Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Arponero Sánchez:
1
Comedia Comedia sobre el célebre descubridor de América que mezcla referencias a la situación política española de la época en que se rodó la película con referencias históricas al Renacimiento. (FILMAFFINITY)
18 de septiembre de 2020
12 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
A veces paseo por Filmaffnity buscando críticas de películas que vi hace tiempo; a veces incluso escribo una a partir de mis recuerdos.

Pasaba el verano del 82 en la playa, junto a mi entonces novia, luego esposa. Que jóvenes éramos... Nos apetecía ir al cine de verano, y echaban “Cristobal Colón, de Oficio Descubridor”. Era el éxito de taquilla de ese verano, con unas cifras rompedoras, media España la había visto ya y la otra media hablaba de ella.

Pajares y Ozores no eran santos de mi devoción, pero me dije, si tanta gente la está viendo, algo tendrá. Nunca me gustó descartar algo sin haberlo probado, y menos por prejuicios de gafapasta (ya lo era entonces, aunque no supiera aún que se llamaba así).

Así que al cine de verano nos fuimos mi novia y yo, con bocata y cojín para el asiento, como debe ser, y empezó la película.

Diez minutos después, no sabía donde meterme. El caso es que el público a mi alredor se reía, a veces hasta se reían mucho. Sin embargo a mi no me hacían gracia los gags, lo que era de esperar pues la contemplación de la estupidez nunca me ha resultado entretenida (esto se ha mantenido en el tiempo y me ha privado en mi vida de disfrutar de series como “Los Serrano”, ¡qué pérdida!).

La película seguía su desarrollo, saltando de una tontería a otra, de un gag sobre curas salidos a uno sobre mariquitas y de ahí a cualquier otro tema igualmente escabroso. Eran los 80, y la corrección política aún no había comenzado su labor de censura en el cine y la literatura.

Sin embargo aún faltaba el clímax, la ordalía, el holocausto intelectual en el altar del humor español: en un momento dado, los gags comenzaron a consistir en tirarse pedos. Pedos. Largos, sonoros, retumbantes. Enormes pedos. Mayestáticos pedos. A los personajes, especialmente al personaje de la reina Isabel (lo recuerdo bien), se le escapaban continuamente pedos, y los espectadores no paraban de reírse, algunos hasta lloraban de risa.

Y yo lo siento, pero la escatología, como los accidentes y las caídas, no me hace ninguna gracia. Quizá es que soy rarito. Por favor, que vergüenza pasé el resto de la película, y que opinión se me quedó de nuestro cine y de nuestro público, y que mal rato final me tuve que tragar mientras duró el escalofriante número musical protagonizado por los Hermanos Pinzones.

Pellícula zafia, soez, grosera, indigna, vil. Vergüenza ajena.

Sin embargo siempre puede ser peor, ahora lo sé bien: en diez críticas en filmaffinity, hay 4 dieces. Parecen irónicos, pero sospecho que alguno es sincero. Es lo que hay, este es nuestro país, y aquí vivimos.

Manda huevos.

#sígueme en Twitter @ArponeroSanchez, y si te ha gustado no olvides dar un positivo!
Arponero Sánchez
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow