Esto si que es una película bien nominada para los oscars de este 2010. Una gran historia basada en hechos reales. Pero no os equivoquéis los que no la hayáis visto.

Si miráis solo la portada de la peli, os puede llevar a engaños. No busquéis una Invictus, porque a diferencia de aquella, el deporte no es lo principal, es un mero complemento. Y eso es lo que más valoro de la película, que no sea una más de grandes azañas deportivas, donde un equipo pequeño gana al final el campeonato en un partido de infarto.

Para nada. The Blind Side es la historia de un ser humano al cual la diosa fortuna le ha dado siempre la espalda. Nunca conoció a su padre, su madre una drogadicta y prostituta, abandonado por la sociedad y sin un lugar fijo donde poder dormir. Pero no se rinde y no da el mundo por perdido. Es puro, dulce y cariñoso. Pero un gigante con corazón no se ve todos los días. Su fisico le llevará a un instituto, donde por causas de la vida, una familia adinerada lo acogerá en su casa. Allí tendrá por primera vez las cosas normales y habituales en un ser humano normal y corriente. Una cama, ropa y comida. Posteriormente llegará la parte donde le enseñen a jugar al rugby y todo su progreso, pero eso os lo dejo para cuando la veáis. Esta vez me voy a centrar solo en el personaje de la historia. El director nos quiere enseñar, que basta ya de excusas para no poder ser alguien en la vida. Y no es que todos tengan la suerte de ser recogidos por una familia con dinero y poder. No, el tema es la voluntad del chico, a cambiar su porvenir, y a no limitarse a dar pena y a excusarse por el barrio del cual procede. Veremos como el chico se convierte en un gran deportista, pero para entrar en la universidad, tendrá que ganárselo académicamente. Y ahí está su triunfo. Un chaval que no comprendía lo que leía, que dejaba los exámenes en blanco por falta de conocimiento y el cual supera todas las adversidades a base de tesón.

El hombre no sabe en realidad donde están sus límites, ni hasta donde puede llegar. Esa es la moraleja de este gran film. Otros de su barrio optaron por la vida fácil y acabaron muriendo muy jóvenes. Grandes actuaciones, me ha sorprendido Quinton Aaron, ya no solo en su parecido físico con el verdadero protagonista, sino en la tranquilidad perfecta para creernos al personaje. Y por otro lado al enano Jae Head, me ha encantado este chavalín, expontáneo, natural y cómico. Sorpresón. Y Sandra Bullock muy correcta en algo que la saca de su género preferido la comedia.

Lo primero que no trago es a Sandra Bullock en una peli que no sea una comedia y a veces un drama, fuera de ahí, desentona. Y aquí es un claro ejemplo de ello. No me la creo en su papel de policía y mucho menos aún, en la historia que lleva detrás. ( ver spoiler 1 )

Ultimamente he visto una serie de películas donde se intenta conseguir el asesinato perfecto, y eso es IMPOSIBLE. Pero lo penoso de aquí, es que los tíos estos están curtidos en las temporadas de C.S.I. ( ver spoiler 2 ) Y como consecuencia, cometen un asesinato y desafian a la policía a descubrir si fueron ellos o no. Lo peculiar, lo de siempre. Dos tipos bien distintos. Uno débil, con un peinado a lo Romeo y supertímido... pero es el más empollón de los dos y el que maneja los detalles. El otro es el típico guaperas, que arrastra a las nenas, el chulito del instituto, malcriado por los padres que pasan de él, dejándole a su libre albedrío, eso si, con una buena VISA y MASTER CARD.

Lo díficil es entender como estos polis dan con el resultado, con lo poco " autoritarios " que son. ( ver spoiler 3 )

La primera parte es bastante interesante, en cuanto al desarrollo de los planes trazados por los dos lumbreras y como la poli, sigue pistas falsas. A raíz de que imaginan quienes han sido, deja de tener interés y más aún cuando parecían dos tíos con todo bajo control y de repente lo cuentan todo hasta en radio macuto.

En fin, pésimo thriller, con un comienzo esperanzador, rodeado de pobres actuaciones donde no se salva ni el tato y coñazo del bueno en la segunda parte, donde contarás los segundos que restan para llegar al final. Por cierto, ¿ porqué hizo una peli tan larga si no hacía falta ?

Todo aquel que se disponga a ocupar un asiento para ver esta película de Juan Calvo, sabe a lo que se dispone. No se va a encontrar una obra maestra de la comedia moderna, sencillamente porque no la hay hoy día. Pero tengo que ser franco, no se van a aburrir. Es una peli muy entretenida en gran parte por la frescura y el buen hacer de sus protagonistas principales Santi Millán y Paz Vega. Yo me tragaría cualquier bodrio con solo verla a ella en pantalla, y no es solo por su belleza y por los instintos eróticos que transmite su imagen, voy más allá. Es una chica que transmite buen rollo y diversión, su forma de hablar, su acento tan marcado, su mirada, es un placer disfrutarla en una pantalla.

La historia la encuentro un poco ñoña, una chica que busca trabajar en el mundo de la televisión y que se deja engañar por un aprovechado. Esto tristemente ocurre muchas veces en la realidad, chicas jóvenes y guapas que son convencidas para pasar por la cama de " alguien importante " con la promesa de una carrera llena de éxitos. ¡¡¡ La realidad es muy diferente !!! Por otro lado el típico hijo solitario y superprotegido por mamá, en un papel muy desaprovechado por la grandísima Chus Lampreave. Este trabaja de acomodador en el cine y sueña con vivir una historia de amor como se ve en la pantalla gigante. Por cuestiones del destino acabarán formando parte de un concurso televisivo donde tendrán que pasar un tiempo juntos para llevarse una pasta gansa. Se suceden una serie de sucesos muy entretenidos que harán que la hora y media que dura el metraje no te aburras demasiado.

Al estilo Torrente, se aprovecha las apariciones breves de personajes conocidos entre ellos Constantino Romero y Ornella Muti. Y como secundarios con un papel activo en la historia nos encontraremos a Santiago Segura haciendo lo de siempre y un Pepe Viyuela realmente ridículo en su imitación de Terminator.

Lo dicho, una peli para pasar un rato entretenido.

Chicas perdidas es una película que me deja mal cuerpo y no por lo que cuenta, sino por como lo cuenta.

Si me traes una historia real, lo mínimo que exijo es que me crea lo que me estás contando y que sienta guardando las distancias lo que sienten los personajes que te encuentras en pantalla. Es verdad que no voy a sufrir como la madre o las hermanas, pero si debo pasarlo al menos mal como mínimo y eso lamentablemente no ocurre.

El primer tercio de la película arranca bien con la no asistencia de la hermana mayor a la reunión familiar y la preocupación de una de sus hermanas y los primeros pasos de la investigación. Luego se convierte en una especie de documental sobre como poner en tela de juicio el trabajo y la desidia policial. La madre se convierte en una abanderada de la situación, representando a varias madres que han pasado por lo mismo, pero no me llega el drama por el cual están pasando. Y es una pena. Que si, que es una madre coraje y las que imponen de verdad, pero lo cierto es que no siento lo que apriori tendría que sentir.

Un producto que por su falta de madurez se queda en una mera peli de sobremesa de fin de semana.

Y yo me pregunto, ¿ de verdad sale Zac Efron en la peli ? jajajaja.

Burr Steers ha querido coger a la gallina de los huevos de oro a última hora y con muchas prisas, e improvisar una ¿ película ? sobre la marcha, para aprovechar a este actor en la cima después del éxito cosechado en High School.