Joachim Ronning y Espen Sandberg han sabido respetar la esencia que tanto caracteriza a estas películas, a diferencia de su antecesor, Rob Marshall. Los realizadores noruegos entregan una reinvención que ha sabido mezclar a viejos y nuevos protagonistas, que ha encontrado el equilibrio perdido y, sobre todo, que ha descubierto nuevas historias que desembocan en lo que todos ya conocíamos: la imprevisibilidad de nuestros piratas.

Los efectos especiales y la ambientación cabe decir que, en su mayoría, son bastante buenos ambos… sin embargo destaca negativamente el Sparrow joven. En el cine la mayoría del tiempo pasa desapercibido pero el que consiga fijarse verá “el truco” en parte de la boca. Aún queda para que puedan replicar con exactitud en CGI a los actores reales. Por otro lado, la película da la impresión de estar rodada en lugares abiertos y reales sin mucho retoque.

También contamos con nuevas historias y personajes, que esta vez encajan con la tónica de la saga. Para empezar, una muchacha que nos recuerda un poco a la impertinente Elizabeth Swan, con su altanería e inteligencia. Una joven, sin duda, adelantada a su época y por lo que la tachan de bruja, Carina Smith interpretada por Kaya Scodelario. Además tenemos a Henry Turner, al que da vida Brenton Thwaites, con quien comienza esta historia.
La gran incorporación, el Capitán Armando Salazar, no es otro que Javier Bardem. Salazar fue condenado a morir y quedarse atrapado en el Triángulo del Diablo por cortesía de un joven Jack que apenas empezaba su carrera en la piratería. Tal y como cita Salazar “se lo quitó todo” y eso es lo que piensa hacer una vez quede liberado del Triángulo.

En definitiva: 'Piratas del Caribe: La venganza de Salazar' es una película que supera bastante las expectativas de la audiencia que quedó insatisfecha tras ‘En mareas misteriosas’. Buen guión, interesante argumento de partida, buenas incorporaciones y reincorporaciones, actores bien elegidos y dirigidos.

-Lo mejor: El guión es bastante bueno y consigue mantenerte en el ritmo de la película en casi todo momento. Las actuaciones de todos y cada uno de los actores: algunos siguen manteniendo su nivel tras cinco entregas y otros nuevos que consiguen llegar al nivel que se les exigía e incluso un poco más.

-Lo peor: La parte de la película que transcurre en la isla de San Martín, algo tediosa y pesada. Algunos sucesos que no casan con la actitud de Jack Sparrow.

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