La versión en 1080 que se consigue por internet ocupa cerca de 1.6 GB, que podrías utilizar como espacio vacío, o para guardar cualquier otra cosa, por si las moscas. ¡Imagínate cuántos caracteres puedes escribir en 1.6GB!
Hay películas peores, algo que las hace más memorables.
El costado filosófico de la trama parece escrito por un tacaño narcisista hipocondríaco que se suicidaría porque le creció un grano.
Los personajes centrales (el resucitado y su novia) son una pareja emocionalmente inmadura, de esas que dan un pasito hacia adelante y un pasito hacia atrás (como bailando la macarena). Si te vas a clavar esto un sábado a la noche, y estás involucrado en una relación de estas características, mirar esta película podría resultar en un desastre para tu sábado, ya que podría poner al descubierto la farsa que vivís, y dejarte sin el pan y sin la torta durante todo el fin de semana.
Eso sí: si querés compartirla con alguien que cuestiona la realidad con cierta dosis de sarcasmo, podría funcionar, siempre y cuando tengas, como plan B, un capítulo de algo para quitártela, porque se te pega el olor. Ah, y otra botella de vino.