Media votos
6,7
Votos
3.291
Críticas
174
Listas
4
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Rober:
7
6,8
1.903
Drama
Felicia es una adolescente que ha vivido siempre en una aldea irlandesa. Cuando su novio Johnny emigra a Inglaterra para buscar trabajo, Felicia lo sigue, sobre todo porque está embarazada. Cuando llega a Birmingham conoce a Joseph Ambrose Hilditch, el meticuloso gerente de una empresa de comidas. (FILMAFFINITY)
10 de diciembre de 2006
15 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
La verde Irlanda, humilde, católica, conservadora, mayoritariamente antibritánica. De allí parte Felicia hacia Inglaterra y allí encuentra a.....Bob Hoskins. Los monstruos no nacen.
No es una película genial. Le faltan escalones para ello. Pero el armenio-canadiense Atom Ergoyan consigue hacer un cine artesanal esforzado y eficaz.
El es un maduro jefe de catering solitario y anclado en el tiempo, en su tiempo. Ella es poco más de una niña, cuyo mundo oscila entre su pueblo irlandés y su reciente e intenso amor. De alguna manera se necesitan el uno al otro. Ella necesita buscar al chico de sus sueños. El necesita que le necesiten.
La información se va administrando al espectador en pequeñas dosis, adecuadamente, con correctos flahs-backs. Esto permite ir "adivinando" lo que viene a continuación. Se mantiene la tensión.
Son interesantes las escenas en que prepara para sí mismo unos cotidianos festines gastronómicos siguiendo los videos de su madre, presentadora en su tiempo de programas de cocina en televisión.
La película ante todo, entretiene, engancha. No hacen falta finales sorprendentes y rompedores. Todo se va cociendo poco a poco. A fuego lento.
No es una película genial. Le faltan escalones para ello. Pero el armenio-canadiense Atom Ergoyan consigue hacer un cine artesanal esforzado y eficaz.
El es un maduro jefe de catering solitario y anclado en el tiempo, en su tiempo. Ella es poco más de una niña, cuyo mundo oscila entre su pueblo irlandés y su reciente e intenso amor. De alguna manera se necesitan el uno al otro. Ella necesita buscar al chico de sus sueños. El necesita que le necesiten.
La información se va administrando al espectador en pequeñas dosis, adecuadamente, con correctos flahs-backs. Esto permite ir "adivinando" lo que viene a continuación. Se mantiene la tensión.
Son interesantes las escenas en que prepara para sí mismo unos cotidianos festines gastronómicos siguiendo los videos de su madre, presentadora en su tiempo de programas de cocina en televisión.
La película ante todo, entretiene, engancha. No hacen falta finales sorprendentes y rompedores. Todo se va cociendo poco a poco. A fuego lento.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
La historia parte de un amor adolescente, desinteresado y desemboca en un amor interesado enfermo, cruel, asesino.
"Muchas veces me encuentro solo" dice el protagonista (excelente Bob Hoskins). Una vez más el cine recoge la historia del niño obeso, malcriado, dependiente, acomplejado, con una madre autoritaria y brillante (probablemente muy superior a él), que deviene con los años, sin el buscarlo en absoluto, en una asesino en serie. Es incapaz de obtener un amor real y crea amores ficticios, situaciones irreales que él crea y domina.
Como dice ella al final:, "Era un asesino, pero encerraba un alma noble, que en el principio sería un alma pura" Los monstruos se hacen. La vida crea monstruos.
"Muchas veces me encuentro solo" dice el protagonista (excelente Bob Hoskins). Una vez más el cine recoge la historia del niño obeso, malcriado, dependiente, acomplejado, con una madre autoritaria y brillante (probablemente muy superior a él), que deviene con los años, sin el buscarlo en absoluto, en una asesino en serie. Es incapaz de obtener un amor real y crea amores ficticios, situaciones irreales que él crea y domina.
Como dice ella al final:, "Era un asesino, pero encerraba un alma noble, que en el principio sería un alma pura" Los monstruos se hacen. La vida crea monstruos.