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Voto de Local Hero:
10
6,8
32.073
Drama
Narra una serie de reencuentros en la vida de Salvador Mallo, un director de cine en su ocaso. Algunos de ellos físicos, y otros recordados, como su infancia en los años 60, cuando emigró con sus padres a Paterna, un pueblo de Valencia, en busca de prosperidad, así como el primer deseo, su primer amor adulto ya en el Madrid de los 80, el dolor de la ruptura de este amor cuando todavía estaba vivo y palpitante, la escritura como única ... [+]
24 de marzo de 2019
5 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Al acudir a ver esta película ya vienes con ideas preconcebidas sobre si es autobiográfica de su director y demás. Es imposible no haber escuchado o leído algo al respecto por la fama que ya desde un principio le va precediendo.
Pero puede que exista algo más detrás de esta supuesta autobiografía.
Sigo en "spoiler".
Pero puede que exista algo más detrás de esta supuesta autobiografía.
Sigo en "spoiler".
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Durante el visionado, dichas ideas preconcebidas efectivamente van coincidiendo con ciertos rasgos calcados entre la historia de Salvador Mallo y la de Almodóvar… Aunque no todo, hay ciertas cosas que no coinciden y que te hacen dudar.
Los supuestos flashbacks sobre la infancia de Mallo/Almódovar van reforzando la idea de que puedan ser la misma persona. Pero no son flashbacks, sino el rodaje de una película del cual nos enteramos al final.
Almodóvar nos mantiene expectantes durante 2 horas con ese doble engaño, el de que conjeturemos sobre si es la misma persona y el de hacernos creer que así fue exactamente su infancia….
Y nos mantiene tan expectantes que no nos percatarnos que estamos atrapados en una tupida tela de araña que él mismo ha tejido, para asestarnos un grandioso golpe final: la descripción del primer deseo sexual, en este caso de un niño de 9 años, de ese deseo tan genuino que aparece de una forma absolutamente natural y que puede, en mayor o en menor medida, determinar cuáles serán nuestras conductas sexuales a partir de entonces y en qué medida estas contribuirán a nuestra formación como personas.
Es ahí mismo donde el director nos coge a todos por la entrepierna para que no tengamos más remedio que “desnudarnos” sin escapatoria posible y que, de una manera consciente o inconsciente, reflexiones sobre cuál fue tu primer deseo, un primer deseo que te arreboló o que te enfebreció o que te turbó en proporciones máximas o todo a la vez….tan oculto pero a la vez tan necesario en la vida de cada cual, te llames Mallo, Almodóvar o Pepito Pérez.
Antológico giro final.
Los supuestos flashbacks sobre la infancia de Mallo/Almódovar van reforzando la idea de que puedan ser la misma persona. Pero no son flashbacks, sino el rodaje de una película del cual nos enteramos al final.
Almodóvar nos mantiene expectantes durante 2 horas con ese doble engaño, el de que conjeturemos sobre si es la misma persona y el de hacernos creer que así fue exactamente su infancia….
Y nos mantiene tan expectantes que no nos percatarnos que estamos atrapados en una tupida tela de araña que él mismo ha tejido, para asestarnos un grandioso golpe final: la descripción del primer deseo sexual, en este caso de un niño de 9 años, de ese deseo tan genuino que aparece de una forma absolutamente natural y que puede, en mayor o en menor medida, determinar cuáles serán nuestras conductas sexuales a partir de entonces y en qué medida estas contribuirán a nuestra formación como personas.
Es ahí mismo donde el director nos coge a todos por la entrepierna para que no tengamos más remedio que “desnudarnos” sin escapatoria posible y que, de una manera consciente o inconsciente, reflexiones sobre cuál fue tu primer deseo, un primer deseo que te arreboló o que te enfebreció o que te turbó en proporciones máximas o todo a la vez….tan oculto pero a la vez tan necesario en la vida de cada cual, te llames Mallo, Almodóvar o Pepito Pérez.
Antológico giro final.