Al poco de comenzar la película le dan la noticia a Kakihara de la desaparición de su jefe, y el ambicioso líder sadomasoquista yakuza da una calada y, tras ello, el humo sale por los dos cortes que exhibe en sus mejillas.

Conciso pero efectivo resumen de lo que se va a ver en lo que resta de largometraje.

Estamos ante un claro exponente del cine gore japonés. Aquí todos conspiran contra todos (muy yakuza esto) y, la verdad, es que se podría definir como un desmesurado baño de sangre que haría sonrojar hasta a la mismísima condesa de Bàthory.

Respecto a Ichi (uno, en japonés) lo conoceremos más bien cuando la película ha avanzado bastante, y en él contemplaremos a un tipo con una clara perturbación mental que tiene una forma más bien peculiar de "descargarse".

La película la vi al poco de estrenarse hace muchos años en casa de un amigo de aquel entonces, apenas me acordaba de ella... Interesante el revisionarla en el ciclo de cine al que semanalmente acudo.

Tiene unas interpretaciones interesantes, me quedo por supuesto con la de Kakihara.

De ritmo, estamos ante una obra rápida, con un guión algo confuso. (Después de verla pusimos en común algunos aspectos de la historia para quedarnos bien con todo, cosa que yo personalmente agradecí).

Como curiosidad os diré que alguien comentó que del director, ésta, no es la película más explícita.

Me gustó la banda sonora japonesa.

Poco más que decir, yo quitando las míticas películas de Akira Kurosawa y las posteriores de Takeshi Kitano, no he visto mucho cine japonés. Esta en cuestión no me pareció un "peliculón", como se considera por ahí.

Gracias por leer.