Western moderno de altos vuelos, basado en la película de mismo título de 1.957. Conserva un buen puñado de elementos comunes al género y los potencia.

Estructura clásica que se agradece; buen ritmo, tensión sostenida, y una trama donde se va minando, uno a uno, tanto la integridad como la conciencia de quienes trasladan al delincuente y asesino Ben Wade.

Magnífica interpretación del inexpresivo Russell Crowe, el cual, caracterizando a un maldito forajido, duro y desalmado, le va bien a esa ausencia de emociones.

Christian Bale es un magnífico actor, muy prolífico y resolutivo, de variados registros que aplica con solvencia en cada uno de sus trabajos.

Merece una nota alta, pues manejando elementos comunes al género, aquí se potencian, destacando sus variados matices.