Es genial. Tienes unos planos de lo que puede ser El Paso realmente maravillosos (con los desérticos paraísos almerienses). Una de las razones que aportan crudeza y realidad en las escenas, es sin lugar a dudas la sencillez de los vestuarios y lo rudo que parecen los actores. Se mezclan odio, cazarrecompensas y el eterno dilema de la venganza, que en esta ocasión, ha formado una leyenda en el cine. Leone, tan odiado y tan amado, ha cambiado a partir de aquí, el estereotipo del bueno bueno y del malo que recibe su merecido. En esta cinta, el malo es cruel y despiadado y el bueno está sediento de venganza y es implacable. Nunca antes, en ninguna película del oeste se había levantado tanto polvo tanto dentro como fuera de la pantalla.
Esencial en cualquier videoteca, así como su Banda Sonora Original a cargo del maestro Ennio Morricone.

El reclamo de su trio de actores principales se queda en eso, un reclamo.

Después de ver los primeros diez minutos me producía una sensación de timo cual rata atrapada en papel pegamento con la agonía de no llegar al queso.

Solo algunas escenas son capaces de salvar la película y hacer que olvide por segundos lo malo que pueden ser algunos maquetistas y un guión con más altibajos que una carretera de provincias. Para más inri, la música parece copiada de "2001, Una Odisea en el Espacio".

Lo mejor: Farrah Fawcett luce un "look" irresistible. La película tiene su gracia.
Lo Peor: Lo soso que pueden ser actores de la talla de Douglas (bien entrado en años), Keitel (coleta incluída) y Fawcett (bronceada en rayos uva) cuando están mal dirigidos.

Con esta película vemos como se va deteriorando la saga Callahan a pasos agigantados. La buena calidad de la primera y la trama de la segunda se va al traste en esta tercera parte.

Aprovechando los residuos "hippies" supervivientes de los 60, un grupo de estos "peludos desvergonzados" montan un grupo terrorista reivindicativo del momento. Mientras, Harry se dedica a hacer un casting para polis con más mala leche que el "gafitas" de Operación Triunfo.

Lo mejor: Es Harry en estado puro y duro. Frases memorables como "...Levanta golfo!". Visita pseudo-virtual de la prisión de Alcatraz (sin muñeco al final).

Lo peor: Que a partir de esta, la saga se va al garete.

Para ser ciudadano con derechos a elegir presidente, ir a la universidad o comprarte una casa con techo duro, debes de meterte en la mili del futuro. Si tienes buena nota en el examen de acceso, eres un piloto espacial de "maquetas de crucero imperial galáctico" pero más lento. Si por el contrario eres mediocre, terminas en Klendathu cepillándote cucarachas como mala uva.

Esta película es tan buena como incomprendida. Estamos ante una ironía tan grande como puede ser "La Naranja Mecánica" o "Brazil", pero con una violencia tan innecesaria como exquisita. Paul "Visionario" Verhoeven intenta con sus marionetas, que veamos una cruda realidad de lo que supone el ejército (especialmente el américano) y su propaganda (idem) en un país (o planeta) donde es fundamental pertenecer a sus filas para ejercer derechos que en la actualidad no están vedados en países desarrollados.

Lo mejor: El guiño a las pelis serie Z. El siempre genial (y secundón) Michael Ironside y su brazo robotizado (¿herencia de Robocop?). Ver a Blanche De Veró (personaje de "Las chicas de Oro") haciendo de maestra de bachillerato ciega. El derroche de ironia en el argumento.

Lo Peor: Lo poco entendida que puede ser esta película. Que Casper "He-man" Van Dien se crea un actor y no una caricatura de comic. Dina Meyer desplazada por su aparente falta de carisma.

Una de las mejores adaptaciones al cine de una novela de Stephen King, con escenas sumamente memorables y difíciles de olvidar.

Jack Nicholson hace lo de siempre, pero esta vez atado (aunque no mucho) a las poderosas riendas de Stanley Kubrick . Shelley Duvall hace que "suba el pan" cada vez que mueve su expresiva cara.

Lo mejor: Kubrick, Nicholson, King, el niño en el triciclo, el profeta negro...
Lo peor: Algo que aún hoy no llego a comprender... ¿QUIÉN HIZO EL CASTING DE ACTORES DE DOBLAJE? Hace que los diálogos sean anodinos y la voz de Shelley Duvall (Verónica Forqué) nos recuerda a lo mejor de Almodovar.