La idea es original, y el guión y la trama se desarrollan bien o muy bien. El único problema que le encuentro es esa típica puesta en escena estridente propia del anime menos serio (lo poquísimo que he visto). Hasta la primera parte se podría despachar con un 7, pero la cosa después de ahí no hace más que bajar.

La parte intermedia como aperitivo es bastante decente, pero ahí ya asoma el payaseo, cosa que odio. Y la tercera parte es un quiero y no puedo donde todo se explica mucho peor y vas más acelerado, donde creo que se desaprovechan ciertas cosas que podrían haber dado más de sí, y donde los personajes no tienen la misma fuerza que los primeros.

De verdad que no doy crédito a lo que pasa con esta serie. Vale que le guste a la gente pero que entres y no leas una crítica negativa con algo de juicio (cuando veo algo y no me gusta uno de mis consuelos es poder venir aquí y encontrar una crítica negativa para no sentirme tan... ¿raro?) y su nota media sea superior a la de los Soprano. Es como si "Snatch" (buena película) estuviese más valorada que "El Padrino".

Vaya por delante que he llegado a coger cierta manía a las series "interminables" donde las temporadas se planean según su audiencia, y donde el chicle se estira o no en función a esto. Series que parece que van improvisando según la marcha y donde el producto no se sábe cómo va a terminar cuando se empieza. Y es por eso por lo que me suelo sentir más a gusto con las miniseries (la mayoría inglesas). La improvisación se nota y la serie termina por resentirse.

Y vaya por delante que la serie (las dos primeras temporadas) la vi hace ya un tiempo por lo que lo que voy a comentar es en base a lo que recuerdo y a un comentario que escribí en un foro en su día.

El mayor problema que le veo a la serie es su inverosimilitud, la cantidad de ases que se saca de la manga y la manera de cerrar tramas y/o subtramas. Por lo que a mí respecta, no se puede crear un climax basado en una situación X (intentaré desarrollar esto en el Spoiler) y desarrollarlo a lo largo de una cantidad de capítulos para cuando tienes que solucionarlo lo haces de la forma más rocambolesca posible. Es como si en una película policíaca estándar hay una persecución, el perseguido llega a un callejón sin salida y cuando lo van a coger se saca una tiza, pinta una puerta en la pared y se va por ella. De Lynch me vale pero de McTiernan no. Eso, irremediablmente, provoca desapego. A la próxima vez que el protagonista se encuentre en un apuro sacará su tiza y listo. Que ahora recuerde sólo me ha gustado la tiza de Haneke.

Está claro que casi todas las series te van a hacer entrar por un aro, pero el aro de Breaking Bad para mí era muy estrecho.

Por otro lado, salvo contadas excepciones, no me parecieron unos personajes con excesiva carisma. Jesse, como personaje, por ejemplo, está lejísimos de Moltisanti, y no entro en los de The Wire, porque allí la galería es infinita.

No hay por dónde cogerla. Pretenciosa al máximo (vaya sentencias que nos mete!). No cuenta nada (aunque la premisa de la que parte sea medianamente interesante) y el hilo argumental no existe. Simple ejercicio de estilo en su máxima expresión. Realización sin personalidad ninguna, abusando de cambios de foco, cámaras lentas y algún que otro movimiento rápido (lo que viene siendo una realización videoclipera, vamos). No la considero ni siquiera película. Es un corto malo de hora y media.

Apoyada en una magnífica fotografía y en una historia simple pero que funciona perfectamente deja un grandísimo sabor, y además alejado de la superproducción, aunque tampoco me creo que sea una película de bajo presupuesto, como alguien comentó en su presentación en el FICCAD.

Por ponerle alguna pega para mí abusa del uso de ocasos, y el jugar con una enorme ventaja, como es el filmar bichos muy fáciles. Aquí en España para filmar a un lince simplemente andando tienes que llevarte 2 meses en un hyde, y en esta salen simples garcetas o somormujos.

Tampoco me terminó que se apoyara tanto en la imagen, y en ese modo de narrar que ya he dicho que funciona muy bien, pero que dé tan poca información "didáctica" de lo que muestra.

La escena de los estorninos es colosal.

No sé yo si es lo ideal ver una peli justo después de leerse el libro, pero lo que sí sé es que a esta peli eso no le ha sentado nada bien. En otras circunstancias la pelí se podía haber disfrutado, pero es que, si el libro es mágico la peli se queda en un simple relato de hechos unos tras de otras sin ninguna quimica.

Para empezar, Becky para mi gusto se ha comido mínimo 2 phoskitos de más a como yo me la imaginaba y la veo más chabacana que hija dulce del juez. La relación con Hackelberry Finn no es muy diferente a la relación con cualquiera de los otros niños, y la falta de capítulos como el de la búsqueda del tesoro y el cambio de final no hacen más provocar su caida por el barranco.

Cualquiera que dijera la frase de que una imagen vale más que mil palabras está claro que no lo decía por esto. Vale que los libros suelen ser mejores, pero aquí la diferencia es demasiado grande.