como "cluedo" o "un cadáver a los postres" y si, lo intenta, pero se queda en un aburrimiento soporífero, solo quieres que acabe, te da igual quien es el asesino, solo quieres que mueran todos si es posible, hasta el niño, ah, y el director de fotografía ya de paso....