Esta película es sin duda una adaptación bastante fiel de lo que hoy por hoy es un clásico de la TV, casi podría calificarse como homenaje. La interpretación de Carrel del personaje de Max bebe del propio Don Adams, el film está repleto de constantes guiños a la serie original, incluso respetando las cortinas de entrada y final, tal vez el personaje de 99 y el contexto histórico, en cuanto a looks y tecnología punta se refiere sean lo único que diste un poco de la “Get Smart” de los sesenta.

Bajo mi opinión el mayor acierto de la cinta, es transmitir la esencia de la serie, con ese mismo humor sutil, privado de violencia, acidez, critica social, o utilizando la propia ofensa como herramienta en el gag, ese tipo de humor al que todos estamos acostumbrados.

Curiosamente es aquí donde quizá se encuentre el mayor fallo, en muchas ocasiones los chistes apenas llegan si cabe a causar una sonrisa, y en muchos casos se hace evidente la indiferencia en el espectador, entre los cuales me cuento; y es que este humor no causa el mismo efecto que antaño, lo cual sumado a la extensa duración de la cinta en comparación a lo extremadamente sencillo de la trama puede terminar produciendo una sensación altamente soporífera.

Si se hiciera un remake fidedigno de una película de Búster Keaton, respetando hasta el mínimo detalle, ¿tendría el mismo éxito que antaño?.

No obstante es un filme fresco, que puede llegar a aburrirte, pero que bien puede ser usado en una reunión de amigos como telón de fondo pero sin hacerle mucho caso.

Por la interpretación de Carrel y la valentía de hacer humor exento de topicazos a lo Scary movie se merece el aprobado.